La conversación que plantea el presidente de EEUU es la última oportunidad para que el dictador deje el poder y haya una transición pacífica en Venezuela
El autoritario Nicolás Maduro durante una conferencia de prensa en Caracas, el 15 de septiembre de 2025.
AFPMIAMI.- A Nicolás Maduro le llegó la hora de dejar el poder que mantiene de modo fraudulento en Venezuela para iniciar una transición pacífica y democrática, por las buenas o por las malas, según el militar retirado José Adán Gutiérrez, especialista en seguridad nacional y gestiones diplomáticas, y miembro sénior del Instituto de Inteligencia Estratégica de Miami.
El experto afirmó que el mensaje del presidente de EEUU, Donald Trump, en el que plantea querer hablar con el dictador y jefe del Cartel de los Soles venezolano es el ultimátum de diálogo que existe en todo un proceso de actividad militar y que precede a toda acción terminal.
“La Casa Blanca, dentro de la estrategia de que salga Maduro del poder, está dando la última oportunidad para que entregue y que pueda haber una transición pacífica en Venezuela, y allí está la clave”, afirma el experto. “No hay nadie más arriba del Presidente y una vez que Trump hable con Maduro y no surja un acuerdo, entonces hay que esperar acción”.
Y apuntó que esta decisión de Trump no tiene precedentes desde la Segunda Guerra Mundial.
“Es la primera vez, después de ese suceso mundial, que un presidente llama a un enemigo para decirle ‘Hey, te damos una oportunidad”.
El martes pasado, el presidente estadounidense reafirmó su propósito de querer hablar con Maduro “de una manera fácil” en función de “salvar vidas”, pero advirtió que también podría “hacerlo por las malas” de no lograrse una llamada.
"Si podemos salvar vidas, si podemos hacer las cosas por las buenas, está bien. Y si tenemos que hacerlo por las malas, también está bien", dijo al insistir en sus planes de conversar con el jefe del régimen venezolano, en medio de las crecientes tensiones entre ambos. “Podemos hacerlo fácil”, señaló.
Para Gutiérrez, “la definición es muy clara”.
“Toda la presencia de EEUU acumulada en el Caribe y toda la infraestructura alrededor de la flota estadounidense ya no es para una simple misión contra narcóticos, al principio esta misión tuvo cobertura legal para la administración mientras iban desarrollándose las cosas”, dijo.
Agregó que ya con la designación dada al Cártel de los Soles de “organización terrorista” y al jefe del Cartel (Maduro) por parte de la administración Trump ya posee blindaje “no solamente legal, sino moral y ética para que en algún momento, si se toma la decisión de atacar directamente a blancos dentro de Venezuela, pueden hacerlo, lo lograron con esa designación”.
Subrayó que la conversación entre Trump y Maduro ´”es el paso previo a la acción” y la definen las palabras del presidente.
“Si alguien no puede leer eso claramente es que no entiende el proceso, pero eso es la última oportunidad, le dice ‘lárgate de allí y ayuda a tu país a que haya una transición pacífica’”.
Maduro, con cada vez menos arrastre popular, se niega a cambiar su posición ante las presiones de EEUU. “La patria tendrá nuestra vida si es necesario”, dio en un acto en un cuartel militar, y pidió a sus seguidores no fallar.
Para Gutiérrez, el desenlace es ineludible y “puede ocurrir en cualquier momento”.
“Todas estas semanas transcurridas en el Caribe, las fuerzas militares han estado calibrando la flota, recalibrando con drones independientes que se
integran a nivel de doctrina, estrategia para tomar en algún momento la decisión”.
Y fue contundente al detallar los escenarios, como experto militar con experiencia naval en Panamá:
“Aquí solo hay dos posibilidades: que digan ‘ya lo asustamos y nos vamos‘, cosa, que no va a pasar porque, que yo recuerde sobre movimientos militares, EEUU nunca se ha echado para atrás”.
Recordó que se hizo en Haití cuando el controvertido gobernante Jean-Bertrand Aristide (1991, 1993-1996 y 2001 y 2004) se negaba a dejar el poder, pero decidió hacerlo antes de que llegara al país el entonces presidente Jimmy Cartel para hablar con él, razón por la cual la flota regresó a su base.
“En ese momento se logró el propósito, pero desde entonces las tropas nunca se han retirado, sobre todo a este nivel” del conflicto con Venezuela.
Descartó además que EEUU pueda retractarse de actuar. “Eso sería catastrófico para la administración del presidente Trump”.
El presidente Trump tendría los cálculos bien claros, y también el objetivo.
“Esta es la primera vez que se llama a un diálogo en una eventualidad como esta. He observado al propio presidente tratar de hablar con su enemigo y mi referencia inmediata la viví personalmente en Panamá, pero allí solo una serie de emisarios, altos funcionarios estadounidenses, hablaron con Manuel Noriega directamente con Noriega, o por teléfono o en persona”.
“Pero nunca lo hizo el propio presidente”, indicó el entonces Primer Agregado Naval en ese país centroamericano (1997-2000)
FUENTE: Entrevista al militar retirado José Adán Gutiérrez, especialista en seguridad nacional y gestiones diplomáticas.
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