lunes 16  de  junio 2025
ANÁLISIS

Las protestas universitarias evidencian el Estado fallido de Cuba comunista

El más alto perfil educacional en el sistema cubano es la Universidad, donde la mayoría de los padres desean que sus hijos estudien, por ser su sueño y/o una gran valoración de estima social

Diario las Américas | OSCAR ELÍAS BISCET
Por OSCAR ELÍAS BISCET

La vida humana es un tesoro precioso y se hace más maravillosa con la libertad. Su discernimiento personal se adjunta a la conciencia histórica de nación y una sociedad libre.

El espejismo en la vida no estará en su presencia y de la genuflexión de miseria moral a de rodillas de mutuo proprio, mientras la espada de la justicia y la libertad sostienen sobre sus hombros y se levantaron con tremendo heroísmo en la transformación de los nuevos ciudadanos, para la construcción de una sociedad libre.

Aquellos recientes libertos de la nueva esclavitud en el país lo fueron desde el vientre materno y en sus breves e inocentes vidas pasaron por el riguroso sistema educativo, único, estatal y obligatorio, controlado por el Partido Comunista de Cuba (PCC), Partido-Estado, y les impusieron la mayor censura al pensamiento libre a través del adoctrinamiento escolar, académico e intelectual.

El más alto perfil educacional en el sistema cubano es la Universidad, donde la mayoría de los padres desean que sus hijos estudien, por ser su sueño y/o una gran valoración de estima social.

Sin embargo, todos los estudiantes universitarios tuvieron que mostrar abiertamente sus simpatías al régimen tiránico comunista para ingresar en la alta casa de estudio; porque la universidad es para los revolucionarios.

Realmente, asociarse tempranamente a instituciones comunistas como la Organización de Pioneros en la educación primaria y mostrar su pertenencia pública con una pañoleta (pañuelo) en el cuello durante los actos políticos ideológicos de matutinos diarios y su estancia en las escuelas cubanas.

Cuba, una sociedad de miedo, obliga el uso del uniforme comunista escolar y su máximo símbolo, la pañoleta, fue desafiado por muy pocos durante estos 66 años de tiranía totalitaria comunista; solo un pequeño grupo de religiosos fieles a sus principios bíblicos y los padres tuvieron que sufrir la encarcelación injusta o el cese de la patria potestad.

En verdad, hoy todos los niños llevan el pañuelo pioneril comunista, excepto los descritos en el párrafo anterior, sin importar que los padres sean disidentes, "contrarrevolucionarios", pues caería sobre ellos todo el peso severo del Gobierno a través del terror de estado.

Cuba castrocomunista es una verdadera tiranía, la diferencia con los regímenes autocráticos latinoamericanos sería en lo que alguien llamó una dictablanda. Por esto las recientes y sui generis manifestaciones estudiantiles universitarias son un despertar heroico en Cuba.

En muchas universidades cubanas protestaron contra el alza de los precios de Internet por la empresa Etecsa, el tarifazo, y estuvo entre ellas la Universidad de La Habana, otrora la Real y Pontificia Universidad de San Gerónimo de La Habana, donde estudiaron muchos de los grandes patriotas como Carlos Manuel de Céspedes, Perucho Figueredo, Francisco Vicente Aguilera e Ignacio Agramonte.

Estas acciones huelguísticas universitarias me recuerdan las palabras de Céspedes:

"Señores: La hora es solemne y decisiva. El poder de España [Cuba comunista] está caduco y carcomido. Si aun nos parece fuerte y grande, es porque hace tres siglos [66 años] que lo contemplamos de rodillas. ¡Levantémonos!".

En esa misma Universidad también Agramonte defendiendo su tesis de grado en Derecho y concluyó:

"Centralización absoluta destruya ese franco desarrollo de la acción individual, y detenga la sociedad en su desenvolvimiento progresivo, no se funda en la justicia y en la razón, sino tan sólo en la fuerza; Ya el Estado que tal fundamento tenga, podrá en un momento de energía anunciarse al mundo como estable e imperecedero, pero tarde o temprano, cuando los hombres, conociendo sus derechos violados, se propongan reivindicarlos, oirá el estruendo de cañón anunciarle que cesó su letal dominación".

Del mismo modo sobre el socialismo se pronunció el apóstol José Martí:

"...Enseñar cómo se va, por la excesiva protección a los pobres, a un estado socialista que sería a poco un estado corrompido, y luego un estado tiránico".

Y también asegura Martí:

"Dos peligros tiene la idea socialista, como tantas otras: el de las lecturas extranjerizas, confusas e incompletas, y el de la soberbia y la rabia disimulada de los ambiciosos, que para ir levantándose en el mundo empiezan por fingirse, para tener hombros en que alzarse, frenéticos defensores de los desamparados".

José Martí, revolucionario independentista, no pudo estudiar en la Universidad de La Habana por estar primero detenido y prisioneros con 16 y 17 años, y después desterrado, completó sus estudios de Licenciado en Filosofía y Letras en la Universidad de Zaragoza, España, 1874.

En nuestros días alguien de la vox populi que vivió el socialismo del régimen castrocomunista lo caracteriza así:

"El socialismo es sistema que te quiebras las rodillas para que le tengas que decir gracias por las muletas".

Las universidades cubanas con las protestas en contra del tarifazo de Etecsa, Gobierno, comienzan un proceso civilista de liberación de la dependencia enfermiza de las muletas socialistas.

La juventud cubana, en especial la universitaria, debe acelerar el proceso de maduración cívica y rechazar el régimen inmoral que violenta los más elementales derechos humanos en el país y realizar una metamorfosis positiva, ahora en la juventud no en la adultez, como los grandes personalidades estadistas Washington, Churchill, Reagan o Gandhi. También lo hicieron los padres patrios cubanos al rechazar al régimen tiránico monárquico para la edificación de la República de Cuba.

Las manifestaciones universitarias fueron un regalo para la libertad y, sobre todo, para el pueblo cubano, cuando el dictador Raúl Castro pensaba festejar su cumpleaños 94 con su testaferro el 3 de junio y el 6 de ese mes el aniversario de la fundación de los órganos represivos sostenedores de la tiranía, la Policía política (DSE), todos tuvieron el sobresalto de vagar perdidos en penumbras ante una juventud que se niega a la sumisión y desea ser libre.

Estos actos de civismo universitario han quebrado profundamente al régimen castrosocialista, que junto a las manifestaciones populares del 11J y el fallo de seguridad de las tropas cubanas castristas en Venezuela (comandos se llevan al exilio a refugiados en la embajada de Argentina en Caracas) y la grave crisis humanitaria muestran un régimen comunista en colapso -las fuerzas de las armas en un reducido grupo, no sé su disposición a inmolarse- y un Estado fallido en Cuba.

Esperanzador, el régimen de terror castrocomunista encontró un fuerte y digno rival en la juventud universitaria, solo continuar en la profundización liberadora de la conciencia cívica, en el ejercicio de los derechos humanos básicos y las libertades fundamentales, ahondando en los métodos de la desobediencia civil y acelerará el camino hacia la libertad de Cuba.

¡Recibe las últimas noticias en tus propias manos!

Descarga LA APP

Deja tu comentario

Te puede interesar