El movimiento pro-matrimonio homosexual de Estados Unidos ha conseguido este viernes una gran victoria después de que el máximo tribunal federal votara a favor de las bodas entre personas del mismo sexo, una medida que afecta a todos los estados del país.
La decisión fue resultado de una elección reñida, de 5 votos a 4, donde el juez Anthony Kennedy fue clave para inclinar la balanza hacia el lado de los gays, así como lo hizo en la sentencia que hace dos años declaró inconstitucional la ley que desde 1996 definía el matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer, conocida como DOMA.
En un claro indicio de esa tendencia, el lunes pasado, la Corte Suprema había decidido no suspender temporalmente la orden de un juez federal que invalidaba el impedimento de matrimonio homosexual en Alabama. Esto no sólo legalizaba de hecho esas bodas en dicho estado, sino que además dejaba entrever que antes de culminar su período a fin de mes, la mayoría de sus jueces fallaría a favor del matrimonio gay en todo el territorio nacional.
Según los procedimientos, cuando existe una sentencia federal la Corte Suprema la analiza para manifestar su opinión sobre el tema, confirmándola o denegándola, instancia que en el caso mencionado no ocurrió. Por eso los analistas y expertos judiciales consideran que el máximo tribunal parece haber llegado a un acuerdo mayoritario sobre la aprobación del matrimonio homosexual. Otro indicio de la inminente decisión del Tribunal fue consignado por la prensa norteamericana, que reveló que los jueces Clarence Thomas y Antonin Scalia, opositores al matrimonio gay, estaban preocupados por el fallo.
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Más de la mitad del país -36 estados, el Distrito de Columbia y Guam- legalizaron el matrimonio del mismo sexo desde que Massachusetts allanara el camino en 2004.
Al conocerse la noticia, el presidente Barack Obama elogió inmediatamente la decisión de la Justicia, que significa otra guerra ganada para la Casa Blanca. "Hoy es un gran paso en nuestra marcha hacia la igualdad". Las parejas de homosexuales "ahora tienen el derecho de casarse, como cualquier otra", escribió Obama en su cuenta de Twitter.
Más tarde, el Presidente habló en conferencia de prensa desde su residencia. "Esto es una victoria no sólo para los gays y lesbianas sino también para miles y miles de familias y niños... una victoria para todo Estados Unidos", aseguró.
Con gestos de emoción, el mandatario destacó la labor de aquellos que se mantuvieron "incansables en la lucha para defender sus derechos", tanto desde los movimientos prohomosexuales como desde la política, e incluso en todos los ámbitos. "Esto es una victoria para los padres que han luchado para que sus hijos no fueran víctimas de bulling" y que han demostrado que más allá de todo, el amor es lo más importante, y puede derribar las desigualdades sociales y raciales. "El amor es el amor", destacó. "Hicimos [con este cambio] que nuestra unión sea un poco más perfecta", finalizó.
Mientras tanto, miles de personas se congregaron frente a la Corte Suprema en el distrito federal y saliendo a las calles en todas las ciudades del país para festejar este gran cambio a favor de la comunidad homosexual de la nación.
"Llevamos décadas de lucha para que este sueño se hiciera realidad y lo conseguimos. Hoy es un gran día para todo el país", dijo un joven a la cadena de televisión CNN, mientras mostraba una bandera con los colores de la comunidad gay en Washington.
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