ISLA DE MARGARITA.- Los cancilleres del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) abogaron este jueves en la cumbre de la organización en la isla venezolana de Margarita por un orden internacional más justo a nivel político, económico y social basado en los principios de la Carta de las Naciones Unidas.
La conferencia de ministros de Exteriores arrancó este jueves con la presencia de cerca de una veintena de cancilleres, junto a vicepresidentes, ministros y otros altos funcionarios de los 120 países del movimiento, procedentes principalmente de África, Asia y Latinoamérica.
La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, abrió la conferencia asegurando que "el 55 por ciento de la población mundial está aquí reunida en Margarita representada en estas delegaciones" que pueden ser "una gran fuerza ante los grandes retos que hoy confronta la humanidad".
Rodríguez aseguró que los No Alineados son un movimiento respetuoso "que puede traer equilibrio al mundo" y cuyo mayor desafío, aseveró, "es garantizar el derecho al futuro a nuestros pueblos".
"Son los grandes retos y desafíos que se nos presentan frente a un mundo que es cada día más violento, donde la paz es vulnerada por potencias sin ningún tipo de recato ni de respeto a las normas internacionales", aseguró.
La anfitriona del encuentro destacó que el objetivo de la cumbre será trabajar a favor de la paz, la igualdad, el equilibrio universal, la igualdad soberana entre los Estados, así como la defensa y promoción de los derechos humanos.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, comenzó echando un rapapolvo a la comunidad internacional pero también a los miembros del movimiento que, dijo, "incumplen de manera sistemática" la mayoría de los principios establecidos por ese foro durante su décimo cuarta cumbre que se celebró en La Habana hace 10 años.
Rodríguez aseguró que principios como el respeto a la soberanía de los pueblos y a su autodeterminación e igualdad de derechos soberanos "no solo siguen sin alcanzarse sino (que) los hechos que vulneran esos preceptos universales se agravan cada día".
En este sentido, señaló que no se ha alcanzado la paz, la seguridad internacional y la cooperación a que aspiró el MNOAL en 2006 ni el propósito acordado entonces de fomentar el respeto, el disfrute y la protección de todos los derechos humanos.
"La guerra, la agresión, los golpes blandos y los intentos de cambio de régimen son una constante (...) el hambre, la pobreza, el atraso económico y la exclusión social amenaza a la tercera parte de la humanidad", aseveró.
Por su parte, el canciller de Irán, Mohammad Yavad Zarif, quien traspasará en esta cumbre la presidencia del movimiento a Venezuela, demandó a sus homólogos una "estrategia global integral" para combatir y "drenar los caldos de cultivo" de extremismo y terrorismo en el mundo.
Zarif consideró importante "abordar los factores coadyuvantes que crean el espacio para las ideologías extremas" como "la dictadura, la corrupción, la pobreza, la discriminación y la falta de oportunidades para los jóvenes" ya que, según él, estos generan el terreno propicio para el extremismo.
El ministro iraní afirmó que el extremismo y las crisis humanitarias son "amenazas apremiantes" que han revertido parte del desarrollo de las naciones y que requieren de la atención de la comunidad internacional.
Asimismo, pidió el cumplimiento del derecho internacional y de las normas de la Carta de las Naciones Unidas.
También a las Naciones Unidas se refirió el canciller de Ecuador, Guillaume Long, quien instó a crear un "instrumento vinculante" en el seno de la ONU que obligue a las trasnacionales a que asuman responsabilidades ante la violación de derechos humanos en el mundo.
A su juicio, el término de derechos humanos se ha politizado y se usa con "doble rasero" a fin de "presionar a los países".
En ese sentido, aseguró que no son solo las naciones las que pueden cometer una violación a los derechos humanos sino también las grandes trasnacionales.
El canciller recordó a sus homólogos que, aunque se tengan diferencias, existen grandes ideales e intereses concretos en común, por lo que pidió luchar por las "reglas de juego de convivencia global que no excluya a nadie y que no haga que tengamos países de primera, de segunda o tercera clase".
También el ministro de Exteriores de Bolivia, David Choquehuanca, exhortó hoy a los no alineados a construir "un nuevo orden mundial sin intervencionismo" y "sin armas ni políticas que amenacen" vidas.
Por su parte, el canciller dominicano, Miguel Vargas, defendió igualmente "un orden internacional más justo, más equilibrado y más respetuoso".
La reunión de cancilleres continuará el viernes en la isla venezolana, antes de la cumbre de jefes de Estado que se celebrará el fin de semana.
FUENTE: EFE