VILLA CLARA, Desde hace dos meses, Yadiel Morales, joven residente en la capital de Cuba, apenas descansa las madrugadas. Este horario resulta el más idóneo para conectarse desde la comodidad de su cuarto y mantener activo tres de sus canales de Telegram, a los que sube contenido multimedia, posteriormente descargado por usuarios dispersos por toda Cuba. El método de descargas S3 se ha popularizado en la Isla en el último trimestre gracias a la variedad de opciones de entretenimiento, mayoritariamente gratuito, que ofrecen estos administradores y sin invertir datos móviles para adquirir series, películas o videojuegos, que antes solo podían encontrarse en el llamado paquete semanal.
“Mensualmente, gastaba más de 300 pesos con el paquetero. Me lo traían a la casa en un disco y yo escogía lo que más me convenía”, refiere Yadiel, quien comenzó a usar la nueva modalidad virtual por casualidad. “Empecé a buscar en grupos de Telegram y un amigo me explicó cómo funcionaba. Al principio solamente descargaba contenido, hasta que me di cuenta que tenía muchas películas y series almacenadas en mi computadora y que podía compartirlas con los miembros de la comunidad y, a la vez, sacarle algún beneficio”, reseña el portal web CubaNet.
El servicio de almacenamiento S3, creado por la compañía Amazon, se usa en Cuba mediante la aplicación de mensajería instantánea ToDus, desarrollada por la Universidad de Ciencias Informáticas, que permite la libre tarificación de los datos. Un video explicativo, disponible en el canal de youtube TecnoLike Plus, asegura que más de 50 000 cubanos conocen este método de descargas, razón principal de que sea reconocida por los propios miembros como Comunidad S3. Los materiales son compartidos mediante enlaces en grupos de Telegram y a través de archivos comprimidos en TXT.
De acuerdo con otro administrador de estos canales que utiliza el alias de Jimoto, este TXT se envía a los usuarios para que los descarguen y lo agreguen a la cola en sus apps correspondientes. La mayoría de los adjuntos, cuando ocupan mucho espacio, se comprimen en particiones más pequeñas, para que sea posible subirlos antes de los dos minutos, que resulta el límite de tiempo para posicionar un archivo. Según el propio joven, que comparte contenido en un canal nombrado Series & Más, cualquier usuario es capaz de crear un canal con el objetivo que desee. Algunos de estos canales actualmente poseen más de 20.000 suscriptores de todo el país.
“Publicamos no solo de Netflix, también de HBO, Telecinco, etc… Hay quienes se especializan en un tipo de contenido, otros en varios. Mientras sea capaz de publicar, todo está bien. Facilitamos más multimedia que el famoso paquete, incluso, publicamos cosas recién lanzadas o de transmisión diaria. Con respecto a los pedidos, en su mayoría son series y películas, además de Reality y telenovelas, pero también existen casos más aislados en los que solicitan aplicaciones Android y programas para PC. En fin, todo lo que el usuario encuentre en la Internet puede pedirlo a nuestro canal”.
Además de conocidas series, películas, juegos o aplicaciones, así como noticias de actualidad de televisoras extranjeras o música censurada en la radio cubana, algunos de estos canales ponen a disposición de los usuarios otro tipo de materiales del llamado cine para adultos, usualmente obtenido mediante el método VIP. Esta modalidad funciona mediante la petición al privado de un determinado audiovisual por el cual se debe pagar un monto establecido por el propio administrador, mediante transferencias a una tarjeta o a través del saldo principal del teléfono. Sin embargo, según explican varios administradores de estos canales, los precios casi nunca resultan abusivos, ya que la finalidad de las descargas resulta la socialización de contenido gratuito.
“El VIP es simple, cada canal tiene su método”, prosigue Jimoto. “Por ejemplo, en uno de mis canales publicamos primero el contenido gratis, luego es que podemos publicar los VIPs, solo de contenido que ya se ha publicado gratis antes. El precio varía, dependiendo del peso de los archivos, principalmente y, a veces, de la conexión, pero siempre son precios asequibles. Nótese, que esta es la única forma de nosotros los administradores de obtener beneficios de nuestro trabajo”.
Para subir o descargar los materiales, estos jóvenes cubanos deben sortear la lentitud de la propia conectividad, así como las reiteradas interrupciones de la plataforma. Hace poco, los desarrolladores del ToDus establecieron una nueva restricción para limitar el flujo y evitar una sobresaturación de la red, según indicó el propio canal TecnoLike Plus. Desde entonces, se limitó la posibilidad de descargas por usuario cada 24 horas, aproximadamente. Para esquivar esta barrera, algunos de los administradores recurrieron al “préstamo” de números telefónicos y mantener así la subida constante de contenido a los canales.
“Lo que se sube en los canales creo que es imposible regularlo porque casi todos los administradores usan diferentes alias para identificarse”, refiere Yadiel. “Al final, la conexión nos la pagamos nosotros mismos y es una alternativa gratis y cómoda para quienes no pueden pagar los precios del paquete semanal. Esto es algo que se puso de moda ahora, pero que el Estado sabe que existe. Yo digo que hay que aprovecharlo por si a alguien se le ocurre quitarlo definitivamente”.
FUENTE: CUBANET