NUEVA YORK.- EFE
Entre los rumores destaca el de una posible aparición de Jay Leno, el que fuera primero su aprendiz y luego su gran rival
NUEVA YORK.- EFE
Una era de la televisión nocturna dirá adiós el próximo miércoles con la despedida de David Letterman, el decano de los late-night shows y toda una leyenda de la pequeña pantalla.
Letterman pondrá fin a 33 años al frente de este tipo de programas -primero en la NBC y desde 1993 en la CBS- y con él se irá el último de una generación de cómicos que creó escuela.
Gamberro, irreverente y, a medida que avanzó su carrera, cada vez más irónico y cascarrabias, el presentador pasará a la historia como uno de los grandes renovadores del género y, al mismo tiempo, como uno de los comunicadores más exitosos de las últimas décadas.
Con su adiós, se completará la renovación de la parrilla nocturna, dominada ya por rostros mucho más jóvenes como Conan O'Brien, Jimmy Kimmel o el flamante Jimmy Fallon, que pilota The Tonight Show en la NBC.
El espacio fue, precisamente, el sueño inalcanzable de Letterman, que comenzó su andadura en televisión en la cadena y que aspiraba a sustituir al legendario Johnny Carson.
Sin embargo, cuando este se retiró, NBC dio la sorpresa y optó por ceder el testigo a Jay Leno, empujando a Letterman a la CBS, de la que no se movió durante 22 años.
En ese tiempo, con un programa diario, el presentador ha tenido tiempo de sobra para dejar cientos de momentos memorables, desde el humor gamberro de sus inicios a su sentido discurso tras los atentados del 11S, cuando fue el primer cómico en volver a las ondas.
Letterman, por supuesto, también ha vivido momentos difíciles, por ejemplo, cuando admitió en antena haber mantenido relaciones con una asistente y con otras subordinadas para evitar un intento de chantaje por parte de una de ellas.
El cómico aseguró entonces haber hecho "cosas horribles" y se convirtió en diana de muchas críticas, que sin embargo no le impidieron seguir durante años con su programa.
Tampoco pudo con él una operación a corazón abierto en el año 2000, que le obligó a estar un mes alejado de la televisión, pero de la que volvió con más fuerza que nunca.
"Fue fantástico porque todo iba sobre mi. (...) La gente venía y se preocupaba por mi y me ayudaban a levantarme de la cama y andar por el ala del hospital. Y luego cuando salí venían a casa y... era maravilloso", recordaba hoy en una entrevista con su característico sentido del humor.
Para Letterman, mucho más que aquel quíntuple bypass, lo verdaderamente terrorífico llega ahora, cuando a los 68 años pondrá fin a una vida dedicada a la televisión.
"Me siento desnudo y asustado", admitió hoy sobre la retirada, tras la que no tiene aún muy claro qué hará. "Dudo que alguien vuelva a verme", bromeó.
En las últimas semanas, Letterman -que será sustituido por Stephen Colbert- ya ha ido anticipando el fin de su programa con varias entrevistas especiales con, entre otros, el expresidente Bill Clinton, Julia Roberts, George Clooney y Oprah Winfrey.
Este lunes, el protagonista será el actor Tom Hanks y la actuación musical correrá a cargo de Eddie Vedder, el líder de Pearl Jam, mientras que el martes el presentador cerrará el círculo con una entrevista al que fuera su primer invitado hace 33 años: el cómico Bill Murray, que hará su aparición número 44 en el programa.
Ese día, tras dos décadas de ausencia, la música será cosa de Bob Dylan, a la espera de un último episodio el miércoles del que no se han dado detalles.
Entre los rumores destaca el de una posible aparición de Jay Leno, el que fuera primero su aprendiz y luego su gran rival, al que Letterman sobrevivió en las pantallas, y que pondría un clásico final feliz a la carrera de todo un icono estadounidense.