jueves 28  de  marzo 2024
Venezuela

Asdrúbal Aguiar: " Venezuela vive bajo la explosión del desorden, afectada por la anomia social y el desarraigo ciudadano"

Para el exministro venezolano el problema es que "hay que mirar de frente al mal absoluto que nos tiene como presa a los venezolanos y necesitamos de ayuda para salir del círculo de miedo que nos inhibe y paraliza"

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MIAMI.- El Dr. Asdrúbal Aguiar durante la conferencia "Guerreros de la Libertad de Venezuela", que se celebró en la ciudad de Atlanta en honor a los que luchan por la nación caribeña, ofreció un discurso al que llamó "Mis preguntas sobre Venezuela" en el que expuso las razones de la realidad que aquejan a la nación.

Asdrúbal Aguiar, exministro de Venezuela y director del grupo IDEA (Iniciativa Democrática de España y las Américas), inició sus palabras agradeciendo a los anfitriones del evento y de manera particular al Centro de Derechos Civiles Martin Luther King, “por una razón básica: los venezolanos también tenemos un sueño”.

"Las preguntas que a diario bullen en la mente de los venezolanos son dos, salvo cuando distrae lo inmediato: sobrevivir a la hambruna, a la violencia narco-criminal y política, a la migración hacia el exterior de millones de compatriotas, de suyo, a la fractura de los lazos familiares y del sentido de pertenencia social en cuyo defecto no existe más la nación, menos una república, todavía menos una república democrática.¿Tiene salida la crisis venezolana? ¿Hay alternativas razonables y factibles al respecto?".

Resaltó que hoy vive Venezuela bajo la explosión del desorden. Se encuentra afectada por la anomia social y el desarraigo ciudadano. Su urdimbre institucional ha desaparecido. La humana, la que le da auténtica textura al país por sobre los “amos” que se lo apropian políticamente o como botín personal, está a punto de perderse.

-Nuestra identidad moral y patrimonio intelectual, acaso se sostiene en el imaginario de la diáspora, que bien recuerda la que sufren los judíos después de destruido el templo de Jerusalén. El caso es que, si los judíos avanzan al exilio conservando sus raíces, resumidas en el Talmud, cabe preguntarse si los venezolanos tenemos el nuestro. ¿Bastarán los símbolos patrios, prostituidos por la dictadura, a fin de sobrellevar nuestro ostracismo y no perdernos en la muchedumbre que nos acoge? Ustedes mismos, aquí sentados, dispuestos a escucharnos, se preguntarán por algo distinto: ¿Qué les pasó a estos venezolanos? ¿No eran el ejemplo de una nación que se ufanaba de sus riquezas inagotables y madurez democrática?- recalcó.

Aseguró sin dudar que no hay diagnóstico ni pronóstico posible, ni respuestas a tantos interrogantes, si no se le sirve a la verdad.

Durante su intervención que fue varias veces aplaudida, hizo un resumen de la crisis que afecta a la nación. "Los síntomas de la Venezuela enferma son notorios. Somos el segundo país más violento del mundo; estamos sometidos a una dictadura marxista que administra un pro-cónsul desde Caracas bajo dependencia de La Habana; acusamos una inflación y caída del producto interno bruto sin precedentes a nivel global; legiones de niños hambrientos caen los muertos en las puertas de los hospitales y la población ha perdido un promedio de diez kilos de peso durante los dos últimos años; el aparato del poder se lo dividen los militares; cerraron las industrias y los comercios, y la moneda de más alta denominación, el billete de 500 bolívares, llamados soberanos, equivalentes a 500.000.000 de bolívares en el pasado y que en el pasado representan 50.000.000 de dólares, hoy valen 2 dólares. Al paso, tenemos a uno de los gobiernos más corruptos del planeta, según Transparencia Internacional".

-¿Somos, entonces, una dictadura corrupta, o militarista, o fascista por regir en ella la mentira como política de Estado? ¿Vivimos un régimen represor por sus violaciones sistemáticas de derechos humanos, o un totalitarismo que mediante la violencia impone su pensamiento único en las escuelas y la política?-enfatizó.

