MIAMI.-GEYSELL CISNEROS
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Mario Kreutzberger, de 75 años, el gigante de la televisión hispana, le extiende sus brazos a una nueva etapa en la que regresa a los medios con proyectos que siempre quiso emprender
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Con una trayectoria excelente en la televisión tanto nacional como internacional, y después de haberle dicho adiós a Sábado Gigante, programa que le regaló el corazón de su público, Don Francisco emprende un nuevo comienzo.
“Primero debo agradecerle a Univision estos treinta magníficos años que tuve la oportunidad de estar en pantalla y compartir con muchos colegas y recibir el apoyo del público. Ahora me siento muy honrado de que finalmente vaya a colaborar con Telemundo”, expresó el gigante de la televisión hispana a DIARIO LAS AMÉRICAS.
Aunque tiene amplio conocimiento del mundo del entretenimiento, para Don Mario, como también lo conocen, tomar una opción fue un proceso no tan fácil de asimilar.
“Me tomó mucho tiempo decidirme, pero reconozco que Telemundo ha demostrado en los últimos años que es un canal con grandes perspectivas de crecimiento y que trabaja conjuntamente con la comunidad hispana para ofrecerle una programación novedosa”, agregó.
Pero algo muy particular hizo que centrara su mirada en la cadena que compite con su antigua casa televisiva.
“Lo que más me llamó la atención fue la posibilidad de hacer esta asociación de producción, tener la oportunidad de crear nuevos formatos para los talentos del canal, puesto que los proyectos están creciendo y sé que en Telemundo están esforzándose para conseguir mayores metas”, confesó.
A pesar de ser un profesional consolidado, Don Francisco es un hombre muy humilde en todos los aspectos.
“Hay mucho por cultivar todavía, por lo que estoy dispuesto a estar en las dos áreas. Quiero aportar y aprender, y desde esa postura compartir lo que he cosechado durante 30 años en la televisión”, comentó.
Su capacidad para soñar sigue siendo uno de sus motores impulsores.
“Desde hace muchos años he soñado hacer nuevos proyectos. Cuando terminé Sábado Gigante cerré esa cajita de 53 años, y alguien me regaló una nueva y la estoy tratando de llenar, por el momento con sueños pero más adelante la quiero llenar de éxitos”, resaltó.
Con respecto a esta nueva etapa, se encuentra preparando trabajos muy interesantes.
“Le presenté a Telemundo una serie de proyectos en los que tengo la oportunidad de crear, por el momento no puedo comentarlos, pero quiero hacer en el área personal algunas cosas distintas y también pretendo colaborar con el departamento de noticias en algunos proyectos especiales, que aún no están definidos”, aseveró.
De Sábado Gigante, no solo se llevó las cosas positivas, sino también las del otro lado, esas que no se transmiten en la pantalla chica.
“Tuvo todo un proceso. Primero fue una desilusión porque, aunque yo sabía la fecha que se dejaría de estar al aire, originalmente íbamos a terminar de otra manera, pero las cosas cambiaron en la televisión y en la empresa también. Me costó un poco reponerme de la destitución, pero de la depresión hice una ilusión”, agregó.
El final de esta etapa en su vida también lo llevó a impulsar nuevas ideas.
“Pocas cosas cambiaron porque abrí una pequeña oficina. Empecé a conversar con mis compañeros, de los que soy representante de algunos, y comenzamos a soñar, a vislumbrar nuevos horizontes, y en eso todavía nos encontramos. Ahora tenemos que poner en práctica todo lo que creamos, decidir si somos capaces de hacerlo o no”, comentó.
Sobre la cadena que le abre las puertas y las fechas decisivas para reencontrarse con su público, reveló detalles importantes.
“Recién estamos conversando con los ejecutivos de NBC Universal y con César Conde, a quien conozco desde hace mucho tiempo. Aún falta un tiempo para que concretemos y nos pongamos de acuerdo”, adicionó.
Un día nuevo, es así como Don Francisco define los nuevos desafíos que llegan a su vida, mismos que en otros tiempos enfrentó con su equipo de trabajo, y que hoy reconsidera reunir de alguna manera.
“Para mí este es un nuevo comienzo con la maleta llena de experiencias, pero no le puedo asegurar nada a nadie, ni me puedo asegurar nada a mí mismo. Tenemos que poner esta maleta sobre la mesa y ver cómo podemos distribuir todo lo que hemos cosechado. De ahí en adelante podremos incorporar a todos porque creo que, como hemos trabajado juntos, tenemos la ventaja de conocernos, lo que nos permite ahorrar mucho tiempo. Así que todo es posible”, afirmó.
Dentro de sus metas, busca impulsar el crecimiento de la nueva empresa con la que comenzará a colaborar.
“Aportaría mi experiencia de treinta años en la televisión de EEUU y mi conocimiento del mercado hispano. También el haber desarrollado muchos formatos y segmentos, que ahora pueden ser reformados e inspirados en los talentos de Telemundo, aunque debemos saber que esto requiere tiempo para determinar qué cosa le ajusta a quien, porque como en las cosas de la vida, no todos servimos para todo”, concluyó.
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