LA HABANA.- El régimen de Cuba informó que el esperado aumento en los precios de la gasolina, programado para entrar en vigor el 1 de marzo, será aún más pronunciado de lo anticipado inicialmente. En un movimiento que sorprende a muchos, el incremento será de más del 400%, en lugar del 25% previamente anunciado, según declaraciones del ministro de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro.
Según lo anunciado, el precio del litro de gasolina regular pasará de 25 pesos cubanos (aproximadamente 0,20 centavos de dólar) a 132 pesos (alrededor de 1,10 dólares), representando un incremento del 428%, mientras que la gasolina especial aumentará de 30 (unos 0,25 centavos de dólar) a 156 pesos (aproximadamente 1,30 dólares), lo que supone un aumento del 420%.
Esta medida, que también incluye un aumento del 25% en las tarifas eléctricas para los sectores de mayor consumo, se enmarca dentro de un conjunto de acciones destinadas a reducir el déficit fiscal del país. El retraso en su implementación, inicialmente prevista para el mes pasado, se debió a un incidente de ciberseguridad en los sistemas informáticos gubernamentales, según indicaron fuentes oficiales.
Además, también se espera un incremento en el precio del gas licuado, aunque esta medida también fue pospuesta temporalmente. Se ha dispuesto que los turistas extranjeros paguen la gasolina en divisas, mientras que el aumento en los precios mayoristas del combustible para el transporte público y privado aún está pendiente de implementación.
La noticia genera inquietud entre la población cubana, que teme una escalada en los precios y posibles repercusiones económicas. En enero, ante el anuncio inicial, se registraron largas colas en las estaciones de servicio, lo que llevó al régimen a postergar la medida. Este retraso coincidió con la destitución del entonces ministro de Economía, Alejandro Gil, quien había reconocido la insostenibilidad de los subsidios estatales al combustible.
Es importante destacar que en Cuba existen dos tipos de cambio oficiales: uno para transacciones bancarias, fijado en 24 pesos por dólar, y otro para el público en general, de 120 pesos por dólar. Esta diferencia en los tipos de cambio afecta directamente la percepción del impacto económico del aumento de precios en la población.
Cuba continúa enfrentando una crisis crónica en el suministro de combustibles, atribuida en parte al incumplimiento de compromisos por parte de los países proveedores de crudo. Aunque se han buscado alternativas, como acuerdos con Venezuela, México y Rusia, el país sigue lidiando con desafíos económicos significativos, incluyendo una contracción del 2% en su economía durante el año pasado y una inflación del 30%.
FUENTE: Con información de AFP