Los Marlins de Miami y los Bravos de Atlanta estuvieron metidos de lleno en un duelo de pitcheo durante los primeros cinco capítulos del desafío del pasado martes por la noche, en el que los peces sucumbieron con marcador de 5-0. Max Fried fue el encargado de lanzar las serpentinas por parte de los locales, mientras que Trevor Rodgers era el responsable del lado de los dirigidos por Skip Schumaker.
Pero, a pesar del gran trabajo de Rogers en las primeras de cambio de su presentación, el zurdo volvió a fallar en su intento por alcanzar el sexto capítulo, cayendo en dicho tramo por tercera apertura de forma corrida. Al momento en que Schumaker le quitó la pelota, Miami estaba abajo en la pizarra por cinco anotaciones.
"Eso es lo que hace divertido a este juego", le comentó el brazo a MLB.com posteriormente. "Fried hizo un muy buen trabajo. El hecho de que pueda salir, competir con él y llegar hasta el sexto inning con, hasta ese punto, solo dos carreras permitidas, muestra bastante de mi preparación. Pero al final del día, perdimos ese juego. No lo tomo a la ligera tengo mucho trabajo por hacer", agregó.
Rogers, que toleró cinco rayitas (tres de ellas limpias) en sus cinco episodios y dos tercios de labor, mostró algunas señales que podían reflejar cansancio; sin embargo, Schumaker mantuvo que, ante sus ojos, el lanzador no estaba agotado.
"No pienso que haya estado cansado", dijo el mandamás. "Quizás su velocidad estaba disminuyendo, pero durante la mayor parte del tiempo, creo que estuvo bien. No se trata de que estuvo cerca de la marca de los 100 pitcheos o algo así. Estaba alrededor de los 70. Pienso que estuvo bien, eficiente, generó muchos rodados. Simplemente no pudimos cubrirlo en el área ofensiva".
Mejor que en 2023 para Miami:
Después de quedar limitado a 18 innings de trabajo en cuatro apariciones en 2023, Rogers ya ha podido superar esa marca en lo que va del presente campeonato. El otrora prospecto ha demostrado en ese lapso que puede mantener a los Marlins en los juegos, pese a que el club ha anotado una carrera o menos en cuatro de sus cinco salidas hasta ahora.
"Todo se siente muy bien. El hecho de que haya superado lo conseguido el año pasado es un indicativo de cuánto tiempo estuve fuera", señaló. "Y que esté obteniendo estos resultados es algo bueno. Por supuesto que no todo saldrá como quiero, pero estoy ejecutando mi progreso, haciendo un muy buen trabajo a la hora de ejecutar mis pitcheos. Y cuando finalmente pueda superar esa alcabala (el sexto inning), tomaré mi ritmo".