La democracia, la libertad política y religiosa, una verdadera economía de mercado. Ésos son los regalos que espera el pueblo cubano
A pocos días del 55 aniversario de la ninstauración de la dictadura castrista nen la isla, los cubanos se sentarán en el martes, un año más, a celebrar la cena nde Nochebuena. Entre las muchas cosas nque esa dictadura ha intentado despojar na sus súbditos es el de conservar las ncostumbres y tradiciones unidas a la raíz ncatólica. Aun así el espíritu navideño se nimpondrá una vez más a los anhelos totalitarios ny, aunque con la limitación de la nescasez y el bajo presupuesto en la mayoría nde los hogares cubanos, se celebrará nen familia. n
Al mismo tiempo, esta fecha tiene un nsabor agridulce por la cantidad de familias nrotas tras la llegada de la revolución nal poder. Esa noche, muchos cubanoamericanos nbrindarán pensando en sus familiares nque están en la isla. A 90 millas, ntambién les echarán de menos. Es la triste nmetáfora de un país dividido por el odio ny la imposición que los hermanos Castro ninstauraron hace más de medio siglo. n
La Navidad es tiempo de deseos y propósitos npara el año entrante. Uno que nos nharía tremendamente felices a los que nhacemos DIARIO LAS AMÉRICAS es que ndentro de un año, el 24 de diciembre de n2014, la situación en Cuba haya dado un nvuelco para mejor. Festejar en libertad, nsin imposiciones ni persecuciones sería nla mejor noticia que desearíamos publicar npara las futuras Navidades. n
La democracia, la libertad política y religiosa, nuna verdadera economía de mercado. nÉsos son los regalos que espera el npueblo cubano. Ojalá, el 2014 sea el año de nla reconciliación, pero no hay reconciliación nsin Justicia y para que haya justicia ntiene que haber un reconocimiento del ndaño que por 55 años se le ha hecho a los ncubanos de bien, los de allí y los de aquí.