Si para muchos, los jóvenes latinos irreductiblemente son terreno fértil para que la semilla demócrata germine, la tendencia en las últimas elecciones muestran una arista contraria. Miami-Dade eligió a dos republicanos para ocupar escaños en el Congreso federal en las figuras de Carlos Giménez (distrito 26) y María Elvira Salazar( distrito 27) y, aunque Biden ganó, la brecha de la victoria del candidato demócrata sobre el republicano, se recortó del 30 al 7% respecto a los comicios presidenciales de 2016. Previo a los comicios, el senador estatal Manny Díaz planteó que “reducir el margen de diferencia en Miami-Dade sería una “enorme victoria” y fue precisamente lo que sucedió.
“En nuestra labor en el condado Miami-Dade vimos muchos jovenes apoyando nuestros ideales, vimos generaciones nuevas que entienden el peligro de pólizas que pueden terminar siendo socialistas y sobre todo esas que pólizas que afectan nuestra economía. Nuestro pueblo hispano: cubanos, venezolanos, nicaraguenses…,todos vienen a este país buscando oportunidades y la habilidad de poder prosperar y yo creo que ven esos presupuestos demócratas como un trillo a cosas que no funcionan, que eliminan la oportunidad en sí y cierran las puertas. Como Partido Republicano tuvimos la oportunidad de llevar ese mensaje al pueblo y el pueblo respondió a ese mensaje”.
Díaz está convencido del papel de los jóvenes latinos en este nuevo escenario condal y que, para muchos, es un reflejo del estado que le otorgó la victoria a Donald Trump. Para el senador, el trabajo de las autoridades en medio de la crisis le ha otorgado fortaleza a los presupuestos republicanos y hace una valoración de los retos que se avecinan en el 2021 en aras de la vuelta a la normalidad.
“Los latinos son un grupo que sigue creciendo en el estado de la Florida. La pandemia del COVID-19 ha afectado fuertemente a la economía y la clase trabajadora. En la comunidad hispana, muchos perdieron sus trabajos, su sustento. Nuestra labor no es solamente proteger la salud sino para mantener nuestro estado, nuestras ciudades y nuestra comunidad, abiertas para que esas personas puedan llevar comida a la mesa”.
En cuanto a la pandemia dijo: “El resultado ha sido muchas personas perdiendo su empleo y perdiendo la habilidad de poder sustentar a su familia. El sur de la florida en específico es una zona grandemente afectada pues son ciudades con muchos negocios pequeños”
“Necesitamos oportunidad y libertad. Poder seguir hacia adelante con ley y orden, sin perder nuestros principios y nuestros valores”, agregó el senador estatal.
Es necesario subrayar que los cierres, las medidas restrictivas derivadas de la situación del COVID-19, dejaron a millones de floridanos sin empleo y solicitando beneficios. El estado supera los 870.000 casos y se acerca a las 17.500 muertes por coronavirus.
“Los retos mas grandes son poder mantener la economía abierta, hacerla crecer, volver al lugar donde estabamos a 2.8 de desempleo antes de la pandemia y al mismo tiempo mantener la seguridad y la salud del estado. O sea, hacer lo mejor possible para enfrentar al virus pero sin descuidar el factor económico”.
DIARIO LAS AMÉRICAS le preguntó a Díaz sobre la preocupación ciudadana cuando se acaben las ayudas federales y los planes de protección para aquellos que deben meses de renta o participan en algún plan de tolerancia por parte de los bancos y que temen la pérdida de propiedades, quiebra o desalojo.
“Vamos a ir a Tallahassee a luchar por esas personas, a buscar maneras de protegerlas. La primera opción es trabajar con el Congreso Federal y valorar todas las opciones o programas para brindarles cobija pero todo depende, en gran medida, de una economía abierta. La mejor solución es regresar a las personas a sus empleos, a sus negocios. La segunda opcion es tratar de construIr un puente entre como estamos ahora y el punto final al que queremos llegar y será en conjunto con los congresistas federales buscando las vías para crear esa habilidad de cruzar el puente sin afectar el camino. Tenemos que llevar el desempleo por debajo de tres”.