Michael Fakhr, relator especial de la ONU sobre el derecho a la alimentación, expresó preocupación por la transformación de los programas sociales en Venezuela
Los pensionados Maybel Sequera y Juan González almuerzan en su casa en el barrio de bajos ingresos de La Vega en Caracas, Venezuela. El almuerzo de este matrimonio fue un regalo de una organización sin fines de lucro, ya que las pensiones mensuales de la costurera y el conductor no les permiten alimentarse. Ellos dependen de las donaciones de alimentos, medicinas y ropa.
AP/Ariana CubillosCARACAS.- El relator especial de las Naciones Unidas (ONU) sobre el derecho a la alimentación, Michael Fakhri, hizo un llamado al régimen de Nicolás Maduro para que diseñe un plan integral y efectivo que aborde de manera contundente la problemática del hambre y la desnutrición que aquejan a los venezolanos, destacando la necesidad de evitar la politización de los programas sociales.
Durante una visita de dos semanas a diversas regiones del país, Fakhri expresó preocupación por la transformación de los programas sociales, inicialmente destinados a paliar la escasez de alimentos, en iniciativas asistencialistas que no atienden las raíces del problema.
En particular, mencionó la entrega de productos alimenticios básicos a 7,5 millones de familias venezolanas a través del programa CLAP, el cual, según sus observaciones, es susceptible al clientelismo político y no logra abordar las causas fundamentales de la crisis alimentaria ni cumplir con los estándares internacionales de derechos humanos en materia alimentaria.
Fakhri destacó además las dificultades que enfrentan las familias venezolanas para satisfacer sus necesidades básicas, recurriendo a medidas negativas como la reducción de porciones de alimentos, la omisión de comidas y la adquisición de productos menos nutritivos.
Durante su visita, el relator reconoció que la corrupción, la falta de transparencia y la inadecuada aplicación de la legislación existente han contribuido a la crisis alimentaria en el país.
La compleja situación social, económica y política en Venezuela ha provocado la migración de más de 7,4 millones de personas y ha sumido a millones más en la pobreza, siendo la inseguridad alimentaria un factor determinante para muchos migrantes.
La visita de Fakhri se produce en un contexto en el que la crisis venezolana sigue evolucionando. Si bien han disminuido las imágenes de estantes vacíos en las tiendas de comestibles, han surgido nuevos desafíos de accesibilidad a los alimentos, especialmente para los trabajadores del sector público, cuyos ingresos mensuales resultan insuficientes para cubrir las necesidades básicas de sus familias.
FUENTE: Con información de AP
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