Una familia centroamericana solicita el TPS.
AP/ArchivoMIAMI — Todo estaría listo para la nueva asignación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para nicaragüenses que se espera hará la administración de Joe Biden en los próximos días, de acuerdo con la información proporcionada por la Casa Blanca a activistas de origen nicaragüense que gestionan un alivio para los migrantes que ingresaron de manera irregular a Estados Unidos.
La medida podría beneficiar a unos 400 mil nicaragüenses que huyen del régimen de Daniel Ortega tras las protestas de abril de 2018, que dejó un saldo de más de 355 asesinatos a causa de la represión estatal, centenares de presos políticos, más de 2.000 heridos y el éxodo de miles de migrantes.
Aun no existe una fecha precisa para el anuncio de la administración Biden, pero el activista Harold Rocha, comentó a Diario Las Américas que podría ser en los próximos días. La medida se esperaba fuese anunciada en marzo.
Biden tiene la autoridad para otorgar protecciones temporales de inmigración a personas de países en crisis que ya viven en los Estados Unidos. El TPS los protege de la deportación y les permite vivir y trabajar en Estados Unidos.
La migración nicaragüense va en ascenso debido al recrudecimiento de la represión, muchos huyen por razones políticas, otros por causas económicas. Estos últimos no tienen posibilidades de calificar para un asilo político por lo que un TPS representaría un alivio migratorio temporal.
La organización Nicaraguan American Human Rights Alliance (Nahra), lleva a efecto una campaña para conseguir la nueva asignación de un TPS.
La organización proinmigrante gestiona el TPS no solo para nicaragüenses, también para familias centroamericanas que ya residen en Estados Unidos: nicaragüenses, salvadoreños, hondureños y guatemaltecos con el fin de protegerlos de la deportación.
Ciudadanos de Honduras, Nicaragua y El Salvador ya gozan del beneficio desde hace más de dos décadas a causa de desastres naturales que afectaron a esos países. El paso del devastador huracán Mitch por Centroamérica en 1998, afectó mayormente a Honduras y Nicaragua. En el caso de El Salvador fue por el terremoto de enero de 2021. En ambos casos, el huracán Mitch y posteriormente el terremoto, dejó destrucción y miles de damnificados.
Un total de 5.000 nicaragüenses han sido beneficiados con el TPS. La última extensión expirará el 30 de junio de 2024 para ciudadanos de Haití, El Salvador, Nicaragua, Sudán, Honduras y Nepal, según un documento presentado por los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos.
Los beneficiados con el TPS están demandando una vía a la legalización definitiva que les permita convertirse en ciudadanos de Estados Unidos.
Las estadísticas de las autoridades migratorias estadounidenses indican que desde octubre de 2021 a febrero de 2023 — un periodo de 17 meses — , más de 313 mil nicaragüenses ingresaron a Estados Unidos, según los registros de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés). Un fenómeno que no se ha detenido, pese a los cambios en la política migratoria de Estados Unidos para los nicaragüenses desde el 5 de enero.
El gobierno de Joe Biden aprobó el parole humanitario para los nicaragüenses, que les permite el ingreso a Estados Unidos a través de un patrocinador. La medida también beneficia a venezolanos, cubanos y ciudadanos de Haití. En total, Estados Unidos se ha comprometido a recibir a 30 mil ciudadanos mensualmente de esas cuatro nacionalidades por un periodo de 2 años.
Aunque la migración se redujo en un 90%, en el caso de los nicaragüenses entre enero y febrero se registraron más de 7 mil ingresos de ciudadanos de esa nacionalidad fueron interceptados por la Patrulla Fronteriza ingresando a Estados Unidos.
La ola migratoria ha contribuido a aumentar el flujo de remesas a Nicaragua, que ya integra uno de los principales rubros de la economía en la nación centroamericana.
Congresistas de la Florida enviaron a Biden una carta en la que le solicitan rediseñar y extender el Estatus de Protección Temporal para Nicaragua, el último impulso en una campaña en el sur de Florida dirigida por activistas y funcionarios locales que abogan por el cambio de política.
“La naturaleza cada vez más totalitaria del régimen Ortega-Murillo y la brutal represión política que enfrentan los nicaragüenses en su vida cotidiana exacerban la necesidad urgente de que la Administración Biden redesign y extienda el TPS a Nicaragua”, dice la carta enviada al Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, a finales de febrero.
Mientras los nicaragüenses huyen, Ortega recrudece la represión y busca consolidar su dictadura.
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