jueves 14  de  marzo 2024
Cuba, entrevista exclusiva

"No debemos andar pidiéndonos la cabeza los unos a los otros"

Yunior García Aguilera, promotor de la plataforma archipiélago, admite que hubo presiones para su salida, de la cuales aun no puede hablar
Diario las Américas | YOANDY CASTAÑEDA LORENZO
Por YOANDY CASTAÑEDA LORENZO

La convocatoria a la marcha pacífica del 15 de noviembre en Cuba fue un dardo envenenado al corazón del régimen que, temeroso ante una rosa blanca, activó todo su mecanismo represivo dando muestras fehacientes de un debilitado armatoste ideológico, incapacidad aglutinadora y crisis de identidad.

En pocas palabras, dejó a flor de piel su miedo, y su verdadero rostro. En medio de la efervescencia social generada a partir de la plataforma archipiélago, cubanos de distintas partes del mundo se agolparon en torno al llamado de Yunior García Aguilera (YGA), uno de los promotores y el rostro más visible de la plataforma Archipiélago. Sin embargo, su abrupta y sigilosa salida hacia España y las circunstancias sospechosas en que se desenvolvieron los hechos generó automáticamente la polémica con un sinnúmero de puntos de vista. DIARIO LAS AMERICAS (DLA) conversó con el dramaturgo y actor en exclusiva desde Madrid:

DLA: ¿Valoraste la repercusión que alcanzó tu convocatoria?

YGA: Realmente no ha existido prácticamente tiempo en el último año para pensar demasiado en todo este tipo de cosas, ha sido reaccionar, actuar, proponer, intentarlo, no estar a la defensiva. Ha sido realmente un año intenso si medimos desde la huelga de Movimiento San Isidro, lo que pasó frente Ministerio de cultura el 27 de noviembre, lo que pasó en abril en Obispo y Aguacate, lo que fue el 11 de julio y luego toda la convocatoria de “Archipiélago”, ha habido una intensidad quizás nunca vista en tan poco tiempo y con la fuerza con la que se desataron los sucesos en Cuba. Siempre la dictadura ha demostrado lo que es, no es nada nuevo para los cubanos, no nos sorprende lo que pasa, lo diferente es que, en esta ocasión, lo hizo con todo el mundo mirando. El mundo estaba pendiente y el régimen se comportó como lo que es, porque no sabe hacerlo de otra manera, demostró clara y evidentemente que en Cuba no solo no se respetan los derechos humanos sino qué es, con todas sus letras, una dictadura.

DLA: Leonardo Fernández, Daniela Rojo, y otros moderadores renunciaron a Archipiélago después de que decidiste salir del país. ¿Está quebrada la plataforma? ¿Está quebrada la oposición en Cuba?

YGA: No. Yo creo que estaría quebrado si las personas comenzaran a renunciar a sus ideas, al deseo de luchar por una Cuba libre. No importa desde donde se haga. Archipiélago es una plataforma más, existen otros grupos, ya existían antes y existirán nuevos. No se trata de una competencia, no se trata de en qué lugar estás; sino desde donde estás, qué estás por esa Cuba libre y democrática que queremos todos. Tenemos que marchar en paralelo, tenemos que marchar juntos, sin estar pidiéndonos la cabeza unos a otros sino empujando al país hacia ese futuro que sé que hay que construir entre todos.

DLA: Cuando se da la noticia de tu salida surgen preguntas y debates ¿Cómo lograste sacar una visa en un consulado que no ofrecía servicios hasta el 30 de noviembre y cómo pudiste viajar a España que tiene una férrea política de admisión en cuanto a las vacunas contra el COVID?

YGA: Hay cosas que obviamente no sé, hay cosas que se fueron moviendo sin que yo las conociera y todavía hay muchísimas cosas que no conozco. Te sorprendería la cantidad de cosas que me llegan todos los días y que para mí son totalmente nuevas. De algunas puedo hablar, de otras no, porque todavía hay muchas personas que corren riesgo, que están en peligro dentro de Cuba, pero por supuesto que se movió toda una maquinaria, había muchas intenciones de personas honestas que querían, por supuesto salvarnos la vida de alguna manera, que no corriéramos peligro. El régimen tenía la intención de salir de mí, en este caso, y de muchos otros miembros de Archipiélago, de todas las maneras posibles y entendió que esta vía ellos podrían transformarla en una victoria de su parte, aunque en el mundo entero no se considera así. Yo creo que a todo el mundo le ha quedado claro que es su derrota, en un sentido que no había ocurrido antes, su derrota por cometer los peores errores cuando el mundo entero estaba pendiente.

DLA: Dijiste que la decisión de salir del país fue tuya, pero ¿Existe la posibilidad que tengan a personas amenazadas para que optes por no denunciar una expatriación forzosa?

YGA: Ojalá en algún momento pudiera hablar de ciertas cosas, pero sí ocurrieron presiones, presiones incluso de las que yo no sabía, que me he ido enterando ahora. Pero si el régimen me hubiese dicho directamente “te tienes que ir”, me hubiese negado quizás porque soy así de rebelde, es mi naturaleza. Esta decisión es mía personal. No les iba a dar el gusto de que me clausurarán la única defensa que tengo, la única arma que tengo, que es mi voz y mis ideas. Ellos pensaron que al salir ya era una salida definitiva, que yo pediría asilo y que no tendrían mi nombre o mi cara, todos los días, en su gaveta de preocupaciones. Me acabo de enterar de que hay movimientos aquí con el embajador de Cuba en España, sabemos la Seguridad del estado está en todas partes, sabemos que sus tentáculos son bastante grandes, que lamentablemente no solo está dentro de Cuba, sino que está en muchos lugares y hay que estar preparados, hay que prepararse más. Tú sabes que yo no tengo una preparación política yo no nací político, soy un artista y he tenido que aprender sobre la base de tropezar, de caerme, de chocar con determinadas paredes, contra determinados muros. De todo eso uno tiene que sacar una experiencia, todo eso te va también fortaleciendo, te va quitando ingenuidad y te va preparando para enfrentar esto con mayor madurez y con mayor responsabilidad.

