Migrantes, en México, duermen junto a las vías ferroviarias mientras esperan un tren hacia el norte que se detenga tiempo suficiente para poder subir.
AP/MARCO UGARTECIUDAD DE MÉXICO.- La histórica migración que se registra actualmente en el continente américano, que tiene como destino EEUU y que ha desbordado las ciudades fronterizas de ambos países, provocó que las autoridades mexicanas decidieran deportar a los migrantes, entre otras medidas que fueron acordadas con el gobierno estadounidense.
El pacto, al que se llegó en una reunión que sostuvieron autoridades de ambas naciones en Ciudad Juárez, México, consiste en que se deportará a sus países de origen a inmigrantes indocumentados desde las ciudades fronterizas mexicanas. Paralelamente, se aplicarán medidas para intentar disuadirlos de que viajen hasta EEUU con la intención de "pedir asilo".
En las últimas semanas, las autoridades estadounidenses han reportado un aumento de los cruces ilegales a través de las ciudades mexicanas que limitan con El Paso, Eagle Pass, en Texas, y con San Diego, en California.
Las cifras de detenciones de indocumentados han llegado a 8.600 en un día, comparables a las que se registraban antes de que expirara el Título 42, que establecía límites a la entrada a EEUU como medida sanitaria por la pandemia del COVID-19, de acuerdo al Departamento de Seguridad Nacional de EEUU.
Los migrantes de países como Nicaragua, Cuba, Venezuela, Colombia, Honduras, entre otros, siguen llegando a la frontera. Solo en un día de la semana pasada se registraron 3.500 detenciones de indocumentados. En El Paso, unos 6.500 migrantes están detenidos, según dijo el sábado el alcalde Oscar Leeser, quien afirmó que "hemos llegado a un punto de quiebre en este momento", reportó CNN en Español.
En tanto, el Instituto Nacional de Migración de México reportó la semana pasada que entre el 1 de enero y el 22 de septiembre de 2023 han sido "rescatados" más de 1.4 millones de migrantes, de los cuales 788.000 fueron deportados por vía terrestre y aérea a sus países de origen. Ante el aumento de la migración, México cerró temporalmente un puente internacional y detuvo el principal sistema de trenes de carga del país.
La firma Ferromex dijo que había tantos migrantes subiendo a los trenes que resultaba inseguro moverlos. La empresa dijo que se "han registrado cerca de media docena de casos de lesionados o fallecidos entre los grupos de personas que abordaron trenes de carga en su camino hacia la frontera norte a pesar del grave peligro que ello implica”.
Pese a la violencia de cárteles de la droga y a los peligros asociados a subirse a los vagones, hace mucho que los migrantes utilizan esos trenes de mercancías para viajar al norte. Muchos llaman a este tren “La Bestia”.
La interrupción del servicio cortó temporalmente una de las rutas migratorias más transitadas del país coincidiendo con un pico de migraciones y dejó en el limbo a familias.
Este domingo, unos 5.000 migrantes, la mayoría venezolanos, que se encontraban varados en la ciudad de Irapuato, en el centro de México, se alistaron en cuanto escucharon un tren a lo lejos. Familias con niños pequeños durmiendo en cajas de cartón, hombres y mujeres jóvenes apretujados en casas de campaña bajo un puente cercano recogieron sus cosas a toda prisa. Cuando el tren llegó, algunos se encaramaron a los vagones de metal con facilidad, mientras que otros lanzaron sus bolsas y alzaban en brazos a sus hijos pequeños envueltos en abrigos de invierno.
Para las autoridades estadounidenses, las causas del último aumento de los migrantes están en las crisis económicas de sus países de origen y los regímenes autoritarios, como son los casos de Venezuela y Nicaragua.
Los funcionarios de Seguridad Nacional de Estados Unidos están monitoreando la situación y, si bien no dieron una explicación clara de lo que generó el último aumento, citaron las economías pobres, los regímenes autoritarios y la crisis climática como fuerzas que impulsan la migración.
En concreto, el acuerdo al que llegaron México y EEUU contempla: que la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP, por sus siglas en inglés) expulse a los migrantes a través del puente internacional de Ciudad Juárez, que conecta con El paso; establecer puntos de control a lo largo de toda la ruta de Ferromex, realizar operativos en ferrocarriles y carreteras, habilitar albergues para migrantes en Ciudad Juárez y establecer contactos con las autoridades de Venezuela, Nicaragua, Colombia y Cuba para gestionar la recepción de sus ciudadanos deportados.
FUENTE: REDACCIÓN / Con información de AP / CNN en Español
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