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MIAMI.- Después de la tempestad, no siempre viene la calma. Así lo están experimentando amplios sectores del condado Miami-Dade y el sur de la Florida, donde tras el paso del huracán Irma todavía el miércoles no había sido restablecido el servicio de fluido eléctrico.
El hecho impacta de manera severa, especialmente a las personas de la tercera edad.
Debido al intenso calor que se deriva de la ausencia de energía eléctrica en viviendas y negocios ya se registraron ocho víctimas en un centro de rehabilitación de la ciudad de Hollywood, en el condado Broward, pero en su vecino Miami-Dade, algunos lugares también están expuestos a que se presenten situaciones similares.
Robert King High Towers es un complejo de edificios situado en el sector de La Pequeña Habana, en la ciudad de Miami, en donde conviven más de 1.000 personas de avanzada edad que reciben beneficios del Gobierno. DIARIO LAS AMÉRICAS visitó el lugar y encontramos a muchos residentes literalmente “muriéndose” de calor.
“Esto es casi un hospital”
Una de las personas que habita en el complejo conformado por tres edificios es Ángel González, un septuagenario de origen cubano que agradece “a Dios y a los santos” que el ciclón no haya pasado por todo el centro del Gran Miami. Sin embargo, se quejó por la falta de “luz”.
“Esto aquí parece un hospital; hay gente con la presión alta; gente que no se puede levantar de sus camas, y este calor nos está matando a todos. Yo me vine para acá [estaba sentado en una banca bajo la sombra] a coger un poco de aire porque me sentía ahogando”, señaló visiblemente molesto.
Acorde con su testimonio, el alcalde de Miami, Tomás Regalado, y su hijo, Tomás N. Regalado, aspirante a la Comisión local, estuvieron el martes pasado llevándoles agua y hielo, mientras que otras personas y entidades –aseguró– les han proporcionado algunos alimentos calientes.
Dijo, además, que en esas torres del Condado Miami-Dade están padeciendo los rigores de la carencia de fluido eléctrico desde el sábado pasado cuando empezaron a arreciar los vientos que trajo consigo el huracán Irma.
Y agregó: “Desde ese día he tenido que salir a todos lados a conseguirle comida a una viejita vecina mía, que no puede pararse de su cama, y que está ahí con un calor de madre. Amigo, esto es algo inhumano lo que están haciendo con nosotros”.
“Calor y comida no adecuada”
Para Ana Rubio, otra de las residentes del lugar, el mayor inconveniente que están viviendo ella y sus vecinos es la falta de energía, pero también el tipo de comida que les están suministrando a algunas personas que padecen enfermedades crónicas.
Señaló que aunque no es doctora o una experta en el tema, “aquí les están dando comida alta en sal a algunos de mis vecinos, y eso puede ser muy perjudicial para ellos en estos momentos con el calor que nos ha tocado aguantar aquí”.
La mujer, quien reconoce que en el conjunto de edificios hay personas mayores que ella [tiene alrededor de 65 años de edad] y con problemas de salud más complejos, indicó que a raíz del calor lleva varios días sin dormir bien y presenta un cuadro de “alteración de los nervios”.
“La luz viene el domingo”
Manuel Céspedes, otro de los vecinos del complejo de apartamentos, dijo que se ha puesto en la tarea de averiguar con la FPL, “llamándolos cada cinco minutos”, cuándo les será restablecido el servicio y, según manifestó, “me dicen que la luz la ponen otra vez el domingo”.
Este hombre, también procedente de Cuba, como la gran mayoría de quienes residen en ese lugar, asegura que se ha visto obligado a bañarse hasta cuatro veces al día y a mantenerse fuera de su apartamento “porque ahí me siento asfixiado”.
“Aquí todo el mundo está enfermo de algo, de la presión, de diabetes, y no queda más remedio que bajar a coger fresco. Casi no hemos podido dormir desde que pasó el ciclón y nos estamos bañando con agua fría”, aseveró.
“Aquí hay minusválidos”
Verena Aladro, a quien hallamos tratando de hablar con los administradores del complejo de edificios para indagar sobre la fecha en que será restablecida la electricidad, mostró mayor preocupación por un área en la que viven varios minusválidos de los que, dijo, “no he vuelto a saber desde el sábado anterior”.
“No entiendo cómo ya gran parte de Miami tiene luz y nosotros no. Yo sé que hemos pasado un ciclón, pero ya son cinco días sin luz y eso no lo aguanta nadie. Aquí estamos corriendo mucho peligro”, advirtió.
Seis muertos en Hollywood
El temor de los residentes del Robert King High Towers escaló al conocer el hecho ocurrido en un centro de rehabilitación de Hollywood, en el que murieron cinco ancianos a raíz de las altas temperaturas que tuvieron que soportar como consecuencia del corte de energía derivado del huracán.
La Policía municipal reportó que tres de las muertes ocurrieron en el inmueble y las otras en el hospital donde fueron atendidos, luego que todas las personas fueran evacuadas como medida para prevenir nuevos fallecimientos.
La alcaldesa condal de Broward, Barbara Sharief, confirmó la muerte las muertes, y según trascendió, el centro de rehabilitación no contaba con fluido eléctrico desde el sábado cuando el huracán Irma azotó el sur de la Florida y dejó sin electricidad a más de 10 millones de personas en la Florida.