Los Dolphins sienten que todavía están con vida, pero su récord 5-7 en diciembre dice que tendrán la obligación de ganar sus próximos cinco partidos que faltan para terminar la temporada regular o de lo contrario estarán muertos.
El escuadrón de Miami deberá de ganar todo lo que le falta, de lo contrario se quedará sin ir a los playoffs; sus jugadores piensan que todavía se puede alcanzar la hazaña
Los Dolphins sienten que todavía están con vida, pero su récord 5-7 en diciembre dice que tendrán la obligación de ganar sus próximos cinco partidos que faltan para terminar la temporada regular o de lo contrario estarán muertos.
Empezar noviembre en la NFL con un récord 2-6 es como estar sentado en la silla eléctrica y tener la esperanza que se hayan olvidado de pagar la factura de la luz o que se queme algún fusible.
El escuadrón de Miami se recuperó algo en el penúltimo mes del año, pero lo cerró con una derrota 30-17 contra los Packers de Green Bay, el Día de Acción de Gracias, que cortó una racha de tres triunfos consecutivos.
Por eso ahora, los Dolphins ya no dependen solo de ellos mismos. De manera perentoria deben salir airosos en sus próximos cinco compromisos y esperar que equipos como los Chargers de Los Ángeles (8-4), los Ravens de Baltimore (8-5), los Broncos de Denver (8-5) y los Colts de Indianápolis (6-7) sufran un descalabro.
“Debemos tomar partido a partido”, dijo el tight end Jonnu Smith. “Todavía estamos con vida y con mucho optimismo. Hay muchos guerreros en nuestro equipo y vamos a continuar luchando”.
En su primer año con los Dolphins, Smith cumple la mejor de sus ocho campañas en la NFL con 648 yardas ganadas hasta ahora y cuatro touchdowns.
Ese gran momento, sin embargo, no llena de satisfacción al tight end.
“Los récords individuales no ganan los partidos”, sentenció Smith. “Si todo el equipo cumple actuaciones destacadas entonces eso va a traducirse en victorias. Y eso es lo que tratamos de hacer”.
Este es el momento en el que los Dolphins tienen que alinear las estrellas para salvar la temporada. Por lo visto hasta ahora el equipo ha respondido bien contra rivales débiles y se ha llevado el triunfo. En cambio, ha sido superado por escuadras con récord ganador como los Buffalo Bills y los Packers.
Ese antecedente preocupa porque los Dolphins llegan a esta etapa crucial de la campaña sin margen para el error.
Cuatro de sus próximos cinco partidos serán contra equipos con marca perdedora: NY Jets (3-9), partidos de ida y vuelta; San Francisco 49ers (5-7) y Cleveland Browns (3-9).
El momento complicado
Lo más complicado será cuando visiten a los Texans (8-5) en Houston, el próximo 15 de diciembre, pues mientras los Dolphins no se pueden permitir perder ni un solo de los encuentros que le restan, los Texans luchan por asegurar el primer puesto en la División Sur de la Conferencia Americana, que no solo le asegurará su clasificación a los playoffs sino que le permitirá abrir en casa su primer partido de postemporada.
Ahí los Dolphins se jugarán el todo por el todo y no será nada fácil.
“Nos quedan cinco semanas”, reflexionó el defensive tackle Zach Sieler. “Debemos vencer a los Jets el domingo 8 de diciembre y seguir avanzando. Ninguno de nosotros dará un paso atrás o dudará. Vamos a empujar todos y terminar nuestro trabajo”.
Sieler confiesa que el equipo tiene la sensación de urgencia en estos momentos.
“Hay un cambio de mentalidad cuando uno llega a este punto”, agregó el defensive tackle. “Vamos a tener que rascar lo más que podamos para sacar lo mejor de nosotros mismos, porque todavía es posible llegar a los playoffs. Todo es cuestión de ganar nuestros próximos cinco partidos y esto empezará el domingo contra los Jets”.
Temporada llena de baches para los Dolphins
Las cosas comenzaron a tambalear cuando su quarterback estelar Tua Tagovailoa sufrió una conmoción cerebral apenas en la segunda fecha y tuvo que cumplir con el protocolo de la NFL para estos casos, que manda cuatro partidos de descanso.
Luego se produjeron otras lesiones y finalmente su dupla ofensiva de mayor efectividad, los wide receivers Tyreek Hill y Jaylen Waddle, no tuvieron la producción que de ellos esperaba la afición.
“Nuestra ofensiva no ha cambiado su concepto”, enfatizó el entrenador de los Dolphins Mike McDaniel. “Solo hemos puesto énfasis en cómo aprovechar la excesiva marcación de los rivales sobre Tyreek y Jaylen”.
Por el lado positivo de esta situación vemos el hecho que surgió con enorme fuerza Jonnu Smith y su aporte fue clave para los triunfos sobre los Rams en Los Ángeles, los Raiders de Las Vegas y los Patriots de Nueva Inglaterra, en Miami.
“Jonnu le saca el jugo a las jugadas cuando recibe el ovoide”, afirmó McDaniel. “Uno siente la fuerza con la que arremete contra sus adversarios y eso lo convierte en un tipo difícil de derribar. Y ha sabido capitalizar al máximo las oportunidades que se le han presentado”.
En efecto, con sus 1,90 metros de estatura y 112 kilos de peso, Jonnu Smith es una fuerza de la naturaleza y será una pieza clave en el último tramo de la temporada para los Dolphins.
Los surfloridanos iniciaron la campaña del 2024 con extraordinario optimismo y con la idea no solo de llegar a los playoffs sino hacerlo con un buen sembrado.
El objetivo era evitar lo ocurrido el 2023, cuando entraron con las justas a la postemporada y en su primer partido les tocó visitar a los Chiefs en la nieve de Kansas City y perdieron contra el equipo que a la larga conquistó el Super Bowl.
Ahora están más lejos aún y si no ocurre una gran reacción habrá un fin de año muy amargo.
2024
12-08 NY Jets (3-9) vs. Miami Dolphins (5-7)
12-15 Miami Dolphins (5-7) vs. Houston Texans (8-5)
12-22 San Francisco 49ers (5-7) vs. Miami Dolphins (5-7)
12-29 Miami Dolphins (5-7) vs. Cleveland Browns (3-9)
2025
01-? Miami Dolphins (5-7) vs. NY Jets (3-9)