miércoles 19  de  febrero 2025
parálisis del Gobierno

Siete días de cierre: 2.100 millones de coste

Una semana después de la parálisis del Gobierno, tanto demócratas como republicanos permanecen inmóviles en sus posiciones mientras el país se desangra

Siete días de cierre y todo sigue igual. Excepto que los millones que esta situación le cuesta a los estadounidenses no dejan de aumentar. Ayer la Oficina de Presupuesto de la Casa Blanca anunció que esta semana de parálisis ya ha supuesto un monto de unos 2.100 millones de dólares, una media nada desdeñable de unos 300 millones al día.
n
El dato, basado en una estimación sobre el cierre del Gobierno de hace 17 años, podría ser incluso irrisorio si finalmente el país se despeña por el precipicio de la suspensión de pagos.
n
Numerosos economistas ya han advertido que si no se pone freno a esta lucha partidista y se llega a la fecha límite del 17 de octubre sin un acuerdo, el mundo se podría ver abocado a una crisis económica de igual envergadura o mayor que la de 2008, que creó la mayor recesión en EEUU desde la Gran Depresión de los años treinta.
n
Acusaciones mutuas n
u200b
u00bfY en Washington? Pocos cambios. Alguien que haya seguido la actualidad regularmente, tendrá la sensación de perder su tiempo por continuar leyendo cada día las mismas informaciones. Así, el líder republicano de la Cámara de Representante, John Boehner, volvió a sostener que no se aprobará ninguna media para incrementar el nivel de endeudamiento del Gobierno. Bueno, puso una posibilidad: que el presidente Obama ceda en su ley de salud.

nPoco después llegó la respuesta por boca del Presidente:"No vamos a negociar bajo la amenaza de causar un daño mayor para nuestra economía y las familias de clase media. No vamos a negociar bajo la amenaza de una paralización prolongada hasta que los republicanos obtengan el 100% de lo que desean".
n
Así, pues, ninguna novedad, si no fuera porque el discurso político en la capital comienza ya a desplazarse desde las consecuencias que ha provocado el cierre a la catástrofe que supondrá efectivamente no alcanzar un acuerdo presupuestario antes del 17 de este mes. Pero el discurso inmovilista se mantiene:"No vamos a negociar bajo la amenaza de una catástrofe económica que economistas y ejecutivos advierten que puede ocurrir si el Congreso opta por la suspensión", volvió a repetir Obama.
n
En todo caso, se mostró desafiante, como en los últimos discursos, y retó al Congreso a que vote el proyecto de ley para una financiación temporal sin ninguna condición:"Que la propuesta llegue al pleno y veamos qué pasa. Que voten, que cada miembro del Congreso vote según su conciencia y después podrán decidir si quieren o no mantener el Gobierno cerrado". n

Responsabilidades repartidas n
Si el viernes un alto funcionario decía que no les importaba esta situación ya que la Casa Blanca"iba ganando", ahora puede que tenga que arrepentirse por sus palabras.

Según una encuesta de la CNN divulgada ayer, los estadounidenses no tienen tan claro quién es el mayor responsable de esta parálisis: el 63% está descontento con el papel de los conservadores, mientras que los demócratas no se escapan de este chaparrón, al ser señalados por el 53% de los ciudadanos.

Así las cosas, todo sigue igual, excepto el reloj que no deja de correr.

¡Recibe las últimas noticias en tus propias manos!

Descarga LA APP

Deja tu comentario

Te puede interesar