LOS ÁNGELES. - Los derechos de los inmigrantes se han convertido en la excusa perfecta para que un grupo de "agitadores profesionales" protagonicen protestas violentas en la ciudad de Los Ángeles, con las que intentan generar una "insurrección" que se replique en otras ciudades de Estados Unidos y así desestabilizar la administración de Donald Trump.
Presuntamente, redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) en el Distrito de la Moda de Los Ángeles, una de las ciudades santuarios del país, que culminó con el arresto de más de 100 extranjeros el 6 de junio, desencadenaron protestas que se mantenían este 9 de junio, e intentaban reproducirse en la ciudad de San Francisco.
Bajo el argumento de defender los derechos de los inmigrantes y de pedir el fin de las deportaciones masivas, eje central de la política de inmigración con la que el presidente republicano busca poner fin a la crisis migratoria sin precedentes creada por su antecesor, el demócrata Joe Biden, un grupo de personas ha recurrido al vandalismo en la ciudad, con ataques a instituciones federales, saqueos de comercios e incendios de vehículos y también de banderas de EEUU.
En medio de los manifestantes que se enfrentaron a los agentes del ICE y de los cuerpos de seguridad y del orden, se pudieron observar sujetos encapuchados que ondeaban banderas ajenas a EEUU, como la de Palestina y la de la extinta Unión Soviética (URSS), que exhibe la hoz y el martillo, símbolo del comunismo internacional.
De acuerdo con analistas consultados por DIARIO LAS AMÉRICAS, la presencia de estas banderas es evidencia de que el islamismo y la izquierda radical están detrás de los disturbios que se viven Los Ángeles, con "otros motivos" que van más allá de defender a los inmigrantes indocumentados, que hoy son objeto de deportación.
"Insurrección"
"No cabe duda de que los manifestantes han salido a la calle con el pretexto de defender a los 'ilegales deportados', indocumentados, como les gusta llamarlos, en contra de las acciones legales de ICE. Los que están detrás de estas manifestaciones tienen otros motivos. Estas multitudes asaltando a los oficiales federales, vandalizando las calles, quemando carros y pintando las paredes de la ciudad con insignias antigubernamentales, esto se llama insurrección", sostiene Joseph Hage, analista político en temas de Medio Oriente y antiterrorismo, en conversación con DIARIO LAS AMÉRICAS.
Para Hage, estas banderas ajenas a EEUU dan un indicio de "en dónde está la lealtad de esta gente" que hoy protesta en las calles de Los Ángeles. "La presencia de la bandera Palestina es uno de los indicadores de que las manifestaciones tienen más propósitos que lo declarado, de defender a 'los derechos de los inmigrantes'. La presencia de la bandera de la extinta Unión Soviética nos indica la participación de comunistas, todavía con una esperanza de levantar a un muerto (comunismo) después de décadas", subraya.
Esto, asegura, es una muestra de la alianza que existe entre el islam político radical y la extrema izquierda mundial para "enfrentar a Occidente, a Estados Unidos, en particular, y lo que representa para el mundo libre".
"Estamos enfrentando una lucha entre el radicalismo 'de la izquierda y del islamismo' en contra de todos los derechos que pueda brindar una sociedad libre, democrática, con orden público", asevera.
Injerencia extranjera
Para el analista político y experto en negociaciones y resolución de conflictos, Juan Antonio Blanco, las manifestaciones violentas de Los Ángeles siguen "técnicas" de lo que se conoce como "guerra simétrica híbrida", en la que se utiliza a un "pequeñísimo grupo de agitadores profesionales" para provocar incidentes que conduzcan a un "escalamiento del conflicto" que requiera que sea respondido mediante la fuerza policial.
"Están buscando imágenes para CNN, para BBC Londres; están buscando imágenes para usarlas políticamente. Y hay fuerzas políticas de este país que están involucradas en eso", advierte en conversación con DIARIO LAS AMÉRICAS.
Destaca, por ejemplo, que la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, tiene una "larga" vinculación con Cuba, desde su juventud, cuando era coordinadora de la Brigada Venceremos para California, fundada en 1969, donde seleccionaba a los simpatizantes que "más confianza ideológica tenían" para que fueran "entrenados en técnicas terroristas".
En este sentido, no descarta que detrás de las manifestaciones haya "injerencia extranjera" debido a las conexiones que existen con grupos terroristas. "Hasta que aquí no se haga una investigación a fondo es excesivamente ingenuo pensar que toda la gente que va a protestar, protesta simplemente porque son buenos ciudadanos que expresan su opinión en la plaza pública. Sí, hay muchos que lo son, pero hay otros que se van a mezclar en esa multitud para provocar incidentes y arrastrar a los buenos ciudadanos a acciones que están prohibidas por la ley", asevera.
Una estrategia continuada
Para Blanco, esto forma parte de una "estrategia" que aplicó el movimiento Black Lives Matter (BLM) en el año 2020, tras la muerte del afroamericano George Floyd a manos de un policía en Minneapolis, Minnesota.
"Utilizaron incidentes aislados en distintas ciudades y terminaron incendiando una estación de policía en Seattle con todo el personal adentro (...) Más de 20 ciudades del país en llamas. ¿Eso quién lo fabricó? ¿Los que estaban en contra de la discriminación racial? No, aquí en contra de discriminación racial hay mucha gente de los dos partidos. Lo fabricaron un grupito de provocadores entrenados para eso", apunta.
Para Joseph Hage estas manifestaciones, además, pueden ser una extensión de las protestas estudiantiles antisemitas que se registraron en alrededor de 60 universidades del país en el segundo trimestre de 2024.
"Izar la bandera de Palestina es una extensión de las manifestaciones que se hicieron virales en las universidades, cuando izaban además las banderas de Hamás y Hezbolá. Desde que empezaron las deportaciones de esta gente que apoyaba organizaciones terroristas, los manifestantes están tomando en cuenta las consecuencias de izar tales banderas y se han limitado a la bandera palestina", señala, al destacar que ahora queman la bandera de EEUU para mostrar su "desprecio hacia EEUU y, en particular, hacia la administración Trump".