MIAMI.-Fabián Ríos no quiere volver a separarse de su familia por cuestiones de trabajo. Si algo le ha dejado la pandemia al actor, cuyo personaje entrará en la trama de la serie 100 días para enamorarnos, ha sido la reafirmación de cuán esencial es para él mantenerse cerca de los suyos.
“Yuli y yo estamos felices porque llevábamos mucho tiempo separados por las series y las novelas. La vida nos cambió para bien, porque de aquí para enfrente no me separo más de ellos. Los trabajos que tenga de ahora en adelante serán cerca de mi familia. Y si llego a conseguir algún tipo de trabajo porque me toca, me voy con ellos”, reveló a DIARIO LAS AMÉRICAS Fabián Ríos, durante una entrevista concedida vía telefónica desde su hogar en Miami, donde vive con su esposa, Yuli Ferreira, y los dos hijos del matrimonio, Lucía, de 11 años, y David, de 17 meses.
El actor, que terminó de grabar la serie de Telemundo el pasado junio y desde entonces ha estado afincado en Miami sin viajar, resaltó que el confinamiento le ha sido provechoso para reafirmar sus prioridades y su fe. A Ríos no le inquieta el efecto que pueda tener la pandemia en futuros proyectos en la televisión y estaría dispuesto a trabajar “en lo que sea”, pero siempre cerca de su gente.
“Yo creo que Dios hace las cosas para bien. Y a mí me favoreció estar con mi familia esta cuarentena, independientemente de la economía mundial. La economía mundial no tiene nada que ver con la fe que uno pueda tener. Yo tengo la fe puesta en Dios y no en una economía. Lo que pasa en el mundo es problema del mundo, pero lo que a mí me interesa es poner los ojos en Dios, que es quien mantiene a mi familia unida y me tiene con vida para seguir trabajando en lo que sea para seguir trayendo el sustento a mi casa. Así que a donde toque, me voy con mi tropa”, expuso.
“Yo no tengo miedo. Durante 20 años he hecho en la televisión lo que quise hacer: muchas series, películas, novelas. De aquí en adelante lo que voy a hacer es mantener a mi familia unida. Y trabajar una vez por año en una película, una serie o una novela. No digo que estoy entrando en una etapa de pasividad, al contrario, estoy en el mejor momento de mi vida, pero le doy gracias a Dios que, en el mejor momento de mi vida, ya lo he hecho todo en la televisión. Todavía hay muchos productos que estaré estrenando por todo el mundo por los próximos tres años, así que no tengo afán”, agregó.
Convivencia y crianza
Su relación de pareja también se solidificó en la etapa de confinamiento.
“La cuarentena nos ha ayudado a darnos cuenta a Yuli y a mí de que somos el uno para el otro. Nos estamos correteando más que nunca, me gusta más que nunca. Y creo que yo también le gusto bastante a ella, es más, le toca vivir escondida, porque sino la tuviera desnuda todo el día”, reveló, entre risas.
En cuanto a su rol más importante: el de padre, dijo ser consentidor pero exigente a la vez. Y quiere siempre enseñar con el ejemplo.
“Soy el papá más alcahueta de la vida, me gusta que mis hijos disfruten conmigo, pero soy muy disciplinado; les exijo muchísimo para poderlos consentir. Creo que mis hijos son los que deberían hablar por mí, pero sí soy muy alcahueta. Quiero que vean que he sido un papá que les dio un buen ejemplo”, expresó.
Sobre qué tipo de crianza implementan en el hogar en cuanto a roles de género, señaló que prefieren apegarse al estilo conservador.
“Al varón se cría varón y a la hembra como hembra. Y eso es lo que hace que el mundo sea tan maravilloso. Nunca la feminidad se podrá comparar con la forma cómo criamos a los varones. A la niña yo la trato con delicadeza, con mucha más ternura”, dijo.
“Con el varón manejo una ternura mucho más varonil. Pero para mí las niñas son como flores y los niños son sinónimo de jugar a los carros, a las peleas, con las niñas también, pero ahora que tengo un varoncito y a la niña, veo que mi trato hacia ella es más tierno. No digo que al varón haya que criarlo con dureza, pero sí hay que criarlo como varón y a la niña como niña. A las mujeres se deben criar de manera más suave. Aquí en esta casa se hace así y creo que nos funciona mucho”, agregó.
Regresa el villano
Con su nuevo papel actoral, se adentra en la piel de un abogado que entra en la trama de 100 días para enamorarnos para reclamar un viejo amor e interponerse en la relación de una de las parejas protagónicas.
“Mi personaje es Iván Acosta, novio de Constanza (Ilse Salas) de la adolescencia. Fue su primer novio y en esa época cuando estaban a punto de graduarse en la escuela, ella le puso cuernos con Plutarco (Erick Elías). Y se reencuentran después de veinte y pico de años en una oficina de abogados”, contó el actor colombiano conocido por sus roles antagónicos. Se trata de un rol muy distinto al que anteriormente había interpretado en Sin sinos sí hay paraíso, historia en la que encarnó a Albeiro, un “hombre noble, pobre y humilde”.
“El personaje de Iván Acosta lo disfruté porque es muy diferente. Este es orgullosísimo, materialista, antagonista, es un encantador de serpientes, que trae toda la dinamita del poder económico. Creo que fue la mejor amalgama que pude encontrar para poder reivindicarme con los personajes. Quería eso desde hace mucho tiempo. Y además en la comedia, que me encanta”, manifestó.
“Él va a perdonarla. Si uno ama de verdad, sí perdona”, agregó Ríos contestando a la pregunta de si él perdonaría una infidelidad al igual que su personaje, que entrará en acción próximamente, en el capítulo 41 de la serie.
Nuevo proyecto, un despertar
Desde hace tres años el actor se embarcó junto a su esposa en una nueva aventura para crear consciencia sobre la importancia de alimentarse sanamente.
“Creamos Vida Nation con el fin de ayudar a las personas a que entiendan que todo lo que nos han vendido sobre la alimentación es producto de publicidad para ganar dinero, pero no nutre ni hace bien. Y queremos despertar a la gente. Mi hija nació con 41 sensibilidades y eso nos puso los pies en la tierra para entender que debíamos ayudar a la gente a que, por medio de la alimentación, esas sensibilidades pueden reducirse. Mi esposa ha estado en el mundo de la nutrición en los últimos cinco años”, contó.
“Y de ese amor profundo por su hija y esa investigación sobre los alimentos que de verdad nutren al cuerpo, nace Vida Nation para ayudar a muchos niños y familias. Será una academia virtual gratuita en la que le enseñaremos, con la ayuda de expertos, a la gente a alimentarse y a cómo utilizar los alimentos que realmente funcionan para el cuerpo”.
Para conocer más acerca de Vida Nation, visite la página web vida-nation.com.