CARACAS.- El régimen de Nicolás Maduro ordenó a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) la activación del Plan Estratégico Operacional Zamora, para enfrentar las protestas que se han suscitado en las últimas semanas como resultado de la crisis económica y social que atraviesa Venezuela.
El Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada, en radiogramas de junio y comienzo de julio de 2018 enviados a los comandos y guarniciones del país, señala que el plan estratégico operacional es de "permanente ejecución", según reseña El Nacional.
El plan establece tres fases de ejecución, dependiendo de cómo sea el comportamiento social: el alerta 1 o verde se puso ya en práctica debido a la "afectación moderada" del orden público, causada por la protesta de los trabajadores del sector salud que lleva más de 30 días y amenaza con convertirse en un paro nacional.
Las alertas 2 y 3, amarilla y roja, se desplegarán en la medida en que "la afectación (del orden) sea mayor y grave" o implique "el impacto directo sobre un área geográfica y genere emergencia", según el material del Ceofanb, en momentos en que partidos como La Causa R y Vente Venezuela y organizaciones sociales exigen la renuncia del dictador Nicolás Maduro y convocan a un paro nacional.
El Plan Zamora incluye el adiestramiento de la reserva militar en instalaciones de la Guardia Nacional; un programa que ideó el excomandante de esta fuerza, actualmente ministro de Interior, Néstor Reverol.
El entrenamiento comprende la concentración de la reserva militar en grandes unidades de la Guardia Nacional, práctica de tiro, técnicas de sabotaje, hostigamiento y de operaciones psicológicas que afecten al adversario.
Escenarios en los que intervendrán
La Fuerza Armada supone los siguientes escenarios para actuar:
- Campañas mediáticas nacionales e internacionales organizadas por los actores de la oposición, planificadas por potencias hegemónicas para descalificar y desconocer los poderes del gobierno legítimamente constituidos.
- Promover violencia a través de los medios nacionales e internacionales dirigidos por monopolios de poder.
- Manipulación de variables económicas (internas y externas) para impulsar inflación.
- Fomento de la criminalidad e inseguridad como parte de estrategia de desestabilización de actores contrarios al gobierno.
- Pronunciamiento de actores políticos nacionales e internacionales contra la gestión del gobierno revolucionario.
- Incremento de problemas político-sociales con incidencia en la seguridad ciudadana.
- Incitación a huelgas, protestas y acciones de calle no legítimas en sectores de la sociedad civil por actores políticos de ultraderecha.
- Acciones de sabotaje a instalaciones e infraestructuras estratégicas de la nación.
- Campañas mediáticas de actores económicos y políticos de ultraderecha para manipular y desinformar a la población, creando incertidumbre, dudas y atentando contra la seguridad de la nación.
- Agresiones y ataques dirigidos hacia actores y simpatizantes del gobierno legítimamente elegidos por el pueblo.
FUENTE: Con información de El Nacional