SANTIAGO DE CHILE.- La ministra de Exteriores de Chile, Antonia Urrejola, instruyó a las misiones diplomáticas nacionales en el extranjero a ofrecer asilo político a los opositores nicaragüenses expulsados del país y retirados de su nacionalidad por el régimen de Daniel Ortega.
La decisión sigue al anuncio del presidente chileno, Gabriel Boric, de ofrecer la nacionalidad chilena a los disidentes acusados por la Fiscalía de Nicaragua por un delito de "traición a la patria".
La medida fue bien recibida por las organizaciones defensoras de los derechos humanos, que calificaron de valiente la postura del gobierno chileno en defensa de la democracia y de la solidaridad entre los pueblos.
Urrejola explicó las diferentes alternativas que las autoridades chilenas ofrecen a los disidentes nicaragüenses apátridas para obtener la nacionalidad o, al menos, el permiso de residencia en la nación andina.
Los expulsados por el régimen de Ortega podrán optar a la condición de refugiados mediante una solicitud ante el Servicio Nacional de Migraciones chileno, lo que les permitirá obtener la residencia temporal junto a sus familias y, más tarde, recibir el permiso de residencia definitiva.
Además, las autoridades chilenas se han puesto en contacto con la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para que "exploren alternativas que permitan el acompañamiento y apoyo de este organismo en la implementación de la decisión del presidente Boric".
La ministra de Exteriores también informó que, cuando el Parlamento regrese del receso por vacaciones, se impulsará un diálogo para explorar la posibilidad de conceder a los disidentes nicaragüenses la nacionalidad por gracia, "entendiendo los factores humanitarios involucrados en este tema".
El régimen de Nicaragua, liderado por Ortega y su mujer, Rosario Murillo, decretó la semana pasada la expulsión y despojo de la nacionalidad nicaragüense de 94 disidentes y opositores, entre los que se encuentran periodistas, activistas, políticos, religiosos o defensores de los Derechos Humanos, que además han sido declarados "prófugos de la Justicia".
Nicaragua es objeto de críticas por parte de organismos internacionales, que han denunciado el retroceso democrático que ha sufrido el país en los últimos años.
La reconocida escritora nicaragüense Gioconda Belli anunció que aceptará la oferta del gobierno chileno para otorgarle la ciudadanía de ese país, luego de que el régimen de Ortega le quitara su nacionalidad, en medio de una creciente represión contra la oposición.
Belli, quien reside actualmente en España, expresó su gratitud al presidente chileno Gabriel Boric y a la canciller Antonia Urrejola por su gesto de solidaridad. En un mensaje de audio enviado a la radio Cooperativa, la escritora afirmó que Chile tiene un profundo vínculo con Nicaragua, y mencionó a algunos de los grandes escritores que han compartido ambos países, como Rubén Darío, Pablo Neruda, Nicanor Parra, Marcela Serrano y Carla Guelfenbein.
La medida represiva que afectó a Belli y a otros 93 nicaragüenses, entre ellos el novelista y exvicepresidente Sergio Ramírez, se produjo después de que 222 presos políticos fueran liberados y expulsados a Estados Unidos, y se les retirara también su ciudadanía. El gobierno de Boric, junto con los de España, Argentina y México, ofreció la ciudadanía a los disidentes por esta medida.
FUENTE: Con información de Europa Press