MIAMI.-GEYSELL CISNEROS
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En su más reciente producción, Locos por el son, fusiona el son tradicional de la isla con ritmos como timba y rap, por lo que fueron nominados a los Latin Grammy como Mejor Álbum Tropical en 2015
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La banda Sonlokos presenta este viernes a las 10 p.m. en Ball & Chain su más reciente videoclip Se te va la guagua. El grupo también deleitará a sus seguidores con temas de su producción Locos por el son, en la que combinan compases modernos y clásicos de este ritmo cubano.
“Nuestra música nace de la fusión, pero respetamos los patrones tradicionales del son y los enriquecemos con timba, rap y loops. También buscamos añadir otros ritmos más movidos que lo trasladen a la actualidad, aunque siempre con la idea de rescatar sus raíces”, expresó el director de la agrupación, Raymer Olalde, a DIARIO LAS AMÉRICAS.
Sonlokos representa el inicio de un proyecto que apuesta por la cubanía y por acercar al presente aquellos ritmos que triunfaron en épocas pasadas.
“Desde hace muchos años tenía la inquietud musical de rescatar el son cubano, por lo que empecé a trabajar para concretar este sueño. En un inicio probamos con el tema Seco y jorobado, un son escrito por el maestro Pepín Rivero, y lo fusionamos con rap y loops para hacerlo más moderno. Desde ese momento supimos que esa era la música que queríamos tocar”, comentó.
Después de identificar el estilo musical con que querían irrumpir en la palestra artística de la Capital del Sol, aún quedaba lo más importante: buscar un nombre para el proyecto.
“Hallar un nombre que nos identificara fue una de las cosas que más trabajo costó. Resulta muy gracioso que las personas piensen que Sonlokos es porque estamos locos, la realidad es que decidimos escogerlo porque lo que tratamos de hacer es un son más loco con las fusiones que incorporamos. Pero somos gente muy cuerda”, acotó entre risas.
Más de tres años tomó concretar su primer trabajo Locos por el son, pero el esfuerzo ha valido la pena.
“El disco tiene ocho temas que se dividen entre canciones inéditas y otras tradicionales que son muy reconocidas, como El tumbaito de Faustino Grama. Esto fue una manera de combinar lo antiguo con lo moderno, y así abrirnos camino poco a poco”, agregó.
Esta producción musical, que lanzaron el pasado año, estuvo nominada a los premios Latin Grammy en la categoría Mejor Álbum Tropical.
“Fue una experiencia muy grande. Estamos muy agradecidos con las personas que han confiado en este proyecto, como nuestra manager Zummy Oro que ha dado todo para que salgamos adelante. Aún me cuesta creer que nuestro primer CD haya sido nominado por la Academia. Esto ha sido un empujoncito para seguir trabajando con muchas ganas”, agregó.
Con respecto al propósito de su música, no solo se centra en rescatar el son, sino también está enfocado en la educación artística de los jóvenes.
“En el tiempo que he vivido aquí he notado que en cuestiones musicales, hay cierta confusión. Los jóvenes bailan con la música de sus padres, pero que ha sido reformada y ya no es la misma que 30 años atrás, ahora está en decadencia. Esto, y el crecimiento que está teniendo el reguetón, hace que algunos estilos se pierdan, por lo que queremos recuperarlos y de esta manera crear un vínculo entre los jóvenes y la música de antes”, afirmó.
Otro punto interesante desde la perspectiva de Sonlokos, es la manera de producir música en esta orilla y hacerlo en Cuba.
“La gran diferencia es que en Cuba nosotros vivíamos para la música y aquí vivimos de ella. En la isla teníamos tiempo para estudiar, informarnos de las últimas tendencias para enriquecer las técnicas, y aquí aunque hay más herramientas informativas, estamos más limitados de tiempo”, aseguró.
No solo las producciones se ajustan a nuevos estándares, sino que también hay que tomar otros aspectos en cuenta para poder triunfar.
“Hay que trabajar en la música para tratar de llegar al público, ver que es lo que está sonando, y buscar un sello propio que te identifique. Además tienes que hacer tu propia promoción, mover tu proyecto, y eres el encargado de encaminarlo hacia el mercado”, comentó.
Aunque la música es universal, el público suele ser más selectivo, y el de Miami no es la excepción.
“A pesar de que en esta orilla la mayoría son cubanos, el público cambia un poco. Es más exigente porque tiene el mercado más abierto y puede elegir lo que quiere escuchar. Estamos tratando de hacer una música internacional, y por eso hemos tenido que cambiar, adaptarnos a lo que el público quiere bailar y escuchar”, expresó.
Para Sonlokos está claro que este es solo el inicio de su carrera.
“Vamos a seguir trabajando fuerte. Tenemos mucha fe y esperanza en este proyecto. Queremos llevar nuestra música, que no es más que la tradicional cubana, a todos los rincones del mundo”, acotó.
Aunque no descartan regresar a su tierra natal para tocar, se encuentran enfocados en otro mercado.
“Cuba será más adelante, aunque sabemos que allá la música llega de todas maneras. Ahora hay muchos lugares que podemos tocar, y entre ellos hemos pensado en Europa, donde la música tradicional cubana es muy bien recibida”, concluyó.
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