REDACCIÓN
Los vehículos inteligentes ofrecen más entretenimiento a bordo
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Apenas comienza el año y ya los nuevos adelantos tecnológicos nos sorprenden en las diversas ramas de la economía mundial.
Lo más reciente del mundo automovilístico llega de la unión entre la reconocida compañía Volvo Cars y la empresa sueca de telecomunicaciones Ericsson.
Ambas lograron desarrollar una transmisión (streaming) de video de ancho de banda alto en los autos que se conducen solos, comentó The Verge.
Dicha novedad permitirá al conductor y a los pasajeros del vehículo ver el contenido de video en alta definición, incluso en lugares donde es escasa la conectividad de banda ancha móvil.
Según una nota oficial publicada por los responsables del proyecto, cuando se pronostica la ruta y se analiza con anticipación las condiciones de la red, el contenido puede ser ajustado a la duración de cada viaje y guardado de forma inteligente para brindar una experiencia de visión de alta calidad y sin interrupciones.
Volvo precisó además que el sistema está diseñado para pronosticar hasta qué punto el chofer debe manejar durante su viaje. Igualmente, ajustará sus sugerencias de contenido de manera exacta.
Esta buena nueva relacionada con la conducción autónoma, sin dudas, brindará a los usuarios la libertad de elegir cómo desean viajar y qué contenido visual quieren disfrutar a través del trayecto.
Ahora, usted puede transitar cientos de kilómetros sentado cómodamente frente a su volante mientras ve un capítulo de su serie de TV favorita, o si el tiempo del viaje se lo permite, quizás reproduzca su película preferida.
La compañía Volvo Cars fue comprada hace ya seis años por su par china Geely al fabricante estadounidense Ford. Durante todo el 2014 reportó una ganancia neta operativa de 270, 53 millones de dólares.
VOLVO S90 2016: Más allá de la transmisión en streaming
Esta empresa fabricante de autos no deja de impresionar a sus clientes y presentó hace varias semanas el Volvo S90 2016. Con ello llegó otra novedad importante para la marca sueca: el sistema Powerpulse.
La tecnología está basada en los motores turbodiesel D5 y permite reducir al mínimo el lag del turbocompresor mediante aire comprimido de forma sencilla sin tener que recurrir a otras métodos más complejos como son los turbos eléctricos.
Al interior del Powerpulse
En este caso, el motor emplea un sistema de sobrealimentación con dos turbocompresores en serie, uno de geometría fija, para cargas altas y otro con geometría variable, para bajas y medias cargas.
Así, se reduce de forma considerable el tiempo de respuesta de la sobrealimentación. Para lograr su objetivo, Volvo ha introducido un compresor de aire convencional que toma aire de la admisión, lo comprime y después lo almacena en un pequeño tanque, el cual guarda una reserva de aire comprimido de forma ininterrumpida.
La famosa marca automovilística continúa afianzándose en el mercado internacional satisfaciendo las más disímiles demandas de sus clientes. La calidad y seguridad de sus propuestas están avaladas por la experiencia en este sector.
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