Recalcó que algunos observadores internos, moderados, que se dicen progresistas, capaces de mirar el bosque más allá de los árboles, afirman que en Venezuela rige una democracia deficiente. "Tal vez una democracia iliberal, o a lo sumo un autoritarismo competitivo. O que, al igual que ocurre en los Estados Unidos, funciona un gobierno digital, de comunicación directa con el pueblo, que hace innecesarias las instituciones de mediación, en una suerte de post-democracia propia del siglo XXI".

Asegura que estaríamos, entonces, con independencia de las dos versiones anteriores, ante un problema de naturaleza política, cuya solución ha de ser política, por ende, negociada. Y si posible electoral, pero que al término una u otra vía nos devuelvan hacia las reglas de la Constitución.

"El caso es que la realidad es todo lo primero y de conjunto: Hay dictadura del siglo XXI y fascismo, y corrupción, y totalitarismo militarista bolivariano. Pero falta algo más, el condimento diabólico que todo lo trastorna y nadie está dispuesto a digerir, probablemente por vergüenza nacional. No por azar, incluso así, preferimos debatir sobre nuestras falencias democráticas. Sólo eso".

Para Aguiar, el problema es que hay que mirar de frente al mal absoluto que nos tiene como presa a los venezolanos y necesitamos de ayuda para salir del círculo de miedo que nos inhibe y paraliza, como hasta ahora; por lo que se hace necesario volver al pasado para fijar raíces que nos permitan poner pie seguro sobre nuestro presente ominoso, para desandarlo y caminar hacia el porvenir.

El exministro hizo un resumen de cómo fue la historia de la democracia en Venezuela desde 1811, hasta la caída de los precios del petróleo experimentada en 1999. ·"En esa hora de malestar debida a la caída de los ingresos petroleros – hasta 10 dólares por barril, antes de que a partir de 1999 salten hasta 100 dólares – se suma a la cuestión nuestra el desencanto democrático que afecta al mundo Occidental de finales del siglo XX".

Afirma que en ese momento se hace cuerpo, otra vez, entre nosotros, el tráfico de las ilusiones. "Así, nos hacemos en 1999 de otra Constitución, que aprueba una minoría nacional ante la indiferencia de las mayorías; y ella dice que corresponde al Estado desarrollar la personalidad de los venezolanos; modificar nuestros valores, ajustarlos al nuevo credo constitucional, a saber, el bolivariano, el de las espadas, no el de las luces. Explica que esto conlleva a un modelo de centralización total del poder en cabeza del presidente, teniendo por base a la Fuerza Armada, y la promesa populista de quitarle a los que tienen para darle a los que no tienen.

"Pero si todo hubiese sido sólo esto, podríamos decir que en Venezuela apenas hubo una regresión en su historia. Nada más. La verdad es otra. El candidato presidencial y soldado felón Hugo Chávez Frías, se reúne en La Habana con emisarios libios e iraquíes, patrocinados por el dictador Fidel Castro, hacia 1998. Éstos prometen financiamiento para las elecciones y Chávez se obliga al uso del petróleo para apalancar la guerra contra los Estados Unidos y el capitalismo. Eso lo sabe el Departamento de Estado norteamericano".

Recuerda que animado por el carisma de este error de nuestra historia, sin embargo, decide USA que es preferible esperar, y hacerle caso a lo que haga y no a lo que diga el candidato. Es irrelevante, incluso, la relación que teje éste, en 1998, con la narco-guerrilla colombiana.

"Llegado el mes de agosto de 1999, Chávez presidente pacta con las FARC la entrega de armas y la recepción, a cambio, de droga para su comercio hacia Europa y Estados Unidos. Las muertes por homicidio saltan en el país desde 4.500 al año hasta el promedio actual de 27.000 homicidios; obra, todo ello, del negocio de la droga".

Aclara que el tiempo de la bonanza petrolera – que beneficia a las élites de afuera y de adentro – oculta el problema hasta la muerte del propio Chávez.

