LEA TAMBIÉN: VIDEO: Otra tragedia aérea sacude al mundo
En un conteo preliminar, se ha establecido que hay 51 españoles, 55 alemanes – uno de ellos con doble nacionalidad alemana-japonesa y otros dos alemana-kazaja -; dos argentinos, dos australianos, un belga, dos colombianos, un danés, tres estadounidenses, un holandés, dos iraníes, un israelí, un marroquí, un mexicano, un británico y dos venezolanos.
"Estamos teniendo problemas con la doble nacionalidad de algunas de las víctimas", recalcó el ministro.
LEA TAMBIÉN:Dos argentinos viajaban en el avión que se accidentó en los Alpes franceses
Las autoridades han pedido comprensión por la ausencia de una lista definitiva 24 horas después de la tragedia. Enfatizó que los datos suministrados hasta ahora no son en ningún caso firmes.
Operaciones de rescate
El avión quedó "pulverizado" y el trabajo de los médicos forenses será "extremadamente largo y difícil", pese a que se han destinado "medios considerables" para avanzar lo antes posible, destacó este miércoles el primer ministro francés, Manuel Valls, al dar el más reciente reporte sobre el aparatoso accidente del Airbus A320.
"La operación va a durar varios días, porque hay que tener en cuenta las condiciones extremas de la topología de la cumbre en la que se estrelló", apuntó.
En el lugar del siniestro el coordinador del dispositivo de helicópteros, Xabier Roy, dijo que se descarta "casi por completo" poder recuperar en el corto plazo los cuerpos de las víctimas. Roy explicó que las condiciones en el lugar son "más difíciles" que el día del accidente a causa de la lluvia que cayó esa noche, lo que convierte el escarpado terreno en algo muy resbaladizo.
En esta fotografía, facilitada por el Ministerio de Asuntos Exteriores de Alemania, se pueden apreciar lo que queda del Airbus320, cuando realizaba la ruta de Barcelona a Düsseldorf. En las labores de búsqueda de los cuerpos y de los restos de fuselaje del avión participan más de 600 bomberos y militares.
Helicópteros de la gendarmería francesa retoman este miércoles la búsqueda de los cuerpos y el fuselaje del avión siniestrado en Seyne Les Alpes en Francia. El recorrido que deben realizar revela las dificultades topográficas que enfrentan los equipos de rescate.
El fiscal de Marsella, Brice Robin, en el centro de las miradas, se dirige a los medios de comunicación. La Fiscalía confía en que esta tarde se conozcan ya los primeros resultados del análisis de la caja negra del Airbus A320.
Las llamadas "cajas negras" de un avión son los dispositivos que graban las comunicaciones y parámetros de vuelo de una aeronave con el objetivo de que esos datos puedan servir para analizar las causas de un eventual accidente. En esta fotografía, facilitada por el organismo francés de Investigación de Accidentes (BEA), corresponde a una de las cajas negras del Airbus A320 que se ha hallado en el lugar del accidente.
Francia cuenta, junto a Estados Unidos y Gran Bretaña, con uno de los organismos de expertos en accidentes aéreos más reputados del mundo, con una heterogénea plantilla donde trabajan ingenieros, expilotos, informáticos, matemáticos o especialistas en materiales. "El BEA francés tiene una gran reputación por varios elementos: esencialmente, está vinculado a la tradición aeronáutica francesa", explicó el redactor jefe del "Journal de l'Aviation", Romain Gillot, que recordó que todos los países cuentan con una institución similar.
El fiscal de Marsella, Brice Robin, destacó en una rueda de prensa que el primer paso será la identificación de los cuerpos: "Es indispensable, debemos comenzar por eso, porque se lo debemos a las familias de las víctimas". Las autoridades consideran que no hay ya casi posibilidades de encontrar con vida a alguna de las 150 personas (144 pasajeros y 6 miembros de la tripulación) que viajaban en el avión.
Un grupo de gendarmes se dirigen a pie a la base de operaciones. Este accidente se considera la mayor tragedia de una compañía de bajo coste en Europa.
Aterrizaje de los equipos de rescate en la base de operaciones.
Efectivos de bomberos y servicios de rescate a primera hora de la mañana en la base de operaciones.
Trabajadores de la multinacional Delphi, dos de cuyos empleados viajaban en el avión siniestrado en Francia, muestran fotografías de sus compañeros fallecidos, durante los cinco minutos de silencio en la factoría de la empresa en Sant Cugat del Vallés (Barcelona).
Los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, y el presidente francés, François Hollande, atienden a los medios tras la reunión mantenida en el Palacio del Elíseo, en París, Francia, el 24 de marzo del 2015. Los Reyes de España cancelaron su visita de Estado a Francia al enterarse del accidente aéreo. Todos quedaron muy impactados con la noticia.
Las banderas de España y de la Unión Europea ondean a media asta en el consulado español en Hamburgo (Alemania), en memoria de las víctimas.
El presidente de Lufthansa, Carsten Spohr, hace una declaración sobre el avión de la aerolínea Germanwings siniestrado, en el Centro de Aviación de Lufthansa en Fráncfort (Alemania). Spohr dijo que el accidente "es inexplicable" y que el aparato estaba técnicamente bien.
Empleados de la aerolínea Lufthansa guardan silencio en memoria de las víctimas. Varios de ellos junto con trabajadores de Germanwings dejaron velas con el número 4U9525, correspondiente al número de vuelo siniestrado.
El presidente de Alemania, Joachim Gauck, baja del avión presidencial peruano tras suspender su gira por América Latina, que iniciaba el martes, en medio de la consternación causada por el accidente de avión. "Con gran consternación he sabido del terrible accidente aéreo. Mis pensamientos ahora están con los familiares y amigos de las víctimas", destacó Gauck quien se encontraba en Perú cuando supo la noticia.
Vídeo
Vea la compleja topografía que enfrentan los equipos de rescate que atienden el siniestro del Airbus A320 de la aerolínea alemana Germanwings.
