MIAMI.- Ambar Pacheco, la oficial de la Policía de North Miami Beach despedida este viernes, acusada de patear el vientre de una embarazada y provocarle un parto de emergencia, necesitaba ayuda con sus hablidades laborales, de acuerdo con una resivión a su expediente publicada por el canal de noticias CBS4.
En un comunicado difundido este viernes, el jefe de la Policía de North Miami Beach, William Hernández, dio a conocer que "debido a las recientes acciones fuera de servicio de la señora Ambar Pacheco, su empleo en la ciudad de North Miami Beach se ha cancelado con efecto inmediato".
Pacheco, de 26 años y quien enfrenta cargos de agresión agravada de una víctima embarazada, podría recibir una pena máxima de 15 años en prisión, 15 años de libertad condicional y una multa de 10,000 dólares.
Una mirada a sus documentos laborales realizada por CBS4 tras el despido reveló que Pacheco, tras ser contratada en septiembre de 2017, vio prolongado su período de prueba porque necesitaba mejorar para llegar a tiempo al trabajo, conocer los procedimientos policiales, mejorar la conciencia situacional y las habilidades de seguridad de los oficiales.
Además, había recibido una advertencia laboral tras un accidente de tránsito mientras trabajaba que causó daños a la propiedad. Dos accidentes anteriores enun período laboral de diez meses, aparecen como que no podrían haber sido prevenidos.
El canal de noticias buscó declaraciones de la expolicía, pero ni Pacheco ni los miembros de su familia han querido hacer comentarios después del incidente y una visita a la casa de la familia encontró una nota en la puerta en la que se que pedía respeto a su privacidad.
puerta-casa-oficial-pacheco-screenshot.jpg
La familia de la oficial Ambar Pacheco, despedida tras patear en el vientre a una mujer embarazada, ha pedido respeto a su privacidad.
CAPTURA DE VIDEO / CBS4
La víctima de la agresión de Pacheco, Evoni Murray, tenía ocho meses de embarazo y dio a luz la noche del miércoles pasado a un "bebé saludable" tras ser ingresada de emergencia en el Hospital Mount Sinaí, de Miami Beach.
En declaraciones al canal de noticias lamentó que "las personas que se supone deben proteger y servir nos están perjudicando, pero sé que no son todas. Una manzana no arruina el grupo. Es bastante abrumador que el incidente haya tenido lugar. Sabes que lo perdonamos pero no lo olvidamos".
Dijo además que veía necesaria la reprimenda contra la ahora expolicía porque "no importa quién sea usted o qué ocupación tenga. Pelear y poner su mano sobre alguien más no debe permitirse".
Pacheco estaba fuera de servicio durante el incidente y está acusada de darle una patada en el vientre a la embarazada tras un altercado con el novio de la víctima, algo que ella ha declarado fue una respuesta patadas después de que el hermano de la víctima golpeara su hermana en la cara.
La expolicía, detenida la noche del miércoles en Miami Beach y liberada al día siguiente bajo fianza, reconoció que había dado una patada, pero dijo no saber a quién se la había dado.
Sus documentos laborales evidencian que era una policía novata que debía mejorar en temas de seguridad, conocimiento de procedimientos y políticas de la Policía.
FUENTE: EFE / CBS4