DLA: Al declararte de izquierda ¿No te da miedo perder el apoyo de personas que han sido víctimas de esa izquierda radical totalitaria?

YGA: Lo que pasa es que este asunto nuestro de los cubanos no es un problema de ideología. No se trata de un color político; se trata de que en Cuba no tenemos derechos, no hay democracia, en Cuba hay una dictadura tiránica que aplasta el derecho de sus ciudadanos. No se trata de que las dictaduras de derecha sean mejores que las de izquierda, las dictaduras son malas todas.

Lo que hay que construir es justamente el pluralismo, el derecho de las personas a expresarse, a reunirse, a participar, da igual como piensen. No podemos volver a establecer un pensamiento único en nuestro país, no puede ser que, de pronto, se coloque el centro o la derecha y diga que todo lo demás queda prohibido. Yo creo que los cubanos tenemos que debatir un poco más sobre la Cuba que queremos construir donde finalmente quepamos todos.

DLA: Hablas de pluralismo, pero ¿Realmente crees en el diálogo cuando el mismo régimen ha dejado claro que tiene las puertas cerradas?

YGA: Obviamente la dictadura, no está lista para dialogar, no quiere dialogar y no va a dialogar. Cuando hablamos de diálogo nos estamos refiriendo directamente a un diálogo de la sociedad civil cubana porque justamente hemos estado demasiado fragmentado demasiado, viviendo en el sectarismo, siguiendo caudillos, tratando de vivir como si fuéramos parcelas o aldeas distintas que están todo el tiempo en pugna unas con otras y todas esas boberas que a veces vemos en redes sociales, de discusiones que no tienen sentido cuando tenemos un problema real en Cuba. A veces, perdemos el tiempo porque “no me gustó lo que hiciste” o “no me gustó la forma en que lo hiciste; hay que tratar de sentarnos como sociedad civil cubana y decir: tenemos un problema concreto y real que se llama dictadura y preguntarse cómo le ponemos fin a este problema, cómo lo hacemos para que nadie salga lastimado porque la violencia no debe ser una manera válida, no logro nada en el futuro y no va a lograr nada en el presente, solo ha postergado problemas. A mí me encantó una frase de René Ariza, que dice que hay que cuidarse el ‘Fidel Castro” que cada uno lleva dentro, hay que tener cuidado con no reproducir esquemas o no reproducir ese pensamiento que quiere monopolizar el liderazgo absoluto. Todo el que quiera construir una Cuba plural tiene que aportar, tiene que escuchar y tiene que proponer, pero al final tiene que haber un consenso y ese consenso no se logra si no nos sentamos a dialogar como sociedad.

DLA: Te pronunciaste en favor de eliminar las sanciones económicas pero la mayoría de las sanciones económicas vienen de parte del propio régimen.

YGA: Por supuesto que ese régimen dictatorial merece sanciones firmes, el régimen y los abusadores que están en ese régimen, pero no puede ser que la gente común, que la gente de a pie, al final pague las consecuencias porque a ellos los seguimos viendo en sus autos de lujo, comiendo langosta, bebiendo whisky, sus hijos pasean el jet privado, viajan por el mundo gastando dinero y uno dice: bueno, realmente 62 años de dictadura y casi la misma cantidad de embargo económico ¿y qué? Siempre buscan una salida una alternativa.

DLA: Pero al final el régimen comercia con prácticamente el mundo entero incluso con EEUU…

YGA: Yo creo que es el meollo del asunto, tú sabes porque el embargo no ha funcionado porque justamente Cuba puede comerciar con el resto del mundo y entonces en ONU todos los años se dice que el embargo es una medida unilateral, que es una obsesión que tiene los Estados Unidos. Hay que demostrar en las Naciones Unidas, que hay un régimen dictatorial que está violando los derechos de su pueblo y esas sanciones hay que lograrlas desde los distintos organismos internacionales. Esto no se trata de un problema entre Cuba y los Estados Unidos, esto se trata de un sistema político que aplasta a sus ciudadanos

DLA: ¿Cuál es el próximo paso para Yunior García? ¿Cuál es, según tu criterio, el papel de la comunidad cubana en el exilio?

YGA: Denunciar. En Europa, en América Latina hay versiones equivocadas respecto a Cuba. Hay que hablarles porque, lamentablemente, a veces creemos que todo el mundo, que el resto del planeta piensa igual que nuestros amigos de Facebook. Debemos convertirlo en una mirada global y lograr que el mundo entero reconozca la realidad si no va a ser muy difícil que se sientan presionados y que realmente estén obligados a soltar el poder. La dictadura depende de manos que la ayuden y esas manos que los ayudan siguen confundidas.

DLA: En algún momento, y eres dramaturgo, deberás aportar luz a la trama de esta obra de teatro real. Cuando cesen las amenazas, las presiones y puedas aclarar ¿Aportarás un poco mas de sustancia a los eventos en la forma como se dieron?

YGA: Claro que sí, cuenta con eso.

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