Tal como lo esperaba la selección de Japón, Shohei Ohtani deslumbró con el bate y desde el montículo para contribuir en la victoria de los nipones 8-1 sobre China en el primer juego del Grupo B del Clásico Mundial de Béisbol.
Tal como lo esperaba la selección de Japón, Shohei Ohtani deslumbró con el bate y desde el montículo para contribuir en la victoria de los nipones 8-1 sobre China en el primer juego del Grupo B del Clásico Mundial de Béisbol.
Así como lo logró en la MLB con los Angelinos de Los Ángeles abrió en el Clásico Mundial de Béisbol en el debut y en su regreso al Tokyo Dome de Japón luego de 6 años. En el primer inning retiró a los 3 bateadores y ponchó a dos.
Aunque el abridor de China llegó descontrolado, la novena de Japón solo anotó una rayita en el primer episodio con boleto ¡, mientras las bases estaban llenas.
El espectáculo de Ohtani continuó como lanzador, al sentenciar cuatro capítulos sin anotaciones del rival y cinco ponches recetados. Con el madero respondió en el quinto tramo al mandar la bola al centro del parque con doblete remolcador de dos anotaciones.
El tercer bate de Japón terminó de 4-2 con un doblete, 2 carreras impulsadas y 2 boletos. En el sexto inning, Pei Liang conectó un largo cuadrangular para anotar la única carrera de China en el marcador.
Maki bateó un jonrón entre el jardin central y derecho en el séptimo, que sirvió sumar una en la pizarra a favor de los nipones.
Japón sumó cuatro rayitas más en el marcador durante el octavo inning, en el que Ohtani inició con hit y luego Takuya Kai dio un doblete que produjo dos carreras y decidió el encuentro a favor de los japoneses.
Los japones comenzaron la ruta del tercer título mundial con triunfo sobre China, que los coloca momentáneamente líderes del Grupo B, junto a Australia.