El exespía cubano Gerardo Hernández, el segundo al mando de la dirección nacional de la organización de barrio en Cuba dedicada a promover la "vigilancia revolucionaria" y controlar a los ciudadanos de a pie, los CDR (Comités de Defensa de la Revolución), alentó a vecinos de una comunidad del centro de la isla para que "en momentos como los que vivimos nosotros, en que el Estado tiene que dedicar recursos importantes a importar alimentos, es un aporte significativo" que cada CDR produzca, al menos, una piña.
De acuerdo con un reporte de Diario de Cuba, un video que se ha hecho viral en redes, muestra al actual vicepresidente de los CDR exhibiendo una de las frutas que llamó a cultivar. "El país tiene cerca de 138.000 CDR. Si a un solo cederista por CDR se le ocurre sembrar una piña; uno solo por CDR, ¿de cuántas piñas estamos hablado?", se preguntó el exespía cubano.
A fines de junio, Hernández, a quien el régimen reconoce como Héroe de la República, llamó a producir una cifra idéntica de calabaza apelando a la iniciativa de esas organizaciones de vigilancia y delación.
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Un hombre lava una lechuga cultivada en los terrenos de su casa en Bahía Honda, en la occidental provincia de Artemisa, en medio de la crisis de alimentos acrecentada por la pandemia de COVID-19, en junio de 2020.
YAMIL LAGE / AFP
"Decimos una por poner un número, pero lo cierto es que si cada uno de nosotros pone a producir el pedacito de tierra que pueda es menos alimentos que tiene que importar el país. Esa es una misión de los cederistas cubanos", dijo, según reportó en su muro de Facebook el periodista Jorge Enrique Jerez Belisario, del periódico oficial Invasor, en el centro de Cuba.
Hernández está de gira por lal isla para impulsar la campaña que bajo la etiqueta #CultivaTuPedacito los CDR lanzaron en la Isla, como una alternativa para producir alimentos que ayuden a paliar la crisis de suministros que sufre el pueblo cubano.
No obstante, Hernández expresó su frustración porque, como antes sucediera con el llamado de Miguel Díaz-Canel a producir limones en Cuba para que las personas puedan beber limonada, ello provoca burlas e hilaridad en las redes sociales.
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"Aunque el enemigo se burle de iniciativas como estas, se burlan los mismos que apoyan el bloqueo y quieren rendirnos", comentó, si bien el choteo sobre tales llamados mesiánicos, que recuerdan las soluciones milagrosas de las que gustaba echar mano el difunto Fidel Castro en épocas de crisis, ha tenido su germen entre la población de la Isla.
"Iniciativas de este tipo, como lo es la agricultura familiar, nos ayudaron a resistir los embates del 'Periodo especial' y ahora tenemos que retomarlas", argumentó, poniendo en evidencia que la crisis con el desabastecimiento de alimentos básicos obliga al régimen cubano a desempolvar prácticas de tiempos muy difíciles que el pueblo recuerda con amargura.
Sin embargo, uno de los comentarios al video difundido en Twitter llama la atención sobre lo que podría ser una real solución a ese problema cubano: "¿Quieren piñas, calabazas, malangas, yucas y un largo etc? Dejen que los campesinos cultiven libremente y vendan sus productos directamente a quien quiera comprarlos y verán como no tendrán que volver a importar ni una cebolla".
Los CDR han hecho constantes llamados a sembrar alimentos en patios, parcelas, huertos y canteros de las viviendas. Su coordinador nacional, Carlos Rafael Miranda, aseguró a la Televisión Cubana que "no podemos dejar ningún espacio" y que deben usarse incluso las macetas para plantas ornamentales en los balcones de los edificios.
Campesinos cubanos
Campesinos independientes cubanos.
CORTESÍA: Fundación para los Derechos Humanos en Cuba
La iniciativa vuelve a usar uno de los recursos favoritos de la propaganda del régimen cubano: delegar en los ciudadanos la responsabilidad de producir aquello que su ineficaz modelo económico no logra.
El Estado posee la mayor superficie agrícola y las mejores tierras, y con el mayor equipamiento tecnológico y de suministro de insumos produce apenas entre el 10% y el 12% de los alimentos del país, mientras que entre el 90% y el 88% restante lo generan los campesinos y los 242.000 usufructuarios particulares de tierras estatales que estaban ociosas y cubiertas de marabú y han sido arrendadas a ellos por el Gobierno para que las reactiven.
La deficiente producción de alimentos controlada por el Estado deriva en desabastecimiento, un problema acrecentado por la actual situación del nuevo coronavirus.
FUENTE: Publicado en Diario de Cuba
