jueves 7  de  noviembre 2024
MÚSICA

Nuviola y Rubalcaba logran un viejo anhelo con nuevo disco

Aymée Nuviola y Gonzalo Rubalcaba conversan sobre "Viento y Tiempo", que grabaron juntos en vivo ante el público japonés y ahora presentan en el Arsht Center
Diario las Américas | WILMA HERNÁNDEZ
Por WILMA HERNÁNDEZ

MIAMI.- Luego de muchos años deseando realizar un disco juntos, los cubanos Aymée Nuviola y Gonzalo Rubalcaba logran concretar Viento y Tiempo, un material en el que recopilan esas canciones que acompañaron varias etapas que vivieron en la isla, desde la época en la que eran vecinos en el barrio habanero de Cayo Hueso.

Se trata de un álbum grabado en vivo en el emblemático club de jazz Blue Note Tokyo, en la capital japonesa, donde la cantautora y el pianista ofrecieron en 2019 una serie de seis conciertos con el propósito de luego convertirlos en una producción discográfica. Y ahora la presentarán ante el público miamense el sábado 20 de marzo, a las 8 pm, en la Ziff Ballet Opera House del Arsht Center. Para boletos o más información sobre el concierto, visite arshtcenter.org.

“Se grabaron seis conciertos tres días seguidos, dos conciertos cada noche en el Blue Note de Tokio. Y de esos conciertos se extrajo lo que se creyó que eran las mejores interpretaciones o las mejores performances de cada tema que se incluyó. En el disco se escucha al público japonés, se siente energía, su presencia, la alegría de ellos, se les escucha cuando ríen, cuando aplauden, incluso, parece que están bailando. Y en los videos se les ve participando. Es un disco que tiene mucho ambiente y eso me gusta muchísimo”, contó Aymée Nuviola a DIARIO LAS AMÉRICAS.

“Creo que en mi carrera hacía falta un disco que incluyera al público en vivo, porque cuando se tiene a un público enfrente hay cosas que pasan una sola vez y si no las captas en ese momento se pierden. Y esa espontaneidad que se logra cuando se puede grabar todo lo que está pasando en escena, es la magia que tiene un disco en vivo”, agregó la cantante ganadora del Grammy y el Latin Grammy.

Y al resultado de esas tres noches actuando frente el público japonés le dieron por nombre Viento y Tiempo, Live at Blue Note Tokyo. El disco tan anhelado por ambos vio la luz el pasado verano en plena pandemia y logró una nominación en la recién edición de los premios Grammy.

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Imagen promocional del disco Viento y Tiempo, Live at Blue Note Tokyo, de Aymée Nuviola y Gonzalo Rubalcaba.

Imagen promocional del disco Viento y Tiempo, Live at Blue Note Tokyo, de Aymée Nuviola y Gonzalo Rubalcaba.

La idea de hacerse acompañar de Rubalcaba, a quien conoce desde la infancia, Nuviola ya la venía contemplando, incluso el pianista había colaborado en algunas de sus canciones, pero a pesar de la afinidad que los unía continuaban postergando grabar un disco juntos.

“Mi esposo, Paulo, que también es mi mánager, siempre me decía que teníamos que hacer algo juntos, porque nos une una amistad de mucho tiempo; estudiamos en la misma escuela, nuestras madres eran amigas. Tenemos un paralelismo familiar muy grande porque ambos venimos de una familia de músicos. Su papá era un gran pianista de danzones, mi tío también tocaba danzones. Teníamos muchas cosas en común y siempre hablábamos de eso, pero nunca concretábamos hasta que, poco a poco, se le fue dando forma a la idea”, expuso Nuviola.

Por su parte, Rubalcaba recordó cómo fue que decidieron dejar de planear y poner manos a la obra en la realización de un disco juntos.

“Nos reencontramos aquí hace mucho rato, porque hubo un período de unos cuantos años en el que no nos vimos, que fue cuando yo salí de Cuba y ella también salió después. Cada uno fue andando por sus lares y no supe mucho de ella hasta que llegué a EEUU a finales del 96. Luego me llamó para que participara en un primer disco que hizo aquí, pero yo estaba en giras y no pudimos coincidir. Y después me llamó para el disco De La Habana hasta aquí, para que tocara en esa canción que le da título al álbum. Y desde entonces empezaron las conversaciones de que teníamos que hacer algo”, contó Rubalcaba.

“Y luego cuando toqué en la versión de El Manisero fue cuando todos dijimos ya vamos a hacer algo porque el tiempo está pasando. Y en ese momento decidimos que cuando ella terminara la promoción del disco A Journey Through Cuban Music, el próximo disco lo haríamos juntos”, agregó.

