
En medio de la campaña presidencial, Márquez denunció que fue atacada por una "furia racista y clasista"
De la mano del senador y exguerrillero Gustavo Petro con él será parte del primer gobierno de izquierda de Colombia a partir del 7 de agosto y por los siguientes cuatro años.
"Dimos un paso muy importante, después de 214 años logramos un gobierno del pueblo (...) de la gente de las manos callosas, de la gente de a pie, de los nadies y las nadies de Colombia", dijo Márquez, de 40 años, que lució un vestido colorido ante una multitud que la vitoreaba en un centro de eventos en Bogotá.
En medio de la campaña presidencial, Márquez denunció que fue atacada por una "furia racista y clasista" avivada por las redes sociales.
Nacida en una familia pobre del departamento del Cauca (suroeste), Márquez fue madre soltera a los 16 años, huyó de su tierra amenazada de muerte, limpió casas para sobrevivir y estudió derecho antes de abrirse paso en la política.
En 2019 sufrió un atentado con granadas y ráfagas de fusil por defender el agua de su comunidad, en una región donde los grupos armados imponen su ley, financiados por el narcotráfico y la minería ilegal.
Un año antes, había recibido el Premio Goldman, también conocido como Nobel del medioambiente.
Márquez se dio a conocer en esta campaña con un discurso feminista, ambientalista y abiertamente de izquierda.
"Vamos las mujeres a erradicar el patriarcado de nuestro país, vamos por los derechos de la comunidad diversa LGBTIQ+, vamos por los derechos de nuestra madre tierra, de la casa grande", anunció durante su primer discurso tras resultar ganadora en la fórmula con el izquierdista Gustavo Petro.
En las primarias de la coalición de izquierda Pacto Histórico, la ambientalista obtuvo la segunda mejor votación (785.000) después de Petro (4,4 millones).