CIUDAD DE PANAMÁ.- La Selva del Darién aún se mantiene como una opción dinámica para los migrantes que intentan llegar a los Estados Unidos a través de esta travesía llena de obstáculos y peligros, según los últimos datos reportados por Ministerio de Seguridad Pública de Panamá.
En lo que va de 2024 más de 68.000 ciudadanos han cruzado la selva y de esa cifra según el Servicio Nacional de Migración, 20% corresponde a niños y adolescentes.
Esta cantidad, según los reportes del año 2023 en igual período, representan 22.000 personas más, un crecimiento exponencial que preocupa a las autoridades de la nación del Istmo
La Directora del Servicio Nacional de Migración, Samira Gozaine, destacó el reto que significa para el Estado panameño, el reforzar la atención humanitaria ante una situación inédita, con un inminente y abrupto incremento del flujo irregular de migrantes por la selva del Darién.
Gozaine subrayó que el flujo irregular de extranjeros por territorio panameño ha experimentado un incremento de 10.000 en 2009 a 520.000 2023 “y en lo que va del 2024 ya son 63.806 personas las que han cruzado el Parque Nacional Darién”. No obstante el Ministerio de seguridad actualizó la cifra este 24 de febrero a más de 68.000.
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Gozaine dijo que a Panamá esta situación le ha costado más de 70 millones de dólares, en los últimos cuatro años, en un intento por darles una atención digna a cada uno de estos extranjeros: alimentos, alojamiento, agua potable, salud y seguridad.
Se los tragó la selva
“Hasta el momento, desde que comenzó a crecer la afluencia, el Servicio Nacional de Migración ha identificado 226 fallecidos, aunque la jefa de la cartera migratoria fue enfática en señalar que nunca se conocerá el número real de los que perdieron la vida en el intento por tener una mejor vida y que nunca serán repatriados a sus casas porque sus cuerpos se los tragó la selva”, señala la nota de prensa.
Gozaine también expresó que la frontera colombo-panameña se ha convertido en una zona peligrosa que no responde a los principios de movilidad humana, sino a un nuevo negocio del crimen organizado que está sustituyendo el tráfico de drogas por el de seres humanos.
Desde julio de 2009 hasta febrero del año en curso, se han realizado 99.331pruebas biométricas que han permitido identificar a miembros de grupos desmilitarizados de Colombia y personas vinculadas a todo tipo de delitos, incluido homicidios, pedofilia, y tanto hombres como mujeres buscados con alerta roja de Interpol, agregó.
FUENTE: Migración Panamá/ Ministerio de Seguridad Pública de Panamá / Redacción Diario las Américas