MONTANA.- AP
MONTANA.- El sistema de recolección de datos sobre la mortalidad infantil es tan defectuoso que nadie puede conocer con exactitud cuántos niños mueren de abuso o negligencia cada año en los Estados Unidos
MONTANA.- AP
Al menos 786 niños murieron de abuso o negligencia en los EEUU en un período de seis años a la vista de las autoridades de protección infantil, muchos de ellos fueron golpeados y han muerto de hambre, reveló un estudio de la agencia Associated Press.
La mayoría de estos niños cuyos casos fueron compilados por la AP eran menores de cuatro años. Ellos perdieron la vida aun cuando las autoridades estaban investigando a su familia o al prestar algún tipo de servicio de protección por abandono, violencia u otros problemas en la casa.
Los casos
Mattisyn Blaz, de dos meses de edad, de Montana, murió cuando su padre la arrojó como si fuera "una pelota de fútbol", dio a conocer un fiscal.
El caso de Mateo Blaz fue bien conocido por el personal de servicios del niño y de la policía. Dos semanas después del nacimiento de Mattisyn llegó a su casa borracho, agarró a su mujer por el pelo y la tiró al suelo de la cocina mientras ella se aferraba a la recién nacida.
Jennifer Blaz, le dijo a un trabajador de servicios de protección infantil que la visitó el día después del ataque de su marido, lo que pasó, este habló brevemente con ella y se fue. Su marido se declaró culpable de asalto y fue ordenado por un juez a tomar clases de manejo de la ira y que se mantuviera alejado de su esposa.
Luego ella, contó que hubo un nuevo contacto con el oficial de servicios infantiles de Montana seis semanas después, cuando la tragedia había ocurrido y era el día del funeral de Mattisyn.
Solo semanas
El sistema también fracasó en el caso de Ethan Henderson, que sólo tenía 10 semanas de edad. Ya el pequeño había sido tratado por una fractura en el brazo, pero no sobrevivió cuando su padre le arrojó en un sillón reclinable con tanta fuerza que causó una lesión cerebral fatal.
Trabajadores de emergencia ya habían recibido al menos 13 llamadas de advertencia de que Ethan y sus hermanos sufrían abuso, incluso en los reportes se encontraban las afirmaciones de que una hermana mayor estaba llena de moretones, y que posiblemente era abusada sexualmente, además se había quemado por una estufa porque estaba sola.
El propio Ethan había llegado a la guardería con profundas contusiones en su brazo. Aún así, el trabajador social que inspeccionó remolque seis días antes de la muerte de Ethan, escribió que el bebé se veía "bien cuidado y seguro".
No hay estadísticas oficiales
La AP revisó informes oficiales, algunos estaban incompletos, fueron registros de mortalidad infantil y documentos de la policía de los años 2008 hasta el 2013.
Algunos estados no proporcionaron datos de estos años, y la información está incompleta. La falta de estos datos hace difícil medir el grado de responsabilidad de los oficiales que tienen a su cargo supervisar la seguridad de los niños en sus hogares cuando se encuentran en una situación de peligro y más cuando el resultado es la muerte.
El sistema de recolección de datos sobre la mortalidad infantil es tan defectuoso, dijo AP, que nadie puede conocer con exactitud cuántos niños mueren de abuso o negligencia cada año. El gobierno federal estima que el promedio gira alrededor de 1.650 muertes al año en los últimos años, muchos creen que el número real se duplica.
Incluso no hay información pública sobre el número de niños que mueren, mientras que su caso se encuentra en desarrollo o mientras recibe ayuda de los organismos que existen para mantenerlos a salvo.
Cuando se preguntó por qué tantos niños con casos abiertos han muerto a manos de sus cuidadores, una portavoz del Departamento de Salud y Servicios Humanos, que supervisa los principales programas de prevención del abuso infantil de la nación, dijo que la agencia no tenía una respuesta inmediata.