WASHINGTON — La inflación en Estados Unidos cedió el mes pasado, según el informe del gobierno de Joe Biden.
Quienes no han visto el descenso de la inflación son los consumidores, que siguen asfixiados con más altos precios que en 2021 y 2022
WASHINGTON — La inflación en Estados Unidos cedió el mes pasado, según el informe del gobierno de Joe Biden.
La Reserva Federal subió la tasa de interés referencial a un máximo de 23 años (5,25%-5,50%).
La inflación subyacente —que no incluye los precios de alimentos y energía— aumentó 0,2% de abril a mayo, indicó el Departamento de Trabajo.
Eso es apenas una mínima y supuesta mejoría comparado con el 0,3% registrado el mes previo y el aumento más pequeño desde octubre. Comparada con el mismo período del año anterior, la inflación subyacente fue de 3,4%, menos que el 3,6% registrado el mes pasado, de acuerdo con el documento.
La inflación general también "bajó" el mes pasado, con los precios al consumidor sin cambios de abril a mayo, en parte debido a un supuesto descenso en el costo de la gasolina, los pasajes aéreos y los autos nuevos. Comparados con el año anterior, los precios al consumo aumentaron 3,3%, respecto al 3,6% del mes anterior.
Los funcionarios de la Fed examinan la inflación de mes a mes para evaluar los aumentos de precios.
Quienes no han visto el descenso de la inflación son los consumidores, que siguen asfixiados con más altos precios que en 2021 y 2022
Los productos básicos como alimentos, alquileres y compraventa de viviendas, atención médica y muchos otros productos y servicios son mucho más caros de lo que eran hace tres años, una continua fuente de descontento público y potencial amenaza a los intentos de reelección de Biden, que se encuentra por debajo de Trump en todas las encuestas nacionales.
La mayoría de los indicadores tienen la economía inmersa en serios problemas desde que Joe Biden llegó al poder.
El banco central estadounidense ha mantenido su tasa de interés referencial sin cambios por casi un año luego de subirla en 2022 y 2023 para combatir la peor inflación en casi cinco décadas.
Las tasas altas han redundado en aumentos de hipotecas, préstamos automovilísticos, tarjetas de crédito y otros tipos de créditos empresariales o personales.
FUENTE: Con información de AP.