La guardia costera de Japón han hallado en total 13 misteriosas embarcaciones que portaban 21 cadáveres. Solo uno de ellos traía 10 cuerpos, que por su avanzado estado de descomposición se podía constatar que habían muerto meses atrás.
En los primeros días del presente mes, en las costas de la isla de Sado, apareció una pequeña embarcación con un cadáver; y solo dos días más tarde, llegó otra a las costas de Fukui, portando siete cuerpos.
Ante el grado de descomposición de todos los cadáveres, la identificación de los fallecidos resulta imposible; pero con respecto a su procedencia, se han encontrado símbolos del alfabeto coreano en los barcos. Algunos, incluso, portan en su casco letreros del Ejército Popular Coreano y pedazos de la bandera del país asiático.
A pesar de todo, para las autoridades japonesas, e incluso, los expertos en Corea del Norte toda esta situación es un gran misterio. Las interrogantes abundan: ¿Son refugiados naufragados o pescadores que sencillamente fallecieron en el mar?
Se especula, entre otras teorías, que todo esto es consecuencia de la directriz del dictador norcoreano Kim Jong-Un, que pretende impulsar la pesca para consumo de su pueblo e ingresar divisas con la exportación de pescado.
Asimismo, se cree que resulta posible el hecho de que los pescadores pertenecieran al ejército norcoreano y pretendiesen ocultarlo. Posiblemente, el ejército norcoreano para autoabastecerse de alimentos recurrió a civiles y ayudantes que perdieron la vida en el mar.
En palabras de Satoru Miyamoto, experto en Corea del Norte de la universidad de Seigakuin: «Las embarcaciones parecen de propiedad militar. La presión de Kim Jong-un para impulsar la pesca pudo haber provocado el naufragio de los barcos que no estuvieran lo suficientemente preparados».
Otra de las teorías que se maneja es que los fallecidos eran personas que se hallaban intentando salir de la nación y murieron en el intento.
En tiempos previos, los norcoreanos que intentaban salir del país salían hacia China y luego, seguían camino hasta llegar a tierras surcoreanas. Sin embargo, el recrudecimiento de los controles fronterizos ha hecho imposible la salida del país, si no es por vía marítima.
Para John Nilsson-Wright, experto en Asia del Chatham House Policy Institute: “Es probable que sean refugiados. Las condiciones de vida son muy duras en el país, sobre todo fuera de la capital Pyongyang”.
Sin embargo, el hecho de que todos los cuerpos sean de hombres y que las embarcaciones sean evidentemente pesqueras, sugiere que los hechos se vinculan con las fábricas de alimentos de Corea del Norte.
Según el profesor Lee Jong-won, de la Universidad de Waseda en Tokio: «El pescado es un importante producto para exportar a China». Y esto podría haber motivado a los pescadores a exponerse más de lo común.
En los últimos dos años se han encontrado más de 100 embarcaciones pesqueras en aguas japonesas.
