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MIAMI.- España cuenta con un sinfín de ciudades y pueblos para visitar, pero como el Camino de Santiago, que abarque tanta historia, cultura y gastronomía, no hay otra ruta mejor para conocer el país ibérico.
De hecho, el Camino de Santiago es el conjunto de sendas y trayectos por donde transitan miles de peregrinos, con sus mochilas a cuestas, que se dirigen a la tumba de Santiago el Mayor, situada en la catedral de Santiago de Compostela.
Para unos es un acto de fe cristiana y para otros es el placer de rendir honor a los antepasados del Medioevo, entre sudor, cansancio y satisfacción por llegar a una meta por caminos que denotan numerosas manifestaciones de arte y de cultura, de fervor, de hospitalidad y de experiencias que significan la esencia histórica del Viejo Continente.
La Historia cuenta que Santiago el Mayor fue uno de los principales apóstoles de Jesucristo y que después de llevar su palabra a Hispania, hoy España y Portugal, y otros rincones de Europa, regresó a Judea, donde fue decapitado por sus creencias religiosas cristianas, bajo el mandato del entonces rey Herodes Agripa I en el año 33.
Los historiadores sostienen que dos discípulos del apóstol Santiago, Atanasio y Teodoro, optaron por llevar el cuerpo inerte del mentor a tierras del occidente europeo.
Los discípulos, según los apuntes de la época, arribaron al río Sar, donde hoy se encuentra la localidad de Padrón, en Galicia, y enfilaron tierra adentro en busca de un lugar donde dar sepultura al apóstol.
Tras largos días de camino, el lugar escogido fue un monte iluminado por una noche estrellada, cerca de una localidad que tenía por nombre Assegonia y que más tarde nombraron Santiago de Compostela por sus destellos de estrellas, del latín campus stellae.
Compostela
Dicho esto, vale subrayar que la tradición y la conveniencia han trazado más de 10 caminos que conducen a la tumba del apóstol, que fue descubierta por un creyente y ‘confirmada’ por el obispo Teodomiro alrededor del año 813.
En el lugar, el entonces rey de Asturias, Alfonso II el Casto, mandó a construir una iglesia en torno a la tumba, donde hoy domina el paisaje el majestuoso templo románico, gótico y barroco Catedral de Santiago de Compostela, construido más tarde, entre los años 1075 y 1211.
Caminos
Los más de 10 caminos están hoy muy bien acondicionados con señales, albergues, moteles, hoteles y pueblos donde pernoctar. Además, hay autopistas, trenes y aviones que conducen a Santiago de Compostela, en el que se encuentra Praza do Obradoiro, lugar que sirvió a los artesanos y arquitectos para instalar sus talleres (obradoiros, en gallego) mientras construían la majestuosa catedral.
El camino más largo y concurrido es el llamado francés, que surge en la comarca francesa de St. Jean-Pied-du-Port, al este de Navarra, y transcurre por 477 millas, unos 769 km, entre montañas, valles, pueblos y ciudades.
Este camino ‘mayor’ requiere al menos 18 días para llegar a Santiago, si se anda una media de 13 millas, 21 km, al día, y es sin duda el más pintoresco y acogedor.
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Andar
Bastaría ver el mapa, imaginar el andar por elevaciones, llanuras y montes que conllevan a localidades de ensueño, que solo la historia, la cultura y la naturaleza han logrado construir.
Tras recorrer los verdes campos y elevaciones de los Pirineos, Navarra y el País Vasco, las praderas y viñedos del antiguo reino de León, se perciben las alturas de Galicia en el poblado de O Cebreiro, donde se encuentra la iglesia de Santa María y el párroco franciscano Paco Castro que recibe a los peregrinos en la puerta del santuario.
Sello en mano, que es depositado en forma de cuño en el llamado pasaporte del peregrinaje por cada parada, y que más tarde es bendecido con un certificado de meta cumplida en Santiago, el largo camino continúa hasta llegar a Monte do Gozo, desde donde se divisan las siluetas de las torres de la Catedral de Santiago.
Hay otros caminos, más cortos e igualmente conmovedores, que surgen desde lugares como Oviedo, 321 km, unas 199 millas, o el llamado portugués, que comienza en Lisboa y recorre 616 km, lo que corresponde a 382 millas.
No obstante, hay un camino portugués más corto, que comienza en Porto, con 240 km, 149 millas, que puede acortar aún más si comienza en la localidad de Valença, a 100 km, 62 millas, de Santiago, tras cruzar el puente que cuelga sobre el río Miño y entrar en la comarca de Tui en tierra gallega.
Este trayecto, ‘más corto’, trascurre por senderos de Rías Baixas, donde encontrará el poblado de Padrón, lugar en el que la Historia recoge la llegada del cuerpo inerte del apóstol Santiago, en el que los productos frescos del mar y el buen vino blanco albariño son valores agregados para tener en cuenta.
Al llegar a Praza do Obradoiro, donde luce esbelta la gran catedral, la gente se abraza y lanza vítores de alegría por haber cumplido la meta de un largo camino.
Datos
Si necesita más información puede consultar la Agencia de Turismo de Galicia en Turismo.gal, Consejo Xacobeo por Consejojacobeox21.es y la Consejería de Turismo de España en Miami en Spain.info en Internet.
Para viajar a España, no necesita visa si porta pasaporte estadounidense. Si su documento tiene otro origen, debe consultar la representación diplomática del país europeo.