MIAMI.- La hija del opositor Osvaldo Payá, fallecido en extrañas circunstancias, lanzó ayer una gravísima acusación contra una de las personas que participan por parte del Gobierno de la isla en las conversaciones con Estados Unidos. Rosa María Payá aseguró que Gustavo Machín es un oficial ligado a la muerte de su padre y la de Harold Cepero. La joven mantuvo además en conversación con DIARIO LAS AMÉRICAS que ha puesto este hecho en conocimiento de Roberta Jacobson: “Cuando Aron Modig ofreció la rueda de prensa en Cuba [después del accidente], Gustavo Machín estaba al lado de él y tenía información de que Modig estaba secuestrado [por el Gobierno de Cuba, de quien se especula, presionó al joven sueco para dar una versión falseada de los hechos]”.
Una investigación con garantías sobre la oscura muerte de Payá y Cepero es una de las muchas asignaturas pendientes con las que el Gobierno cubano se ha sentado a negociar con EEUU. Ahora que Jacobson conoce la relación de Machín con el suceso, no estaría de más que pusiera sobre la mesa este asunto en un diálogo en el que el Gobierno de Obama ha puesto mucho y no ha recibido nada a cambio. La misma Rosa María Payá ha dado altavoz a lo que piensan muchos cubanos de dentro y fuera de la isla: “Nosotros no estamos en contra de que existan conversaciones con Cuba, es más, no estamos a favor del aislamiento del pueblo cubano, pero queremos precisar que EEUU está conversando con un Gobierno ilegítimo porque en mi país no hay elecciones libres y plurales desde hace 56 años, todos los días violan los derechos humanos de sus ciudadanos”.
Sin duda, el día que los cubanos recuperen la libertad será imprescindible aclarar los abusos de la dictadura y esclarecer muertes tan dramáticas como la de Payá y Cepero.