Caravana por la libertad para Cuba

Esta actividad se llevará a cabo en protesta por la forma en la que se están llevando a cabo las negociaciones para el restablecimiento de las relaciones entre los gobiernos de Estados Unidos y Cuba.  En las que la actual administración norteamericana está aceptando –prácticamente sometiéndose- todas las exigencias que con altanería está planteando de antemano el gobierno dictatorial cubano; mientras que de la parte de los Estados Unidos, hasta el momento no se ha demandado concesión alguna a la dictadura castrocomunista.

Pero mas significativamente, la actual administración norteamericana no ha estado considerando las legítimas aspiraciones de libertad y democracia y las imprescindibles garantías, de hecho institucionalizadas de los derechos humanos, asuntos esenciales por los que tantos cubanos han dado sus vidas o han sacrificado su libertad personal o han tenido que marchar al exilio con el dolor propio de esa situación.  Ese enorme contingente de cubanos que, asentados así en los Estados Unidos, confiaron en encontrar en los valores constitutivos de este país, la correspondiente afinidad de libertad y democracia que querían rescatar para Cuba.  La relaciones diplomáticas y la consecuente ayuda económica que las mismas conllevan, en la forma en que se están negociando, se enfilan hacia reafirmación más aún, del gobierno totalitario, en un increíble amparo, indolente y desleal, que permitirá y hasta propiciará, la reafirmación represiva, la voracidad de un Estado policial, que a los ojos asombrados y, en mucho, cómplices de la opinión internacional. Ya que el gobierno castrocomunista, desde el inicio de esas negociaciones, manifestó, en la voz del tirano heredero Raúl Castro, que aquel gobierno no haría concesión política alguna.  Luego, la dictadura represiva continuaría, y para muestra de ello, la represión brutal de la policía política en la Isla (detenciones masivas, golpizas, allanamiento de sus hogares, secuestros periódicos, etc.) se ha incrementado contra pacíficos disidentes por la libertad, la democracia y el respeto a los derechos.

Los cubanos anticastristas en el exilio y los disidentes dentro de Cuba, tienen el esencial derecho de reclamar la libertad y la democracia para su país. Y que la actual administración del gobierno norteamericano considere en las festejadas relaciones con la dictadura cubana, esas legítimas aspiraciones, valores que esencialmente sirven de soporte ideológico a los propios Estaos Unidos.

Otras comunidades hispanoamericanas emigradas a los  Estados Unidos, como, por ejemplo, 
los hermanos mexicanos, hacen demostración pública de sus aspiraciones como emigrados en este país,  incluso el presidente de su país, se ha interesado ante el gobierno norteamericano por el destino y aspiraciones al respecto de sus hermanos en el exterior, lo que es loable.  De similar manera, los cubanos en el destierro, tienen el derecho –legítimo y humano- de demandar que en las relaciones que Estados Unidos está intentando con la dictadura castrocomunista no se soslayen las legítimas aspiraciones del pueblo cubano en su lucha larga y desamparada por la libertad y la democracia.  Y, en última instancia los cubanos que asì piensan, tienen el virtual derecho de decirle ¡NO!, no estamos de acuerdo con el curso que han estando domando esas inesperadas negociaciones.

Esos son los motivos por lo que el sábado 6 de junio se llevará a efecto una caravana por la libertad para Cuba.  La misma ha sido convocada por la Asamblea de la Resistencia (y las organizaciones que la integran). Tendrá como punto de reunión y partida el monumento del Memorial Cubano, que se encuentra en los terrenos de la F.I.U.  yendo por Coral Way y entrando por la Ave. 112, saliendo a las 10.00 a.m. de dicho lugar y, tras hacer su recorrido planeado por varias calles circundantes de dicho Memorial, se regresará al mismo.  Es la respuesta rotunda y legítima que, ante las circunstancias difíciles e inciertas, dan los mártires y los héroes cubanos, reclamando las libertades, la afirmación de la democracia y los derechos humanos, valores inalienables para Cuba, por los que tanto se ha luchado.