MIAMI.- RUI FERREIRA
Especial
Los alcaldes Carlos Giménez y Tomás Regalado aseguran que acatarán la opinión del pueblo, no sin antes prometer que la construcción no será financiada con fondos públicos
MIAMI.- RUI FERREIRA
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La última palabra sobre la construcción del estadio de fútbol en Miami, al que aspira la estrella británica David Beckham, la tienen los electores de la ciudad. Y si deciden que no, pues los dos alcaldes envueltos en el asunto han dicho que acataran la opinión del pueblo.
El alcalde de Miami, Tomás Regalado, que apoya la construcción del estadio, quiere que la opinión pública diga la última palabra. “Es una cuestión moralmente necesaria”, enfatizó a DIARIO LAS AMÉRICAS, porque “con todo lo que ha pasado con el estadio de los Marlins y los terrenos de los museos, debemos escuchar al pueblo”.
El otro gran promotor del estadio es el alcalde del condado Carlos Giménez, que acepta el referendo a regañadientes, según fuentes consultadas por este periódico, aunque se muestra apacible con el resultado que tenga.
“El alcalde siempre ha dicho que lo importante no es si se hace en [en un terreno que sea propiedad de] la ciudad o el condado sino que [hacer] un referendo es [lo] importante, porque cuando sucedió lo de los Marlins, él quería una consulta y no se hizo. Ahora se debe hacer”, explicó su portavoz Michael Hernández.
La cuestión es si los electores no lo aprueban como reacción a la suspicacia creada a raíz de la experiencia anterior.
“Si el estadio es aprobado, será un proyecto financiado con fondos privados. Pero si se rechaza, no van a poder contar con el condado porque no vamos a pagar nada”, subrayó Hernández.
Implicaciones
El proyecto implica la construcción del estadio en un área adyacente al actual estadio de los Marlins, en la Pequeña Habana, pero la única contribución que la ciudad tendrá será el hecho de que no cobrará impuestos por el terreno, cuya propiedad es transferida a la Junta Escolar, que tiene entre sus miembros a Raquel Regalado, hija del alcalde de Miami y aspirante a la alcaldía del condado.
“Creo que esto es un riego que hay que correr. La gente de Beckham lo entiende y nos han dicho que están dispuestos a desasociarse de cualquier negocio si el pueblo no está de acuerdo. No quieren controversia”, explicó el alcalde Regalado.
Pero esto no implica que la idea esté muerta tras una votación desfavorable. Existe la posibilidad de que el estadio sea construido en una zona que no pertenezca a la administración del Condado. “Sería una buena idea porque, de todos modos, aquí hay público para ese deporte”, admitió Regalado.
Para Giménez, según su portavoz, lo mejor sería que el estadio estuviera dentro del área metropolitana de la ciudad porque “siempre vamos a tener público”. Pero, subrayó, “todo tendrá que ser hecho con fondos privados”.
El referendo sobre el estadio no es obligatorio pero su resultado es vinculante, pero Regalado quiere incluirlo en la boleta en una fecha tan temprana como en marzo, coincidiendo con las elecciones primarias presidenciales porque, en este caso, no le costará un centavo al erario. Aunque, aún queda un largo proceso que cumplir.
“La comisión de Miami tiene que definir los términos de la pregunta, el llamado lenguaje. Pero creo que, por primera vez, la ciudad está haciendo un buen negocio porque vamos a recibir por la parcela de tierra más valor de la que tiene. Van a pagar a la ciudad 850.000 dólares al año, durante 50 años, que nos permitirán mantener parques. Es una tierra que ahora tampoco paga impuestos. Está financieramente ociosa”, explicó.
Y si pierde el referendo, ¿es una derrota personal?
“Lo vería apenas como un ejemplo de crítica que la gente tiene hacia el Gobierno. Yo pido lo que creo. He arriesgado el hecho de que no haya estadio allí pero creo que vale la pena. A votar y veremos”, señaló el edil de Miami.
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