"Alcanzado el año 2007, habiendo perdido éste su confianza en la Fuerza Armada profesional acelera la invasión del territorio venezolano por fuerzas extranjeras. Juan José Ravilero, su cabeza, declara que suman 30.000 los miembros de los Comités de Defensa de la Revolución Cubana ya instalados en Venezuela. Se trata de un ejército de ocupación para sostener en el poder la asociación criminal narcoterrorista y transnacional que logra secuestrar el andamiaje del Estado venezolano, y que lo usa hoy para la comisión de todos sus delitos".

-No pocos dirigentes venezolanos y extranjeros afirman que, aún así, todo ello es negociable bajo los cánones de la democracia. Lo hace el presidente Santos en Colombia y lo quiso hacer, en el caso de Venezuela, el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, por pedido del actual dictador Nicolás Maduro, y el aval de una parte de la oposición democrática-.

Aguiar le preguntó a la audiencia: "Si la narcodictadura terrorista y corrupta que se ha adueñado de nuestra patria: como lo saben los gobiernos de las Américas, ¿es un problema político, de deficiencia democrática, que cabe resolver democráticamente?. ¿Es o no, antes bien, un problema moral y de moral democrática, que por faltar ha degenerado en un problema de seguridad, para los venezolanos y para la región?"

Resalta que sobre este peligro que ahora es realidad cruda, les advirtió a tiempo el presidente civil Rómulo Betancourt, hace 53 años. "Recordaba que siendo Venezuela “el principal proveedor del Occidente no comunista de la materia prima indispensable para los modernos países industrializados: el petróleo”, y teniendo ella una experiencia de redención social por las vías democráticas, era “explicable – decía - cómo dentro de sus esquemas de expansión latinoamericana, el régimen de La Habana conceptuara que su primero y más preciado botín era Venezuela, para establecer aquí otra cabecera de puente comunista en el primer país exportador de petróleo del mundo”.

Para finalizar su reflexión asegura que:" Vivimos el tiempo en el que gana el más veloz, no el más grande o el de mayor poder o quien disponga de una legitimidad real y moral. No hay tiempo para las ideas, como parece, y menos para razonar. Vivimos la hora del descarte, del usa y tire en lo político y en lo económico. Nuestra realidad se reduce a los 140 caracteres de un Twitter. Hoy se nos gobierna a través de un Twitter, incluso a los norteamericanos. Han cedido las mediaciones institucionales y la gente marcha dispersa, resuelve sus problemas de la hora y en el ahora. Se practica el narcisismo político digital y se bloquea a quienes se considera molestos o diferentes dentro de las redes. Conocemos la hora trágica de la discriminación al detal de los seres humanos...¿Entenderemos el problema de Venezuela? ¿Su solución puede ser ortodoxa y electoral?.. Yo tengo mi respuesta. Espero que Ustedes alcancen la suya, y pronto, antes de que sea tarde" concluyó.

Panelistas por Venezuela

En el panel participaron también la defensora de los Derechos Humanos, Tamara Suju y la abogada Adriana Vigilanza; además de los artistas Daniel Mata, Perla Villazan y Peter Granadillo. El encuentro estuvo moderado por Roger Noriega, y se realizó en el Centro de Derechos Civiles y de Derechos Humanos en Atlanta.

Durante la intervención Tamara Suju realizó un resumen de lo que ha sido su denuncia ante la Corte Penal Internacional donde ha demostrado la sistematización de la tortura en Venezuela, cometida por los miembros del régimen de Nicolás Maduro.

"Es una tortura sistemática porque ha sido perpetrada por los mismo organismos policiales; es la misma cadena de mando; los mismos funcionarios que han rotado en distintos cargos; y han sido perpetradas con un guión. Son las mismas torturas cometidas contra una población civil para castigarla, para intimidarla, para conseguir declaraciones falsas que acusen a líderes políticos, a personas que el gobierno quiere apresar”.

Por su parte la abogada Adriana Vigilanza explicó el porqué los venezolanos no creen en el sistema electoral y cómo se ha demostrado un fraude electoral continuo y sistemático.

Al final de la conferencia se ofreció un amplio debate donde los presentes pudieron realizar preguntas atinentes a lo denunciado por los panelistas.

FUENTE: REDACCIÓN

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