MONTEVIDEO.- EFE
MONTEVIDEO.- "Se está estudiando. Lo que es cierto es que no van a venir más presos de Guantánamo. Eso es definitivo", aseguró el canciller uruguayo
MONTEVIDEO.- EFE
El canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, dijo que "es definitivo" que Uruguay no acogerá a más presos del penal estadounidense de Guantánamo, como hizo el anterior Gobierno, presidido por José Mujica (2010-2015), que recibió como refugiados a seis reos de ese penal.
En declaraciones a la prensa, Nin Novoa se pronunció sobre el tema al responder a la pregunta de si el Gobierno de Tabaré Vázquez, en el poder desde el pasado primero de marzo, tiene previsto concretar alguno de los pedidos realizados por estos expresos refugiados en el país, que recientemente solicitaron a la Intendencia de Montevideo un terreno para construir una mezquita.
"Se está estudiando. Lo que es cierto es que no van a venir más presos de Guantánamo. Eso es definitivo", sostuvo.
LEA TAMBIÉN: Obama dice que debió haber cerrado Guantánamo en su primer día de presidente
Mujica achaca a "inconsistencia" EEUU que Uruguay no acoja más reos Guantánamo
El expresidente de Uruguay, José Mujica (2010-2015), opinó hoy que "la inconsistencia de la política norteamericana" puede ser un motivo por el que el nuevo Gobierno uruguayo de Tabaré Vázquez haya rechazado acoger en el país a más exreos del penal de Guantánamo (Cuba) en calidad de refugiados.
En declaraciones a Efe, Mujica se refirió a las afirmaciones del canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, en las que dijo hoy que "es definitivo" que Uruguay no acogerá a más presos del penal estadounidense de Guantánamo, como hizo Mujica, que recibió en diciembre de 2014 como refugiados a seis reos de ese penal.
Tras añadir que "no había acuerdo de traer más", Mujica consideró que si el Ejecutivo de Tabaré Vázquez rechaza recibir a más exreclusos "puede tener sus motivos", como es, a su juicio, "la inconsistencia de la política norteamericana".
Exreo de Guantánamo advierte huelga hambre y pide cita con canciller uruguayo
Uno de los seis exreclusos del penal de Guantánamo refugiados en Uruguay habló de la "posibilidad" de hacer una huelga de hambre ante la embajada de EE.UU. por haber estado preso por 12 años sin cargos y pidió reunirse con el canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, para tratar su situación.
El Canal 10 de Uruguay informó que el exprisionero de origen sirio Abu Wael Dhiab le aseguró que la huelga de hambre es "una posibilidad" y que quiere reunirse con el canciller Nin Novoa para tratar varios temas sobre su situación en el país, al que llegó en diciembre pasado en calidad de refugiado.
Dhiab declaró el fin de semana al diario estadounidense Washington Post que EEUU le hizo perder 12 años de su vida en prisión y lo responsabiliza de la muerte de uno de sus cuatro hijos y de que su esposa y él estén viviendo un "infierno".
Según lo publicado el Washington Post, Dhiab ya no acepta los 600 dólares por mes que le da el Gobierno uruguayo, no tiene trabajo ni ingresos, ha dejado de ir al hospital pese a sus problemas de salud y anunció que en cuanto se acaben los tomates, pepinos y patatas que aún le quedan iniciará una huelga de hambre.
"Voy a empezar una huelga de hambre. Voy a sentarme delante de la embajada de Estados Unidos", indicó a ese rotativo Dhiab, quien llegó como refugiado en diciembre pasado a Uruguay, junto otros cinco exprisioneros de Guantánamo, una cárcel para acusados de terrorismo situada en la base que EE.UU. tiene en territorio cubano.
Seis refugiados
La llegada de los seis hombres contra los que nunca se presentaron cargos y considerados de bajo riesgo, se produjo el pasado 7 de diciembre y respondió al compromiso de Mujica de colaborar con su homólogo Barack Obama en el programa de cierre de Guantánamo, un penal para acusados de terrorismo situada en la base que EEUU tienen en territorio cubano.
"Hemos ofrecido nuestra hospitalidad para seres humanos que sufrían un atroz secuestro en Guantánamo. La razón ineludible, es humanitaria", argumentó Mujica dos días antes de la llegada de los refugiados -cuatro sirios, un tunecino y un palestino-, que fue desde el inicio de su trámite duramente criticada por la oposición.
La semana pasada, el presidente Barack Obama dijo que debió haber cerrado el penal de Guantánamo al llegar a la Casa Blanca, en 2009, cuando parecía haber consenso con la oposición republicana sobre su clausura.
Su administración trabaja a contrarreloj para cerrar el centro de detención en los escasos dos años que le quedan en la Casa Blanca, pero se topa con la férrea oposición de los republicanos, con el control absoluto del Congreso tras las legislativas de noviembre.
LEA TAMBIÉN: Seis presos de Guantánamo llegan a Uruguay, donde serán "hombres libres"