SAN PETERSBURGO.- "Sabía que Dios está con nosotros y no nos iba a dejar afuera", indicó Leo Messi tras la clasificación agónica de Argentina para los octavos de final del Mundial de Rusia 2018.
En declaraciones a TyC Sports nada más terminar el encuentro ante Nigeria en el San Petersburgo Stadium, Messi comentó que caer eliminados a las primeras de cambio hubiera sido "un final muy feo y muy injusto" para toda la plantilla.
"Estábamos confiados de que lo íbamos a sacar, de que íbamos a ganar este partido. No esperábamos la complicación esa de que nos empataran y tener que ir a buscar el partido, con lo que eso significa, nerviosismo, ansiedad, el tiempo, todo", indicó.
"La verdad es que es maravilloso poder ganarlo de esta manera, que haya hecho el gol Marcos, que se lo merece por todo lo que peleó por estar acá. Es una alegría merecida después de todo este tiempo que venimos pasando con sufrimiento", aseguró.
Messi recordó que merecieron ganar el primer encuentro y que en el segundo, frente a Croacia, estuvieron bien hasta el 1-0, pero que después se desordenaron, dejaron espacios y concedieron otros dos goles "innecesarios" que puso a Argentina en una situación "tan complicada" para este partido.
Así mismo, aseguró que el apoyo de la afición desde el inicio del Mundial fue "impresionante" y que quedó demostrado que "la camiseta de la selección está por encima de todo".
En todo caso, Messi aseguró que "el Mundial demuestra que nadie regala nada". "Veíamos ayer a España y Portugal, que eran favoritos para clasificar y terminaron sufriendo. Cada partido es una batalla muy difícil de ganar", apuntó.
FUENTE: Agencia EFE