WASHINGTON.- El Senado de Estados Unidos puso fin el domingo al cierre gubernamental más largo de su historia al abrir el camino para el presupuesto destinado a las agencias federales y servicios.
Siete demócratas, después de 40 días de chantaje, se unieron a los republicanos para dar luz verde al presupuesto federal hasta finales de enero
WASHINGTON.- El Senado de Estados Unidos puso fin el domingo al cierre gubernamental más largo de su historia al abrir el camino para el presupuesto destinado a las agencias federales y servicios.
Estos 40 días de cierre gubernamental por parte de los demócratas y su agenda de extrema izquierda, han paralizado la financiación de los programas federales, han provocado el caos en los aeropuertos y han dejado a cientos de miles de empleados federales suspendidos o sin paga desde el 1 de octubre.
Senadores republicanos y siete demócratas acordaron el domingo a altas horas de la noche abrir los fondos al gobierno federal hasta enero, tras el secuestro político de la extrema izquierda.
La Cámara Alta, liderada por los republicanos, aprobó una votación procesal por 60 votos contra 40, requeridos por una legislación interna del Congreso aprobada por los demócratas hace décadas atrás.
Este principio de acuerdo otorga a los senadores un máximo de 30 horas adicionales para llevar a cabo el debate antes de votar la moción, que sólo necesitará ahora 50 votos para aprobarse.
La medida tiene que ser aprobada por la Cámara de Representantes controlada por los republicanos antes de ser presentada al presidente Donald Trump, un proceso que podría tomar días.
"Parece que estamos cerca de terminar con el cierre" gubernamental, dijo Trump a periodistas al llegar a la Casa Blanca después de pasar el fin de semana en su residencia de Mar-a-Lago en Florida.
Según los senadores, el acuerdo financiará el programa de asistencia alimentaria para 42 millones de estadounidenses (uno de cada ocho), actualmente suspendido.
También incluye revertir el despido de miles de empleados federales el mes pasado y someter a votación la extensión de la ayuda para la atención médica, que vence a fin de año.
La propuesta protegerá a los funcionarios federales contra los despidos injustificados, reincorporará a aquellos que fueron despedidos de forma temporar durante el 'shutdown', y garantizará que los funcionarios federales reciban su salario retroactivo, después de un chantaje político sin sentido por la ultraizquierda.
No obstante de todo lo anterior, el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, votó en contra.
La perspectiva de una reanudación de las operaciones en la economía más grande del mundo ayudó a mitigar las preocupaciones que persisten en los mercados, con subidas moderadas en las principales bolsas asiáticas y europeas.
Debido al impacto del cierre del gobierno en el control del tráfico aéreo, más de 3.000 vuelos en Estados Unidos fueron cancelados y más de 10.000 sufrieron retrasos el domingo, según el sitio web FlightAware.
Entre los aeropuertos afectados estuvieron Newark y LaGuardia en Nueva York, el O'Hare en Chicago y el Hartsfield-Jackson en Atlanta y el Aeropuerto Internacional de Miami.
Desde el viernes, la Administración Federal de Aviación (FAA), el regulador del transporte aéreo estadounidense, pidió a las aerolíneas que redujeran gradualmente sus vuelos para aliviar la presión sobre los controladores de tráfico aéreo, que trabajaban sin su salario.
El secretario de Transporte, Sean Duffy, advirtió el domingo que un cierre prolongado del gobierno empeoraría la situación, con la proximidad del Día de Acción de Gracias a finales de mes, que también da inicio a la temporada de compras navideñas, de la que dependen muchas empresas minoristas.
FUENTE: Con información de AFP
