Hoy hablaremos sobre las 10 primeras enmiendas de la Constitución conocidas como “La Carta de Derechos” aprobadas en 1791 para garantizar las libertades y derechos de los ciudadanos norteamericanos, y limitar los poderes del Estado.
Hoy hablaremos sobre las 10 primeras enmiendas de la Constitución conocidas como “La Carta de Derechos” aprobadas en 1791 para garantizar las libertades y derechos de los ciudadanos norteamericanos, y limitar los poderes del Estado.
La Primera Enmienda
La Primera Enmienda le otorga a los estadounidenses el derecho a la libertad de expresión, de reunión y de prensa. Esto quiere decir que los ciudadanos estadounidenses pueden expresar su opinión sin temer represalias del gobierno. Gracias a la Primera Enmienda, los estadounidenses pueden:
La Segunda Enmienda
La segunda enmienda dice: "Siendo necesaria para la seguridad de un Estado libre una Milicia bien organizada, no se deberá coartar el derecho del pueblo a poseer y portar Armas". Esta es la enmienda que le otorga a los ciudadanos estadounidenses el derecho a portar Armas de fuego.
Existen muchos debates a respecto entre los partidarios de la Segunda Enmienda y aquellos que defienden el control de armas de fuego, acerca si esta Segunda Enmienda es aplicable a individuos o milicias, pero hasta el momento, la Corte Suprema sostiene que otorga el derecho de propiedad de armas a los individuos.
La Tercera Enmienda
La Tercera Enmienda realizada a la Constitución de los Estados Unidos establece que el Ejército no puede ingresar de manera forzada en el hogar de alguien exigiendo alojamiento y comida.
La Cuarta Enmienda
La Cuarta Enmienda protege a los estadounidenses de los allanamientos e incautaciones ilegales. Esto significa que ningún agente del gobierno puede revisar o llevarse consigo la propiedad de alguien sin tener una orden válida, la cual se basa en una causa probable.
Esta enmienda también incluye el registro e incautación ilegal de las personas. Eso significa que sin una orden de arresto, un individuo no puede ser detenido arbitrariamente.
La Quinta Enmienda
La Quinta Enmienda protege los derechos penales. Indica que nadie debe ser retenido por cometer un crimen a menos que esté debidamente acusado, que no puede ser juzgado por el mismo crimen dos veces y que usted no tiene que testificar en su propia contra. Esta enmienda también indica que no podrá establecerse la pena, de no existir el debido proceso legal.
La Sexta Enmienda
La Sexta Enmienda otorga a los ciudadanos el "derecho a un juicio expedito y público, con un jurado imparcial". Esta enmienda protege a las personas que han sido acusadas de delitos penales, al permitirles derechos específicos.
En un juicio expedito y un jurado imparcial, la Sexta Enmienda también garantiza que al acusado:
La Séptima Enmienda
La Séptima Enmienda garantiza la presencia de un jurado en los casos de los tribunales civiles federales. Esta enmienda también establece ciertas limitaciones a los jueces y su capacidad para anular al jurado. En los casos de derecho consuetudinario, el jurado es quien decide el veredicto y el juez es quien determina la pena.
La Octava Enmienda
Una vez más, discutiendo los derechos del acusado, la Octava Enmienda establece:
"No se requerirán fianzas excesivas, ni se impondrán multas excesivas ni castigos crueles e inusuales". Esto significa que las penas deben ser justas, encajar con el crimen y no pueden ser crueles ni inusuales. También significa que las multas legales no pueden ser fijadas con montos excesivamente elevados que solamente los ricos podrían permitirse pagar.
La Novena Enmienda
La Novena Enmienda abarca todo, estableciendo básicamente que existen derechos naturales fundamentales que le pertenecen a las personas, incluso más allá de los que se determinan en la Declaración de los Derechos, y que tales derechos tampoco podrán ser violados. Estos derechos se llaman derechos no enumerados y están protegidos aunque no estén específicamente detallados en la Declaración de los Derechos.
La Décima Enmienda
La Décima Enmienda realizada a la Constitución de los Estados Unidos establece que, a menos que esté delegado o prohibido dentro de la Constitución, corresponde al Estado y/o al pueblo decidir. Esta Enmienda establece la relación entre el gobierno federal y estadal, detallando así quién está a cargo de qué. En términos más simples, si es dictado por la Constitución, es un asunto federal. Si no es así, entonces es un asunto que los estados deben manejar y el gobierno federal no debe involucrarse.
Si usted tiene alguna pregunta acerca de este artículo o cualquier otra acusación criminal, llame al Abogado en Defensa Criminal de la Ciudad de Miami Albert Quirantes al: 305-644-1800 o visite nuestra página web www.CriminalDefendant.com para ingresar directamente al bufete, enviarnos un mensaje de texto u obtener un mapa de localización de nuestra oficina.