Lizandra Góngora, presa política del régimen de Cuba, paga condena de 12 años de prisión por participar en las protestas del 11J
Libertad para los presos políticos piden los cubanos desde Miami.
SUREIDY RODRÍGUEZ / DLALA HABANA.- Lizandra Góngora, presa política del régimen de Cuba, anunció el inicio de una huelga de hambre luego que el pasado 14 de octubre en la prisión Los Colonos, en la Isla de la Juventud recibiera una fuerte golpiza por parte de efectivos de seguridad penitenciarios.
Lizandra protestó porque le quitaron el derecho a la llamada telefónica con sus hijos. Según declaraciones de Ángel Delgado, esposo de Góngora, a ella le corresponde una llamada telefónica familiar una vez a la semana, los sábados a las 10:30 de la mañana. Según relató, cuando Lizandra vio a las reclusas llamando, se acercó a la jefa del centro penitenciario y le preguntó: “Ven acá, ¿y mi teléfono para cuándo es?”, reseña el portal web Radio Televisión Martí.
La oficial le respondió: “Tú hoy no tienes teléfono”. Por lo que Góngora reaccionó diciendo: “¿Cómo que yo no voy a tener teléfono hoy, si tú me cambiaste a mí del lunes para el sábado para hablar yo con mis hijos?”. Delgado señaló que la oficial, tras esta confrontación, que fue en presencia de las otras reclusas, “viró para atrás, con otra presa, la ‘manoteó’ y entonces, la otra presa le fue arriba. Las dos le fueron arriba y le dieron golpes a Lizandra”.
La información sobre el inicio de la protesta se coló a través de una llamada telefónica de otra reclusa, “que se lleva bien con Lizandra”.
Góngora “está plantada, ella no quiere comer, no quiere salir de la cama (…) dice que ella estaba temblando arriba de la cama y, como ella vio todo, pues me lo dijo”, relató Delgado.
Góngora, de 37 años, fue sentenciada a 14 años de cárcel por su participación en las manifestaciones del 11 de julio de 2021 (11J) en Güira de Melena. Al condenarla el régimen de Cuba la responsabilizó de atacar una tienda en Moneda Libremente Convertible (MLC), aunque las imágenes solo la muestran en las afueras del centro.
Lo que sí hizo Góngora fue salir a pedir el cese de la dictadura en Cuba, como había hecho periódicamente en sus directas antes de lanzarse a la calle. Desde que fue detenida por el 11J, la activista se ha mantenido denunciando todo lo que ocurre en prisión.
Se encuentra recluida en Los Colonos, en la Isla de la Juventud. Prisión de difícil acceso para los familiares.
FUENTE: REDACCIÓN
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