La inspiración

Escoger el repertorio no fue tarea fácil pues ambos artistas poseen un cúmulo de vivencias acompañadas por un bagaje musical.

“Yo vengo de un barrio, igual que Aymée que se llama Cayo Hueso, en Centro Habana, donde la gente vive con las puertas y las ventanas abiertas. Todo el mundo sabe lo que está pasando en la casa del vecino, lo bueno y lo malo. Uno sabe lo que está pasando en el barrio, las expresiones populares, la rumba, los toques de santo, pero también las peleas. El vecino de enfrente se sienta en la puerta de la casa con un radio y todo el mundo lo oye. Entonces hay una banda sonora ahí detrás que permite consciente o inconscientemente escuchar música”, dijo Rubalcaba.

Gonzalo Rubalcaba, aymee Nuviola, actuando en Japón
Aymée Nuviola y Gonzalo Rubalcaba se presentan el sábado 20 de marzo, a las 8 pm, en la Ziff Ballet Opera House del Arsht Center.

Aymée Nuviola y Gonzalo Rubalcaba se presentan el sábado 20 de marzo, a las 8 pm, en la Ziff Ballet Opera House del Arsht Center.

“Escoger que fueran temas muy emblemáticos fue lo más difícil. Pastorita, de Juan Formell, obedece a uno de los primeros discos de Los Van Van en los años 60. Yo puse Ciego, que esa sí vino de mí, porque creo que Aymée no la había cantado y no se acordaba. Yo la escuchaba cuando niño de un cantante ciego que se llamaba Tejedor, que hacía un dúo con un conjunto y ellos hacían una versión de esa canción de Manzanero. Y a mí esa canción me gustaba mucho y me provocaba mucha nostalgia”, añadió el pianista.

El álbum también incluye una versión de Lágrimas negras, y Bemba colorá, que Celia Cruz popularizara. Además, contiene Rumba callejera, de la autoría de Nuviola, y Azúcar pa’ tu café, el único tema del disco grabado en Miami, con la colaboración de Cimafunk.

Un homenaje a sus raíces

Unidos por los recuerdos de una ciudad en común y de sus madres, Nuviola y Rubalcaba honran con este material a La Habana y a esas mujeres, ambas fallecidas, que llegaron a ser confidentes y a quienes tanto deben.

“También está vinculada al disco la imagen de su mamá y la mía sentadas en un banquito que había en la entrada de la escuela esperando a que nosotros termináramos las clases y así se hicieron amigas, porque se pasaban horas ahí sentadas, como decimos nosotros, chismeando, conversando, incluso creo que llegaron a hablar de sus vidas, de sus cosas”, contó Rubalcaba.

“Es un homenaje a ellas dos y a La Habana, porque la habana fue nuestro centro, ese centro donde crecimos. Yo terminé mis estudios allá, me fui con 27años, me casé en Cuba, mi primer hijo nació allá, aunque salió con un añito conmigo. Son muchos acontecimientos que se dieron allí de los que son imposible despegarse. Y detrás de eso está esa banda sonora, la música con la que nos divertíamos y bailábamos en las fiestas. Hay mucha historia. Entonces, nos parecía que era correcto homenajear a nuestras madres que lo pusieron todo a favor de nuestras carreras, de nuestro porvenir. Y a La Habana, que fue donde crecimos y aprendimos las primeras cosas vinculadas al amor, al estudio, a lo profesional, donde tuvimos nuestras primeras quejas, de ahí traemos el sentido del humor, sobre todo, los que venimos de los barrios donde se vive muy intensamente”, agregó.

Asimismo, resaltó que Nuviola aun conserva su carácter y sentido del humor, algo que Rubalcaba dijo admirar en su colega.

“Aymée tiene un sentido del humor que lo ha tenido desde chiquita. Ella tiene una rapidez mental que a mí me mata, porque me llama mucho la atención y admiro mucho a la gente que tiene la capacidad de reaccionar rápido a cualquier cosa y traducirlo de manera jocosa, darle un doble sentido. Ella siempre fue así, entonces, hubo muchos momentos de esas reacciones de ella y todavía es así”, contestó Rubalcaba intentando recordar una anécdota en común.

Viento y tiempo, respaldado por el sello independiente Top Stop Music, es el segundo de una serie de tres discos que Nuviola se propuso hacer. El primero fue A Journey Through Cuban Music, que le valió su primer Grammy en el mercado anglo.

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