La reinterpretación de las normas y lapsos técnicos por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE) puede provocar que la consulta popular sobre la continuidad en el poder de Nicolás Maduro se realice a finales del mes de febrero de 2017, varias semanas después del límite constitucional del 10 de enero.
No obstante, este nuevo cronograma no cuenta con el aval de todos los rectores electorales, especialmente del rector Luis Emilio Rondón quien considera que aún es posible, si se cumplen los requisitos previstos en la Constitución, realizar la consulta popular en el año 2016.
Finales de octubre para recoger firmas
En una extensa exposición legal, técnica y política la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, aseguró que no será sino hasta el 16 de septiembre cuando el organismo comicial se pronuncie sobre la pertinencia de la solicitud de activación del referendo revocatorio que presentó la oposición venezolana el pasado 2 de agosto.
Aunque el artículo 21 de las “Normas para Regular la Promoción y Solicitud de Referendos Revocatorios”, publicadas en la Gaceta Electoral 405 del 18 de diciembre de 2007, establecen que el CNE dispone de hasta 15 días continuos para realizar este análisis (15 días continuos que debieron comenzar a correr el pasado 3 de agosto), el cronograma presentado por la presidenta del CNE establece que será entre el 14 y 16 de septiembre cuando el organismo se pronuncie sobre si procede o no la petición de la oposición.
En caso que la respuesta del CNE sea afirmativa, el artículo 24 de las referidas normas le confiere hasta 15 días hábiles para definir los aspectos técnicos de la recolección que podría realizarse finalmente entre los días 25 y 27 de octubre.
Según el artículo 72 de la Constitución Nacional para activar un referendo revocatorio se necesita contar con el aval de, al menos, el 20% de los ciudadanos inscritos en el Registro Electoral; esto significa que deben firmar avalando la consulta popular 4 millones de venezolanos.
Si el CNE no hubiese cambiado por la vía de los hechos la aplicación de la norma de referendo, la recolección de firmas equivalente al 20% de los electores debía realizarse entre el 10 y 12 de septiembre.
15 días hábiles para revisar capta huellas
Si la oposición logra movilizar, al menos, 4 millones de personas al proceso de recolección del 20%, el artículo 28 de las normas que regulan los referendos revocatorios le confieren al CNE hasta 15 días hábiles para verificar y totalizar las manifestaciones de voluntad, un lapso innecesario porque el proceso para firmar por el referendo revocatorio es automatizado con equipos biométricos.
Por último, el artículo 30 de las referidas normas indican que el organismo comicial tiene hasta 90 días para organizar la consulta popular.
Sobre este precedente técnico, la presidenta del CNE aseguró en una amplia disertación, que organizar esa elección en 37 días fue producto del trabajo técnico que previamente había realizado el organismo comicial para las elecciones regionales que se celebraron en diciembre de 2012.
Lucena también criticó a quienes aseguran que el organismo que preside “manipula” la normativa del revocatorio: “Estamos viviendo situaciones complejas que hemos vivido en otro años. Algunos factores políticos buscan a través de la tergiversación de las normas y el desconocimiento, demoler la autoridad electoral“.
Por otra, indicó que “pierden su tiempo quienes creen que por vía de la presión política mediarán la voluntad de este Poder Electoral de cumplir y hacer cumplir la ley en resguardo de la República y la estabilidad del país”.
Si es posible en 2016
Técnicos electorales de la oposición, como el propio rector principal del CNE Luis Emilio Rondón, sostienen que el referendo revocatorio contra Maduro –en caso de cumplirse con los requisitos previstos en la ley– puede realizarse antes del límite constitucional del 10 de enero de 2017.
Tanto Rondón como los técnicos de la oposición venezolana recuerdan, por ejemplo, que en el año 2013 el organismo comicial organizó una elección presidencial sobrevenida en 37 días continuos.
Según explicó Rondón, se opuso a la decisión tomada por la mayoría del directorio de que la recolección de manifestaciones de voluntad del 20% se realizara a finales del mes de octubre porque “se pudo fijar una fecha anterior si las actividades para la preparación técnica y logística de las máquinas se iniciaran en la segunda quincena de agosto como lo propuse en la sesión de ayer y no a partir de la primera quincena de septiembre como se dispuso”.
Según Rondón “estos 38 días para el alistamiento de la plataforma tecnológica, que se incorporaron al cronograma, son más que suficientes para el despliegue de la totalidad de la infraestructura de los más de 14 mil centros de votación con los que cuenta el CNE para garantizar a los venezolanos el ejercicio de sus derechos políticos.
Por otra parte, Rondón indicó que no existe “ningún impedimento jurídico, tecnológico o logístico para que se cumpla con la ejecución del procedimiento de solicitud de revocatorio una vez cubiertos los extremos de la norma. La voluntad de cumplir con nuestro deber constitucional como ente rector de los procesos electorales es fundamental (…). Aun así vimos como 5 días para constatar el 1%, previstos en el artículo 10 numeral 5 de la resolución nombrada, se convirtieron en más de treinta días”.
Rondón le recordó a Lucena que “la inexistencia de un cronograma desde el momento de la solicitud de la activación del revocatorio ha lesionado el principio de imparcialidad que debe garantizar el ente y ha ido en detrimento de la igualdad que debe existir entre las partes. Por eso insistí en la divulgación previa de un calendario integral de las tres fases de la solicitud del revocatorio: promoción, recolección del 20% y realización del referendo”.
Por último, Rondón indicó que ante “la difícil situación que vive el país, considero que es indispensable que el ente comicial respete los lapsos claramente establecidos en la normativa. El CNE debe actuar en el marco del principio de celeridad que obliga la norma para cumplir con su deber constitucional de garantizar que los venezolanos puedan expresar oportunamente su voluntad”.