martes 19  de  marzo 2024
Cuba

Barco estadounidense ignora advertencias de "ataques sónicos" y viaja a Cuba

Quince personas, incluidos cinco estudiantes universitarios desafían las recomendaciones hechas por el Gobierno estadounidense de no viajar a Cuba, debido a los misteriosos ataques sónicos sufridos por su legación diplomática en La Habana.

Hoy es el sexto día después de que la goleta escolar estadounidense Harvey Gamage zarpara desde Washington hacia La Habana para cumplir lo que su tripulación llama un viaje de diplomacia cultural que tendrá una duración de cuatro meses.

Quince personas, incluidos cinco estudiantes universitarios desafían las recomendaciones hechas por el Gobierno estadounidense de no viajar a Cuba, debido a los misteriosos ataques sónicos sufridos por su legación diplomática en La Habana.

La Goleta partió en septiembre desde el estado de Maine e hizo escala en Washington hasta que elevó anclas la semana pasada, con el objetivo de arribar a Cuba antes del día de Acción de Gracias que se celebra el próximo 23 de noviembre.

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El programa de la organización Ocean Passages, creado en 2015, conforma cada año un pequeño grupo de jóvenes a los que ofrece, por un lado, la posibilidad de aprender a navegar y, por el otro, la de explorar la naturaleza y el medioambiente de Cuba.

Pero el objetivo de esta aventura va mucho más allá de las tareas formativas antes de que el Harvey Gamage partiera, el presidente de la organización, Gregory Belanger.

"El barco es lo que llamamos un buque escuela, lo que quiere decir que los estudiantes son, además, miembros de la tripulación (...). Pero tienen también un propósito más contemporáneo: son diplomáticos culturales", aclaró Belanger.

De acuerdo con el directivo, el objetivo del proyecto es que en un futuro se puedan incorporar estudiantes cubanos a la tripulación de la goleta construida en 1973, algo que sería un "símbolo extraordinario" de la normalización en las relaciones entre ambos países.

El barco de 40 metros deberá llegar a mediados de noviembre a la Marina Hemingway, en La Habana, donde los estudiantes pasarán unos días para conocer sitios culturales e históricos.

"Si Donald Trump no nombra formalmente un embajador de Estados Unidos en Cuba, entonces la gente de este buque tiene la misión y la obligación de representar al país como embajadores de buena voluntad", bromeó Peter Kornbluh, director del proyecto de documentación de Cuba del Archivo de Seguridad Nacional de la Universidad George Washington.

FUENTE: REDACCIÓN

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