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MIAMI.- El Miami Jewish Film Festival celebra su 23ra. edición con la mayor proyección de filmes que haya tenido: 107 producciones fílmicas, procedentes de 25 países, que serán proyectadas en salas de Aventura, Coral Gables, Miami y Miami Beach, del 9 al 23 de enero.
La muestra cinematográfica, que recoge las diversas maneras del sentimiento milenario de la cultura judía esparcida por el mundo, cuenta con seis estrenos mundiales, además de debuts internacionales y premieres en Estados Unidos, así como la impresionante cifra de 31 cintas dirigidas por mujeres.
“Las artes, y en particular el cine, nos une como comunidad, y ese es el principio de este festival”, señaló el director del encuentro cinematográfico, Igor Shteyrenberg.
El festival comienza el jueves 9, a las 8 p.m., en la gran sala del Aventura Arts & Cultural Center, con el estreno mundial del film documental estadounidense Saul & Ruby, To Life!, dirigido por Tod Lending, que cuenta la historia de dos sobrevivientes del Holocausto, Saul Dreier y Ruby Sosnowicz, que se establecieron en Miami Beach y formaron una banda de música que celebra la vida.
De hecho, la muestra cinematográfica cuenta con un apartado dedicado a producciones procedentes de países iberoamericanos e ibéricos, como es el caso de Final Hour, que recoge la historia y permanencia de la lengua ladino, derivaba de la fusión del hebreo y el español en la España del siglo XV; así como el filme Your Wishes in Heaven, titulada en español Tu boca en los cielos, que aborda el perdón de la expulsión de los judíos del país ibérico en el año 1492; la comedia Back to Maracanã, que cuenta la historia de un brasileño que vive en Israel y regresa al país sudamericano durante el campeonato mundial de futbol; o la tragicomedia argentina My Amazing Funeral, o El día que me muera, que narra las peripecias de un madre para reunir a sus hijos en casa tras muchos años de ausencia.
Premiaciones
Este año, el festival galardona a producciones y nuevos realizadores, además del premio de prensa: tres galardones que despiertan el interés de participantes y espectadores por igual.
“El premio del Grand Jury Prize concede 18.000 dólares, que proceden de la contribución de la firma de bienes raíces Crescent Heights, así como 5.000 al filme ganador en la categoría Next Wave Jury”, explicó el director del festival.
En efecto, 14 films forman parte del Grand Jury Prize Competition, cuyo ganador tendrá 18.000 dólares de recompensa: A Cantor’s Head, de Erik Greenberg Anjou; Aulcie, de Dani Menkin; Breaking Bread, de Beth Elise Hawk; y Chained, de Yaron Shani.
De la misma forma, compiten en este gran apartado Esau, de Pavel Lungin; God of the Piano, de Itay Tal; Incitement, de Yaron Zilberman; Lyrebird, de Dan Friedkin; y Menachem Begin: Peace and War, de Levi Zini; así como Once Were Brothers, de Daniel Roher; Shalom Taiwan, de Walter Tejblum; The Electrifiers, de Boaz Armoni; y Those Who Remained, de Barnabás Tóth; además de Saul & Ruby, To Life!, de Tod Lending.
El portal MiamiJewishFilmFestival.net cuenta con información detallada sobre cada una de las producciones fílmicas, incluyendo las salas donde se proyectarán, horarios y compra de entradas.
Resaltan
También destaca la proyección de cuatro cintas que aspiran a participar en la gran final del Oscar internacional: la cinta checa The Painted Bird, el filme letón The Mover, el israelí Incitement y la húngara Those Who Remained.
De igual manera, el festival contará con la proyección del documental Hate Among Us, que aborda la creciente ola antisemita en el mundo y es también aspirante a la final correspondiente del Oscar.
Además de cine, el festival cuenta con actividades musicales que añadirán placer a la celebración: la actuación de Greater Miami Youth Symphony, la South Florida Jewish Chorale, la pieza A People’s Soundtrack, que cuenta con los temas más representativos de Broadway.
En Soundscape Park, frente al New World Center en Miami Beach, habrá proyecciones especiales y gratuitas de filmes consagrados que guardan alguna relación con películas que presenta el festival, como es el caso del clásico Casablanca, que forma parte de la trama de la cinta húngara Curtiz.
Mención especial merece el filme Crescendo, del realizador israelí Dror Zahavi, que demuestra cómo la música, el sentido común y el amor se sobreponen a las divergencias religiosas y políticas del conflicto árabe-israelí.
También mencionamos las producciones dedicadas a la memoria del Holocausto y su repercusión histórica, como My Name Is Sara, que rompe el corazón; When Hitler Stole Pink Rabbit, dirigida por el creador del filme ganador de Oscar Nowhere in Africa; el documental Anne Frank: Parallel Stories, narrado por Helen Mirren; la escenificación judicial The Collini Case, interpretada por el legendario actor italiano Franco Nero.
Asimismo, realzamos el estreno mundial del documental hecho en Miami Names, Not Numbers, que aborda la labor cinematográfica y periodística de jóvenes estudiantes del Gran Miami la historia y la cultura del pueblo judío; y Holy Silence, que expone la posición adoptada por El Vaticano durante la Segunda Guerra Mundial.
"Me ha encantado dirigir el Festival de Cine Judío de Miami durante los últimos siete años y ver cómo ha evolucionado hasta convertirse en una certamen de primer nivel que ofrece educación y programación cinematográfica", indicó Shteyrenberg.