Grupos de defensores de derechos humanos de Colombia y Venezuela pidieron a Naciones Unidas un enviado especial para la frontera que comparten estos dos países, luego de una oleada de enfrentamientos entre soldados de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y miembros de las disidencias de las FARC que operan en Venezuela bajo la anuencia del régimen de Nicolás Maduro.
Unas 60 ONG de ambas naciones suscribieron un documento en el que resaltaron que los conflictos en el estado venezolano de Apure, fronterizo con Colombia, están afectando la vida de más de 5 millones de personas y tienen un "enorme impacto en la seguridad regional".
“Colombia y Venezuela no pueden tomar los sucesos de Apure y Arauca ocurridos esta semana, como excusa para un escalamiento de tensiones. En este momento debe rescatarse la racionalidad y sensatez entre la dirigencia de ambos países”, señala el texto, reseñó El Nacional.
Agregó el documento que es "urgente la activación de una instancia" que de respuesta a "los problemas humanitarios y de seguridad" en la frontera, "luego de más de cinco años de cierres intermitentes de los pasos fronterizos formales y ante la inexistencia de un mínimo de coordinación de las instituciones nacionales de Colombia y Venezuela para atender los problemas de la frontera común".
El grupo de ONG señaló que el enviado especial de la ONU se encargaría de coordinar esfuerzos para la seguridad de Colombia y Venezuela, establecer un mecanismo internacional de vigilancia para proteger los derechos humanos, atender las necesidades económicas y sociales de los ciudadanos, garantizar el intercambio de información epidemiológica y cooperar en la desmovilización de los grupos armados y de las estructuras económicas ilegales.
El texto concluyó alertando que sin cooperación, la situación en la frontera colombo-venezolana empeorará.
FUENTE: EL NACIONAL