Diseñado por la firma australiana, Silver Yachts, el yate tiene un costo de 88 millones de dólares y contiene todas las comodidades que necesita un multimillonario.
Los presentes en el Salón Náutico de Mónaco 2015, quedaron fascinados con el ganador del Primer Premio, el yate Silver Fast, diseñado para quien sea capaz de pagar 88 millones de dólares por él.
El yate de lujo fabricado en aluminio, es el más veloz del mundo de su clase, con un esbozo basado en la eficiencia y respeto al ecosistema y la aplicación de la última tecnología aeronáutica para aligerar el peso del barco, explicó en un paseo por su interior Rick Morales, responsable de ventas de Burguess en Miami.
Hablamos de una embarcación creada por el armador australiano Silver Yachts, empresa responsable de una pieza de ingeniería naval elegante y de una asombrosa belleza donde cada detalle ha sido pensado a lo grande, resaltó el especialista.
Silver Fast sobresale por su capacidad de trasladarse distancias considerables sin parar para abastecerse de combustible. Recientemente recorrió en solo 21 días el trayecto desde Australia hasta Europa, unas 10.000 millas náuticas, distancia considerable para embarcaciones de su tipo.
La nave de 252 pies de eslora y 32 pies de manga, está impulsada por dos motores diésel MTU 16V 4000 M90, que le permiten alcanzar una velocidad máxima de 27 nudos, con una velocidad crucero entre 14 a 18 nudos.
Su sistema de estabilización con tecnología de avanzada, garantizan travesías de mucha seguridad para todo el personal de abordo. Tiene un calado de tan sólo 2,6 metros, lo que posibilita el acceso a lugares que otros yates de similar porte no pueden alcanzar.
En un Top 5 de los yates más caros del mundo, Silver Fast presume del segundo puesto, solo superado por Lady Lara con un valor de $226 millones.
La elegancia de la embarcación justifica su precio. Vain Interiors corrió a cargo del diseño de estilo italiano, y el empleo de materiales altamente cotizados. ‘Suites’ con acabados en madera, muebles de piel, amplias y confortables camas para el descanso de18 pasajeros e igual cantidad de miembros de la tripulación.
Además de la ‘suite’ principal, que cuenta con salón y terraza, el interior de la nave tiene tres camarotes dobles VIP, uno doble para invitados y otros tres locales dobles.
En la habitación de mayor confort se puede disfrutar de una espectacular vista de 180 grados sobre el océano. También tiene una sala para desarrollar proyectos de trabajo.
El equipamiento se completa con cine al aire libre y un jacuzzi acristalado para ocho personas. Hay espacio además para un helipuerto, una amplia zona de entretenimiento, un área con sauna incluida, gimnasio, sala de masajes para la relajación e incluso un salón de belleza.
Silver Fast tiene un comedor con capacidad para 20 invitados, y según fuentes oficiales, “el espacio está protegido por enormes paneles de vidrio retráctiles y está acompañado por un soberbio salón de estar exquisitamente decorado con sofás y mesas bajas”.
El proyecto en su interior recuerda los años 70 del siglo pasado. Acompañado de varias obras de arte, el ambiente se recrea con revestimientos de maderas pulidas, asientos voluminosos de cuero y tela, lámparas modernas.
Mercedes Benz no quiso perderse el spot promocional del Silver Fast y por ello colaboró con la exposición del lujoso auto modelo S Class Cabriolet sobre el helipuerto del yate.
Gracias a sus excelentes características técnicas, su modo deportivo y su carácter moderno de exquisitas líneas, el Silver Fast reunió todas las condiciones para ser un éxito en la cita Yacht Miami Beach, donde se expuso la más reciente tecnología náutica en los Estados Unidos.
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