Las oraciones de muchos feligreses congregados en la Iglesia de la Ermita de la Caridad despidieron a la imagen de la santa patrona de Cuba en una procesión por toda la Bahía de Biscayne. n
Este recorrido marítimo fue encabezado por una lancha de apoyo de la Policía de Miami, junto a otros 10 botes, cuyos tripulantes compartieron bendiciones entre sus rezos. n
El padre Juan Rumín, rector del santuario de la Ermita, elevó las plegarias junto a los creyentes en la misa recordando que u201cen Estados Unidos vivimos en libertad y podemos profesar nuestra religión sin temor de ser crucificados u201d. n
Banderas de países latinoamericanos rodearon a la Virgen mientras descendía del altar hacia el bote en el malecón, donde iniciaría la procesión marítima.Cada bandera era llevada por un inmigrante procedente de esa nación. n
La señora Yadira Gamboa es la madre de Maler Arteta, el joven que alzaba el tricolor de Venezuela. Ella y su familia emigraron de su tierra natal desde hace diez años y lamenta como el Gobierno actual u201cestá acabando con el país u201d. n
u201cDesde acá queremos ser el otro brazo de esos hermanos venezolanos que aún no han podido salir de allá u201d afirmó. n
La primera parada de la procesión se efectuó en el Hospital Mercy, allí el presbítero Rumín pidió orar por la sanación de todos los enfermos en Miami. Cada estación contaba con la oración a la Virgen y siempre exaltando la libertad de Cuba y loas a la libertad alcanzada en Norteamérica. n
Uno de los capitanes participantes en la actividad fue Ernesto Estevan, quien junto a su esposa y tres hijos acompañaron el recorrido de bendiciones por el mar.
u201cQuiero mantener en casa las creencias de mis raíces, las que me dejó mi padre [ u2026] ojalá mis hijos puedan llegar a conocer Cuba pero en libertad u201d anheló este padre de familia. n
Estevan recuerda que la tradición cuenta con aproximadamente 20 años de historia. El año pasado fue la primera vez que acompañó a la Virgen en un recorrido más corto, u201cy lo seguiré haciendo u201d. n
Otro momento significativo para los presentes fue el minuto de silencio en medio de la bahía con el propósito de honrar la memoria de quienes han fallecido en balsas a la deriva, luego de intentar liberarse de la opresión. n
El City Hall de la Ciudad de Miami fue otro lugar donde la santa patrona elevó los ánimos de los transeúntes. Incluso, el alcalde Tomás Regalado aprovechó para saludar a la procesión junto a su familia. n
Luego de bendecir los espacios abandonados del Marine Stadium, lugar que sirvió en el pasado para las celebraciones de la Virgen, el recorrido llegó hasta Bayside. Esta última parada contó con mención especial de la Torre de la Libertdad, emblema significativo de los inmigrantes en el sur de Florida.